SE CELEBRÓ EN GIJÓN UNA "YINCANA" PARA CONOCER LA LABOR DE MARY BEARD





Ocho pruebas para acercar al público el
trabajo de la galardonada con el Princesa
de las Ciencias Sociales
Gijón ha dedicado hoy a la historiadora Mary Beard, Premio Princesa de Asturias de las Ciencias Sociales, una yincana en la que han participado más de 500 personas, según la Fundación.
En total, ocho pruebas para conocer más del mundo clásico, y acercar al público el trabajo de la galardonada.

Mañana Mary Beard tendrá su primer contacto con Asturias.




Concede una entrevista en la que muestra sus ganas de explorar Asturias
La académica Mary Beard prepara ya en Cambridge el discurso con el que agradecerá en el Campoamor el Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales que le ha sido concedido este año.
A menos de un mes de su viaje a Asturias, ha recibido a TPA en su casa donde nos ha dicho que tiene la agenda repleta de actos para la semana que pasará en Oviedo.
Con Mary Beard hemos hablado de su visión de la historia clásica de Roma y Grecia que plasma de manera didáctica en sus libros y documentales pero también de Asturias, un lugar que tiene ya muchas ganas de explorar.
"Cuando esté en Oviedo voy a visitar algunos de los yacimientos romanos de allí, voy a ir al museo y voy a dar una conferencia en la universidad y estoy deseando conocer el lugar porque no he estado allí antes. Me he estado informando y parece impresionante. Tengo una agenda con muchas actividades, como encuentros con escolares y cosas así pero espero tener tiempo para explorar el lugar".
En la prestigiosa Universidad de Cambridge ha enseñado Mary Beard buena parte de su vida. Una excedencia le ha permitido ahora, a sus 61 años, detener su carrera docente para dedicarse a escribir sobre el pasado.
"Aprendemos del pasado a pensar en los problemas de otra manera, quiero entender que es una cuestión de lo que la gente llama tomar conciencia, el pasado te hace reflexionar sobre tí mismo".
Roma siempre ha estado en su punto de mira. Le ha dedicado más de 40 años de estudio. Y ésto le ha convertido en la divulgadora de la antigüedad clásica más popular del Reino Unido. Ahí encuentra inspiración para interpretar la actualidad, de la crisis de los refugiados al terrorismo yihadista.
"Si te remontas a la época romana verás que el terrorismo, brutal y horrible, era la reacción de gente que no tenía poder militar. Los romanos eran imbatibles. No nos damos cuenta de cómo nos ven desde fuera. Nos centramos en la historia de Occidente y no nos paramos a pensar en cómo nuestro poder es percibido por el resto del mundo". "No nos vamos a librar del terrorismo a no ser que tengamos en cuenta los factores que lo está causando".
Puntos de vista con perspectiva que no siempre han sido bien entendidos. Tampoco vencedores. En el Brexit, el gran tema del momento en el Reino Unido, milita en el bando de los perdedores.  
"Vivimos en un mundo en el que todo es global: la contaminación, el medio ambiente... son cuestiones internacionales. De alguna manera, tratar de volver hacia atrás...  imagino al Reino unido como un castillo medieval que cierra su puerta levadiza para aislarse. Sería horrible si sucediera."
A un mes de la ceremonia, Mary beard estudia español y prepara con ilusión su discurso ante los reyes, una reflexión sobre la aportación de Hispania al imperio.

La inteligencia superior es fruto de una pequeña mutación genética

La sustitución de una sola letra en el ADN alumbró la inteligencia superior.© MPI f. Molecular Cell Biology and Genetics.

Una pequeña mutación genética fue la que permitió la emergencia de las funciones cognitivas superiores propias del Homo Sapiens, según un estudio publicado en Science Advances. La mutación, identificada por un equipo del Instituto Max Planck de Alemania, consistió en la sustitución de una base nucleica denominada citosina por una guanina, en el seno del gen conocido como ARHGAP11B, informa el citado instituto en un comunicado.
Las bases nucleicas son compuestos orgánicos que constituyen la base de los ácidos nucleicos. Se organizan formando largas cadenas, algunas de millones de nucleótidos encadenados. Existen dos tipos básicos de ácidos nucleicos, el ADN (ácido desoxirribonucleico) y el ARN (ácido ribonucleico), que se diferencian entre sí, entre otras cosas, por las diferentes bases nitrogenadas de citosina y guanina.

Las bases nucleicas desempeñan un papel fundamental en el almacenamiento, expresión y transmisión de información genética en virtud de su capacidad para formar estructuras complementarias. También son indispensables para el metabolismo energético de las células.
Los investigadores observaron que la mutación de la nucleobase citosina por guanina está presente no sólo en todos los humanos modernos actuales, sino también en los neandertales, cuyo cerebro es tan voluminoso como el nuestro, así como en los denisovanos, una posible nueva especie de Homo que vivió entre un millón y 40.000 años atrás en áreas geográficas en las que también vivían neandertales y sapiens.

Según los investigadores, la mutación de la citosina por guanina ocurrió en el seno del gen ARHGAP11B, que apareció cerca de la línea evolutiva de los homínidos cuando se separaron de los chimpancés.

El gen ARHGAP11B que contiene la sutil mutación es el único gen conocido hasta ahora que codifica la síntesis de una proteína específicamente humana. Este gen aumenta la proliferación de células madre o progenitoras neurales, las cuales se transforman en neuronas del neocórtex durante el desarrollo del embrión. El neocórtex es la capa externa de los hemisferios cerebrales implicada en las funciones cognitivas, como el lenguaje y la conciencia.

Los investigadores descubrieron que el gen ARHGAP11B procede de la duplicación del gen ARHGAP11A presente en todo el mundo animal. Cuando se produjo la duplicación, hace alrededor de cinco millones de años, el gen ARHGAP11B perdió 55 nucleótidos, si bien fue la sustitución de una nucleobase (C por G) ocurrida más recientemente la que le otorgó la potestad de producir células madre neurales, y en consecuencia su capacidad de procurar la expansión del neocórtex.


Prueba experimental

Para confirmar el papel del gen ARHGAP11B y de su mutación en la corticogénesis, los investigadores inocularon este gen humano en embriones de ratones. Constataron entonces que el gen introducido aumentaba la producción de células madre neurales, que formaban a su vez nuevas neuronas.

En consecuencia, la superficie del neocórtex de los ratones aumentó, así como la circunvolución cerebral, elevaciones tortuosas de la superficie del cerebro producidas al plegarse la corteza sobre sí misma. Cada circunvolución controla la actividad del músculo esquelético que ocupa el lado opuesto del organismo.

Esto es importante porque el córtex de ratas y ratones es liso, mientras que el aumento significativo de su superficie en los mamíferos superiores más evolucionados produjo la formación de pliegues para acomodarlo a la caja craneal, con volumen todavía restringido.

Es muy probable sin embargo que esta pequeña mutación sea una entre otras muchas que dieron a los seres humanos su inteligencia, resaltan los investigadores.

Fuente: tendencias21.net | 21 de diciembre de 2016

Un calendario solar de hace 4.500 años en la Cueva del Toril (Jaén)

Foto: EXPECTACIÓN. El arqueólogo Manuel Serrano explica a los asistentes cómo la luz solar iluminaba el pentasemicírculo que marca el solsticio de invierno.

Aunque hay quien sostiene que “nunca pasa nada” y es una constante en los personajes de Javier Marías relativizar “lo que vemos y oímos” porque “es solo cuestión de tiempo, o de que desaparezcamos”, que acaben por “asemejarse y aun igualarse con lo que no vimos ni oímos”, ayer, algo más de un centenar de personas asistieron, en Otíñar, a un “momento histórico”. Coincidiendo con el solsticio de invierno, celebraron el año nuevo casi como debían hacerlo los pobladores del valle, 2.500 años antes de nuestra era: con las miradas clavadas en los petroglifos de la Cueva del Toril. Unos grabados que, después de tres años de estudio intenso y altruista por parte de arqueólogos, entre los que se encuentran Manuel Serrano, Narciso Zafra y el arqueoastrónomo César Esteban, se han revelado como un calendario solar único en el mundo. Al menos —puntualizó Serrano en la charla explicativa que ofreció a los asistentes—: “Con estas características no hay registrado nada en bibliografía”.

“Hemos descubierto que, aparte de los cultos al sol, al agua y a la fertilidad —que Eslava Galán describió, por primera vez, en 1983—, tiene una función clara de medir el tiempo”. Y el primer hito del ciclo solar, el solsticio de invierno, está nítidamente marcado con un grabado distinto al resto: cinco semicírculos atravesados por una línea vertical que, cuando recibía la luz solar en el ocaso del invierno, anunciaba a estos habitantes de la Edad del Bronce que el ciclo de la vida renacía de nuevo. Y era “inmutable”. De ahí, también su sentido mágico. Antes de hacer esto, Serrano explicó que el chamán o el astrónomo primitivo que grabó estos círculos concéntricos en la Cueva del Toril “sabía lo que hacía”. Por el estudio de las estrellas, debía conocer cuándo se producía el solsticio de invierno. Y, para adelantarse a ese renacimiento del Sol que se repetía año tras año como única certeza en un mundo de incertidumbres, buscaron un barranco, como el de la Tinaja, “enfocado como una mirilla” hacia la posición en la que se pone el sol en invierno. Después, en la pared de la Cueva del Toril, marcaron, como si de un sancta sanctorum se tratara, el lugar exacto sobre el que incide la última luz del día anunciando, en un juego de sombras, que el ciclo de la vida empieza de nuevo. Pero, ¡ojo!, ni está grabado únicamente el solsticio de invierno (también está localizado el de verano y otras fechas concretas), ni el pentasemicírculo marca un solo día. “Para no correr el riesgo de perder la noción del solsticio, el conteo empieza 10 días antes y hay otros 10 de vuelta”, señaló Serrano, resaltando la sofisticación de este calendario solar y llamando la atención a los asistentes para que supieran que, cuando los egipcios empezaron a construir sus famosas pirámides, “aquí”, en Jaén, “había gente que sabía medir el tiempo”.

Fotos de Francisco Miguel Laguna. (Aquí)

El fenómeno no se pudo comprobar porque una nube se puso por delante. Pero subrayó la presidenta de “Iniciativas, andamios para las ideas”: “Es un descubrimiento de primer orden”. Marina Heredia resaltó que el de ayer era el primer acto cultural en Otíñar después de la declaración de la titularidad pública del paraje. Ahora —reclamaron la activista y el arqueólogo—, es el momento de que las administraciones públicas pasen a la acción con la protección “efectiva” de un yacimiento arqueológico en campo abierto que está expuesto al vandalismo y al saqueo, pese a haber sido el primer BIC de Andalucía que se declaró “zona patrimonial”.

Fuente: Nuria López Priego | Diario Jaén, 22 de diciembre de 2016

La colina de Sangiran

Mandíbula Sangiran 6. Imagen tomada de una publicación de nuestros colegas Jeffrey Schwartz & Ian Tattersall.

La interpretación de los fósiles humanos del yacimiento de Sangiran, en la isla de Java, ha sido desde siempre muy compleja y apasionante. La diversidad de opiniones sobre estos fósiles ha quedado registrada en multitud de artículos científicos, desde que el investigador Gustav H.R. von Koenigsvald presentó sus hallazgos en los años 1930s. La excavación en la colina de Sangiran se interrumpió durante la segunda guerra mundial y pasó mucho tiempo hasta que pudieron reanudarse las excavaciones. En 1996 la UNESCO incluyó este yacimiento entre los bienes del patrimonio de la humanidad.
Uno de los problemas más importantes de este lugar ha sido la determinación de su cronología. Este hecho nos resulta familiar a todos los que trabajamos en yacimientos. Los métodos de datación han ido mejorando desde mediados del siglo XX, pero los problemas para conseguir fechas fiables dependen de muchos factores. La geocronología es un ámbito de la ciencia en continuo progreso. Muchos piensan que tan solo se trata de tener buenos equipamientos para determinar la antigüedad de los yacimientos mediante métodos como la termoluminiscencia, ESR, núclidos cosmogénicos, etc. Nada más lejos de la realidad. El talento de los científicos es la mejor “herramienta” para conseguir resultados. Además, los prejuicios y los paradigmas de una época determinada pueden forzar los resultados de las analíticas, hasta que los buenos especialistas hacen valer sus resultados.
Ese último problema causó no pocas incertidumbres en la interpretación de los fósiles de Sangiran. Este yacimiento está formado por varias capas geológicas superpuestas de manera inclinada. No es sencillo situar en el espacio estas capas, que han quedado expuestas tras la erosión de la colina original. Las capas más antiguas con fósiles fueron fechadas de finales del Pleistoceno Inferior (unos 900.000 años), asumiendo que la primera expansión de los homininos fuera de África había sucedido hace un millón de años. La morfología de las mandíbulas encontradas por von Koenigsvald no cuadraba con esta cronología. Su estudio siempre llevaba a los paleoantropólogos a conclusiones contradictorias. El aspecto tan arcaico de algunos fósiles era comparable al de los australopitecos. El propio von Koenigsvald asignó una de las mandíbulas, Sangiran 6, al género Meganthropus, mientras que otros investigadores llegaron a proponer que esta mandíbula perteneció a un tipo de orangután extinguido. Esta última conclusión ha lastrado la investigaciones de otros yacimientos de Indonesia e incluso de China.

Para entender el registro de Sangiran y el de otros yacimientos de Indonesia tenemos que considerar dos aspectos esenciales. El primero es la cronología. Cuando se supo que los primeros eurasiáticos podían tener un mínimo de 1,8 millones de años (yacimiento de Dmanisi, República de Georgia) los expertos respiraron aliviados. Quizá los fósiles de Sangiran eran más antiguos de lo que se había pensado. Así fue como fueron llegando uno tras otro nuevos estudios de la geocronología de la colina de Sangiran. La mejora de los métodos, la profesionalidad de los científicos y el nuevo paradigma sobre la colonización de Eurasia obraron un “milagro”. Los fósiles de Sangiran se envejecieron hasta 1,5 millones de años. Otros yacimientos de la isla llegaron incluso hasta cifras similares a las del yacimiento de Dmanisi. Los expertos se dieron cuenta de que habían estado dando vueltas a un problema, que se resolvía en parte mediante la nueva cronología.
Cráneo Sangiran 2, obtenido por G.H.R. von Koenigsvald en los años 1930s. La colección de homininos obtenida por este investigador está depositada en el Instituto Senkenberg de Fraknfurt am Main (Alemania).

Por descontado, todavía quedaron cuestiones sin resolver. Las primeras poblaciones que salieron de África pudieron llegar en un tiempo relativamente breve a regiones tropicales y subtropicales de Eurasia sin necesidad de adaptaciones a un clima muy diferente al de las regiones de las que procedían. Pero no debemos olvidar que estas poblaciones se alejaron de su fuente original y quedaron aisladas durante muchos miles de años. La variabilidad que se observa en los restos fósiles de Java puede ser consecuencia de ese aislamiento. Por último, no se nos pasa por alto que en el yacimiento de Dmanisi también se observa una notable variabilidad. Algunos hemos interpretado esa variabilidad como la evidencia de que Eurasia fue colonizada por especies o subespecies distintas. Si esta hipótesis se mantiene con nuevas evidencias, la variabilidad de Sangiran y de otros yacimientos del Pleistoceno Inferior del Sudeste de Asia podría entenderse como la migración hacia el este de grupos de homininos distintos. Mi opinión es que el debate del registro humano de Java y de Sangiran en particular seguirá abierto durante muchos años.

Fuente: quo.es | 22 de diciembre de 2016

Nuevas obras en Valencina para completar la cubrición de las tumbas calcolíticas descubiertas en 2015

Nuevas obras en Valencina para completar la cubrición de las tumbas calcolíticas descubiertas en 2015 SEVILLA | EUROPA PRESS

Las nuevas obras consistirán en "un vallado final, un panel informativo y un bordillo de protección contra accidentes"

La Diputación de Sevilla ha contratado a la empresa Peninsular de Obra Civil y Edificación S.L., por 12.398 euros, para acometer la "fase final" de la cubrición y acondicionamiento de las tres tumbas calcolíticas halladas en 2015 en Valencina de la Concepción, con motivo de las obras destinadas a construir un carril bici entre dicho municipio y Castilleja de Guzmán.

Si bien fue en octubre de 2015 cuando la Diputación inició la cubrición de estos vestigios de la Edad del Cobre descubiertos en el marco de las obras del carril bici construido para conectar Valencina y Castilleja de Guzmán, fuentes de la institución provincial han informado a Europa Press de que tras ser los restos cubiertos mediante áridos inertes y materiales geotextiles, se ha contratado la "fase final" del soterramiento de las tumbas calcolíticas.

En concreto, las obras ahora contratadas por 12.398 euros consisten en "un vallado final, un panel informativo y un bordillo de protección contra accidentes" en el firme, toda vez que la actuación acometida en 2015 supuso ya a las arcas de la Diputación un desembolso de unos 40.000 euros.

MÁS HALLAZGOS EN VALENCINA

El descubrimiento de estos vestigios arqueológicos, recordémoslo, se encuadraba en la construcción del nuevo carril bici que conecta Valencina de la Concepción y Castilleja de Guzmán, un proyecto promovido por la Diputación de Sevilla. Las obras, como se informó en su momento, supusieron el hallazgo de tres tumbas de la Edad del Cobre; una circular tipo 'tholos', otra de lajas y una tercera y última en forma de cueva artificial, todo ello en el tramo del nuevo carril bici más cercano a Valencina de la Concepción.

Y es que 779,16 hectáreas de los términos municipales de Valencina de la Concepción y Castilleja de Guzmán, hay que tenerlo en cuenta, están declaradas como Zona Arqueológica, porque en este perímetro descansan numerosos yacimientos históricos y los famosos dólmenes de La Pastora, Matarrubilla, Ontiveros y de Montelirio, legados de las antiguas culturas calcolíticas que poblaron la zona hace milenios.

Ante este descubrimiento, en cualquier caso, las autoridades apostaron por desplazar el trazado del carril bici y la Diputación, como promotora de las obras, elevó a la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico un proyecto para proteger con un murete o pretil los restos megalíticos y cubrirlos mediante un acristalamiento.

LA COMISIÓN DE PATRIMONIO

Pero después de analizar el asunto, la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico ordenó la cubrición provisional del yacimiento arqueológico mediante "áridos inertes" y materiales geotextiles, a la espera de que las administraciones cosechen fondos para promover una investigación en profundidad sobre estos vestigios históricos de la Edad del Cobre.

Además, y según las fuentes consultadas por Europa Press, la comisión ordenaba la "retirada" de los arranques de muro o construcción acometidos prácticamente al lado de las tumbas megalíticas con motivo del proyecto del carril bici y abrir "un expediente informativo" sobre este aspecto concreto, la instalación de materiales de construcción en el perímetro del yacimiento arqueológico supuestamente al margen del procedimiento reglado que pesa sobre este tipo de actuaciones.

Finalmente, la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico aprobó el proyecto de actuación diseñado por la Diputación para la cubrición del yacimiento y para la demolición de los arranques de muro, aspecto que se completa con los trabajos contratados ahora a la empresa Peninsular de Obra Civil y Edificación S.L.

Fuente: La Información

Descubren un poblado protohistórico en El Espinar

Un arqueólogo de la localidad del Guadarrama segoviano descubre los restos inéditos de un poblado en la comarca de Campo Azálvaro

K. Navas/. El arqueólogo Iván Aguilera Diez, con larga trayectoria de campo y estudio de las cuencas altas de los ríos Moros y Voltoya, ha descubierto un asentamiento arqueológico en la comarca de Campo Azálvaro del que da cuenta en un su artículo ‘Ciudadela finícola: el asentamiento de Canto-Los Hierros’. El descubrimiento finaliza una investigación realizada tras un fortuito hallazgo cerámico en el año 2006.

“Estos restos deberían suponer un giro radical para el Plan General de Ordenación Urbana” de este municipio, en tramitación en la actualidad, opinan desde el Colectivo Azálvaro, ya que según la ONG, afectará al apartado de patrimonio y “puede solventar la ‘urticaria’ del ayuntamiento frente a la demanda reiterada de generar una carta arqueológica local con fines turísticos y culturales”.

Localización  del  despoblado de Canto-Los  Hierros (GRIS).

El asentamiento presenta varias líneas de muralla y casi un centenar de edificaciones. Aparte de interesantes restos del frente nacional y del pastoreo trasterminante, que lo definen como uno de los paradigmas históricos en tierras segovianas.

“Parece insostenible que a día de hoy en el entorno de El Espinar, con sus más de 21.000 hectáreas y su estratégica localización caminera, existan tan solo tres yacimientos catalogados”, afirman desde el Colectivo Azalvaro, que se ha hecho eco de la noticia y ha colgado la investigación en su web para todo aquel interesado en consultarla.

Fuente: El Guadarramista

El egiptólogo José Miguel Parra cree que puede quedar alguna pirámide aún por descubrir en Egipto

En primer plano, algunas de las tumbas de trabajadores que participaron en la construcción de la pirámide del faraón Keops (al fondo) - EFE

Ni todo está dicho sobre el Antiguo Egipto, ni todo lo que se dice tiene fundamento. Basta buscar en Google información sobre las pirámides para toparse con insólitas teorías sobre cómo fueron construidas. El doctor en Historia Antigua con una tesis sobre las pirámides egipcias José Miguel Parrase ha encontrado con todo tipo de casos. «Hace unos meses me saltó un anuncio en el correo de que alguien me había puesto un "loquefuera" en Facebook y me mencionaba. Me acerqué. Estaban hablando de pirámides», relata el egiptólogo español, que se detuvo a explicar cómo «en 2013 se descubrieron unos papiros con el diario del jefe de un grupo de trabajadores de la Gran Pirámide llamado Merer donde cuenta qué es lo que hizo durante tres meses». Creía que el relato en primera persona de este capataz al mando de unos 200 hombres, aderezado con enlaces a artículos científicos donde su interlocutor podía comprobar sus palabras, disiparía las dudas. Ni aún así. «Ah, no. Esto no ha salido en los telediarios, así que es mentira», le respondió.

«Resulta más divertido pensar que hay un misterio en cómo se construyeron, pero hay 110 pirámides en Egipto y todas son diferentes. Las más grandes son las de Guiza, pero tenemos pirámides del Reino Medio que están construidas con ladrillos. Eso no tiene ningún misterio», señala Parra.

¿Desmontar esos falsos enigmas es lo que le ha llevado a escribir el libro «Eso no estaba en mi libro de Historia del Antiguo Egipto» (Almuzara, 2016)?


En parte, sí. Recuerdo que a mi padre le gustaban mucho los libros de Erich von Däniken, el de “los astronautas vinieron en la antigüedad”, y yo me los leía interesado. Como soy curioso, me puse a leer la otra parte que él llama "ortodoxa" entre comillas, como si fuera algo malo, y empecé a ver que lo que decía, eso de que las pirámides las construyeron los extraterrestres, no tenía ni pies ni cabeza. Otros han defendido que las pirámides contienen en sus dimensiones un calendario de eventos mundiales y yo qué sé, pero cuando alguien investiga, comprueba que es mentira. Hubo un señor llamado Charles Piazzi Smyth que midió la Gran Pirámide y dijo que estaba hecha con una unidad llamada la pulgada piramidal, pero otro, Flinders Petrie, se pasó dos años midiéndola y llegó a la conclusión de que no había dado una. Eso se sabe desde 1883 y aún así la gente sigue dándole vueltas. Es sorprendente.

¿Cuántas teorías existen sobre las pirámides?

Uff, ni me preguntes... Las pirámides han sido el edificio más alto del mundo hasta el siglo XIX. Los griegos pasaron a verlas, también los romanos… y siempre han suscitado preguntas. ¿Cómo construyeron algo así? ¿De verdad solo hay una habitación dentro? ¿Y todo esto para una pequeña habitación? Aún nos siguen fascinando. Cuando ves esa barbaridad de altura desde kilómetros de distancia, te sorprendes. Luego te pones a sus pies y pierdes la perspectiva. Parece una montaña. Es impresionante.

¿Esa fascinación que suscitan es lo que les ha salvado de la destrucción a lo largo de la Historia?

En realidad, hasta la Edad Media estaban mejor conservadas. Lo que pasa es que en la Edad Media hubo un terremoto que acabó con la capital y entonces se construyó lo que ahora es El Cairo viejo. Muchos de sus palacios se levantaron con piedras de las pirámides, con las del revestimiento, la piedra más blanca y más llamativa.

¿Cómo eran originalmente?

Tenemos una pequeña idea de cómo eran por el tercio superior de la pirámide de Kefrén, que tiene ese capuchón que todavía mantiene. Y la pirámide romboidal que está en Dashur, al sur de Guiza, que todavía conserva mucho revestimiento.

¿La forma piramidal tenía algún simbolismo?

Retrocedamos en el tiempo. Hasta los años 60, Egipto quedaba inundado una vez al año. Cuando esas aguas comenzaban a retirarse, lo primero que sobresalían eran esas colinas donde empezaba a surgir la vegetación, venían los pájaros… Los egipcios consideraron que el montículo era un símbolo de renacimiento, de vida, que desde allí todo nacía. Al mismo tiempo, cuando empezaron a enterrar a sus muertos, al cubrir el cuerpo con la arena, siempre queda un montículo. A ello se sumaba que las tumbas fueron objeto de robo desde antiguo, porque al muerto se le enterraba con un pequeño ajuar: con un vaso o un peine de marfil, alguna figurilla, o alguna ofrenda. Si había pasado algún tiempo, se encontraban con que el cuerpo estaba momificado. Parecía estar vivo. Los antiguos egipcios juntaron esos dos simbolismos en las pirámides. Porque esa es una costumbre de los antiguos egipcios, que nunca se deshacían de lo que les había valido ideológicamente.

Primero hicieron las mastabas, como una colina. En un momento dado, Zoser quiso que la suya fuera más grande y ordenó construir la primera pirámide escalonada. La tumba se convirtió en una colina para subir al firmamento, porque el rey tenía que reunirse en el más allá con los dioses, que eran las estrellas circumpolares, las que nunca desaparecen del firmamento. El jeroglífico que significa ascender tiene la forma de una pirámide escalonada. Y cuando en la IV dinastía la religión pasó de ser estelar a solar (el dios Ra), se pusieron las paredes lisas porque la pirámide se convirtió en una especie de rayo de sol petrificado.

Además la forma de pirámide es lo más sencillo de construir mecánicamente en altura sin que se te caiga encima. Por eso es una forma tan común en muchas culturas. Esa es la relación, nada de que cruzaron el océano para ir a México y cosas de esas extrañas que dice la gente.

En tu libro explicas que no fueron construidas por esclavos.

No eran esclavos. Esta idea puede tener más explicación porque al pensar en el mundo antiguo, nos viene a la cabeza el mundo antiguo griego o romano, que eran sociedades esclavistas. Cuando Heródoto llega a Egipto y ve las pirámides, no puede imaginar otro modo de hacerlas que no fuera con esclavos. No se le ocurre que cuando se construyeron las pirámides éstas eran una necesidad vital desde el punto de vista ideológico, y también económico porque puso en marcha circuitos económicos que una vez en marcha se mantenían a través de construir más pirámides. Ideológicamente era muy importante porque en el Reino Antiguo, que es cuando se construyeron las grandes pirámides de Guiza, solo el faraón llegaba al más allá y con él, sus súbditos conseguían revivir en el más allá también. Por eso todo el mundo tenía interés en que el faraón tuviera su pirámide.

Las pirámides de Guiza- AFP

Sabemos que los trabajadores de las pirámides no eran esclavos, porque tenían suplementos de proteína animal, algo que no era lo normal entonces. Los antiguos egipcios tenían una dieta sobre todo vegetal, comían muy poca carne (solo la nobleza y la familia real) y estaban siempre en el borde de la inanición. Sabemos que había centros de producción en el delta que se dedicaban a abastecer de carne a los trabajadores. Se han encontrado restos de cordero, de buey… Era un buen trabajo construir las pirámides, aunque duro, difícil y peligroso. Hay un cementerio en Guiza con unas 600 tumbas de trabajadores y al examinar sus restos nos encontramos que tienen las deformaciones en los huesos propias de gente que trabaja trasladando grandes pesos, con la columna machacada, con roturas en los antebrazos y los brazos, pero sabemos que estaban bien tratados porque esas roturas están bien alineadas. Había gente que sabía de medicina que les entablilló bien las roturas.

¿Qué opinas de las anomalías de la pirámide de Keops detectadas por el proyecto Scan Pyramids, que dicen que podrían ser cavidades?

No es la primera vez que se estudia con muones. Luis Álvarez, premio Nobel de Física, hizo exactamente eso. Él escaneó el 20% de la pirámide de Kefrén y no descubrió ningún hueco. Ese mismo sistema se está empleando ahora en la Gran Pirámide y dicen que les ha dado positivo en una zona donde unos arquitectos franceses ya sospechaban que, desde el punto de vista arquitectónico, podía haber alguna cavidad. Utilizando un escaner como en la cámara de Tutankamon, los japoneses de la universidad de Waseda descubrieron, teóricamente, un corredor de 30 metros de lado que va paralelo al corredor de acceso a la cámara de la reina y eso es muy interesante. Los franceses a los que les dejaron hacer un pequeño agujero para introducir un endoscopio, encontraron debajo una cámara pequeñita. ¿Por qué hicieron esta segunda capa de habitaciones? La pirámide romboidal, que fue construida por Snefru, el padre de Keops, tiene dos entradas y dos cámaras independientes. No tiene nada de raro que Keops que era su hijo copiara el sistema. Sería esa dualidad, que puede ser ideológica, para referirse al norte y al sur de Egipto. No se ha dado aún con el acceso. Ojalá lo encontremos. Estoy deseando que tengan razón.

Como también estarás deseando que exista una cámara oculta en la tumba de Tutankamón como sostiene Reeves.

Puede ser tan divertido… El estudio teórico de Reeves es muy sólido. La forma más sencilla de comprobarlo es hacer un pequeño agujero en la cámara del tesoro, que no tiene ninguna decoración y que se supone que daría al hueco, pero es un monumento tan emblemático que no se quiere alterar. Si resulta que existe una cámara interior y está decorada, se podría dañar la pintura. Pero el agujero sería de apenas un centímetro de diámetro, sería casualidad que rompiera una zona valiosa. Creo que van a retomar ahora los estudios o dentro de unos meses.

¿Quién crees que podría estar allí sepultado? ¿Nefertiti? ¿Meritaton?

Eso no se puede saber. Teóricamente sí, podría ser Nefertiti, pero también otro. Puede ser una tumba terminada, o como la de Horemheb, a medio hacer. Ojalá esté intacta. Y puestos a soñar, me encantaría que el señor o señora que estuviera allí enterrado fuera un amante de la literatura y se hubiera llevado su arcón-biblioteca allí y de repente aparecieran allí cien textos nuevos de literatura egipcia. Eso sería magnífico.

¿Más aún que la propia momia?

La momia estaría muy bien, pero momias tenemos muchas. Si está intacta, sería muy interesante porque tendríamos otro de ese periodo, pero no sería el único.

Canon de Turín- WIKIPEDIA

¿Qué otros enigmas quedan aún por resolver?

Nos falta por saber cuáles son todos los faraones egipcios y cuánto reinaron. Los egipcios consideraban que cada vez que con cada faraón empezaba un ciclo de nuevo, así que no tienen un punto fijo. Se ha encontrado recientemente una fecha en unos papiros hallados en el Mar Rojo que ha alargado el reinado de Keops cuatro años. Es un ejemplo, pero hay muchísimos. En el año 1952 se encontró una pirámide, la de Sejemjet, al lado de la de Zoser, y no se sabía que este faraón había existido.

Nos falta por saber cuáles son todos los faraones egipcios y cuánto reinaron

Para ponernos los dientes largos, a mediados del s.XIX se descubrió un papiro, el canon de Turín, que es una de esas listas que tenían en los archivos los egipcios con una lista de los faraones y sus años de reinado. Ese papiro se encontró casi intacto, en muy buen estado, pero lo envolvieron tan mal que en el traslado se convirtió casi en una papilla. Hay una lista muy completa, pero faltan muchos datos. De vez en cuando alguien logra encajar las fibras, ordena los pedacitos y hace una pequeña lectura que aporta algún dato. Conocer todos los faraones de Egipto sería uno de los descubrimientos top ten.

También puede haber alguna pirámide aún por descubrir. Unos franceses estudiaron en los años 90 una tapa de un sarcófago, que había sido reutilizada de una lista de reyes del Imperio Antiguo y descubrieron a otro faraón del que no se sabía nada hasta entonces. Y no se sabe cuánto tiempo reinó, si llegó a construirse una pirámide...

Pero una pirámide se vería...

Después de 5.000 años, la arena cubre todo muy rápido. Si es grande, evidentemente sí, pero pueden quedar muy ocultas y si no la llegó a construir del todo, o la convirtió en una mastaba, como Neferefre, ésa se cubre con facilidad. Y como eso, muchas cosas faltan por descubrir.

¿Es cierto que apenas se ha descubierto un 30%?

Sí, esa es una cifra que repetimos, pero no podemos calcular. Si el primer faraón empezó a reinar hacia el 3.100 a.C. y el último en el 332, cuando Alejandro Magno conquistó Egipto, hay 3.000 años de historia en los que muchísimas cosas que han quedado ocultas. Ahora nos estamos dando cuenta de que el desierto estaba mucho más transitado de lo que podíamos pensar y más allá de los márgenes del Valle del Nilo se están realizando muchos hallazgos interesantes, como los papiros del Mar Rojo, esa zona minera del desierto líbico... Se están excavando los oasis y se está avanzando mucho aunque quedan muchos sitios por excavar, y ahora lo hacemos mucho más lento, entre multitud de especialidades, y con más seguridad. La arqueología es una ciencia destructiva. Aunque tengas el máximo cuidado, lo que excavas lo destruyes, así que se intenta que esa destrucción sea la menor posible y que toda esa información quede recogida.

Tu libro arranca precisamente con una prosaica descripción de cómo es una excavación real. ¿Es una manera de desmitificar la profesión, donde uno no se siente cada día Indiana Jones?

Lo escribí para la gente que me pregunta cómo es excavar. Por eso he querido mostrar cómo son seis días en una excavación. La realidad cotidiana es mucho trabajo. Tuve una parte de Indiana Jones que fue maravillosa, cuando se descubrió la cámara pintada de Djebuti. Me tocó fotografiar el momento junto con José Manuel Galán. Nos metimos por un pozo de 8 metros y medio, por una gatera, y de repente nos encontramos con una habitación llena de arena y piedras. Me arrastré entre los escombros con la cámara, descubriendo algo maravilloso, y es genial. Haces de verdad de Indiana Jones. Te asomas, está oscuro, metes la linterna y ves que está todo pintado… También descubrimos una tumba pequeña que daba acceso a una especie de catacumba. Entramos varios para documentarlo y cuando nos dimos cuenta llevábamos ocho horas en las que no habíamos salido para nada, tan alucinados que estábamos. Pero eso pasa el 1% de las veces.

No teníais miedo de resultar alcanzados por ninguna antigua maldición...

No, qué va, qué va... Sí hay maldiciones, pero no como la supuesta maldición de Tutankamón. Las tumbas egipcias están hechas para ser vistas. El muerto no está allí, sino por debajo, en un pozo. Hay relieves y textos, sobre todo en la cámara funeraria. Como los egipcios creían que todo lo que se leía cobraba vida, cuando leían la lista de ofrendas, pensaban que se las daban al difunto. Al mismo tiempo se sabe que las tumbas se robaban. De ahí que también haya llamadas de advertencia a los que pasan, pero no es una maldición en plan "dentro de 4.000 años vendrán a esta tumba y morirán en horribles sufrimientos". Es ridículo. Hace no muchos años un epidemiólogo, M.R. Nelson, estudió los fallecidos por la supuesta maldición de Tutankamón como si fueran una epidemia. Hubo 44 personas que participaron en el descubrimiento de la tumba, la apertura y el desvendado de la momia. Según los libros de los propagadores de la supuesta maldición, 25 de ellos murieron. La edad media a la que fallecieron era de 70 años y su muerte tuvo lugar una media de 28,9 años después del descubrimiento. Ni Howard Carter ni lady Evelyn, la hija de Lord Carnarvon, que participó en todos los pasos, fueron alcanzados por esta supuesta maldición. Esta última murió octogenaria en 1980. Y si investigas las muertes, no fallecieron como se cuenta. Cuando lo estudias, todo se derrumba como si fuera un azucarillo.

¿Y qué hay de la noche que dicen que pasó Napoleón en la Gran Pirámide?


¡Qué noche! Estuvo un rato. Creo que efectivamente les pidió a los soldados que le dejaran un momento solo. La leyenda dice que cuando salió le preguntaron: "general, ¿qué habéis visto?" y él respondió que si se lo contaba, no se lo iban a creer. Napoleón se quiso hacer el interesante. Además, mientras el Estado Mayor trepaba hasta la cima de la Gran Pirámide, él se quedó abajo y se entretuvo calculando que con esas piedras se podía rodear la frontera de la Francia revolucionaria con un muro de más de 3 m de altura y 30 cm de anchura.

Llaman la atención en el libro los apartados dedicados a la vida cotidiana en el Antiguo Egipto y, sobre todo, a sus costumbres sexuales.

No es que los egipcios fueran muy dados a representar el ejercicio físico del sexo de forma explícita, al contrario de los romanos o los griegos, pero hay textos en las tumbas, donde no hay ninguna representación sexual, pensados para generar tensión sexual que permita que se engendre de nuevo al difunto y renazca en el más allá. Eso lo encontramos en escenas tan conocidas como ese señor que está en un barquito arponeando. Lanzar el arpón tiene la misma estructura triconsonántica que el verbo engendrar. Es muy divertido. En otros casos, los dibujantes cogían un trozo de piedra o una lasca de cerámica y dibujaban algo que les apetecía. Ahí es donde nos encontramos algunos bocetos pornográficos.

¿Es verdad que Ramsés II tuvo 100 hijos?

Sí, y lo sabemos porque los egipcios lo escriben todo. Ramsés venía de una familia en la que su padre y su abuelo solo habían tenido un hijo o dos. Teniendo en cuenta la facilidad con que se moría en el mundo antiguo, convenía que se tuvieran muchos. Por eso antes incluso de que se convirtiera en faraón, su padre le puso un harén. (Los harenes egipcios no eran como los otomanos. Era una parte administrativa dedicada al sostén de los hijos y las esposas del faraón, explica). Se calcula que aproximadamente tuvo unos 50 hijos y unas 50 hijas con muchas esposas. Y llegó hasta los 95 años. Tenía el pelo pelirrojo (un color relacionado con el poderoso Seth, el dios teóforo de su padre, el faraón Seti) y era un señor alto para la época, de unos 1,75 metros de altura, unos diez centímetros por encima de la media. Debía de tener un aspecto bastante gallardo. Vivió muchos años, pero estoy seguro de que hubiera querido morirse antes. Su momia nos dice que no podía andar por una terrible artritis anquilosante en la cadera, que tenía arteriosclerosis, que tenía los dientes destrozados, abscesos tremendos, le debía de doler todo, pero era gente resistente. Pepi II también reinó muchísimos años.

¿Fue Sinuhé un espía?

Esa es una teoría que no es mía, pero que puede ser una posibilidad. La gente conocé a Sinuhé por el libro de Mika Waltari, pero Sinuhé es un personaje muy curioso en el cuento egipcio original. Era un alto funcionario del harén y estaba de campaña junto al hijo del faraón en el desierto luchando contra los libios cuando escucha una conspiración en el harén por la que se entera que han matado al faraón y ve salir disparado a su hijo (El que organizaba el funeral se convertía de facto en su sucesor, de ahí la importancia que tenía para el hijo estar allí). Entonces Sinuhé piensa que o bien le cortan la cabeza por haber participado, o por no habere enterado siendo uno de los jefes del harén. Por eso huye a la costa de Siria-Palestina, al reino de Retenu, y se asienta en un lugar de paso de las caravanas donde él mismo cuenta de que era informado por todos los que por allí pasaban.

Y sobre Akenatón, ¿fue tan trascendental su revolución en la época?

Consiguió que la nobleza y la corte le siguieran en su monoteísmo, pero no la gente del pueblo, que siguió llevando sus amuletos de toda la vida. Mandó borrar el nombre de Amón allá donde estuviera, pero no el del resto de los dioses, así que es cierto que fue revolucionario, pero no tanto como llegamos a pensar en un principio. Son cosas que vamos descubriendo poco a poco a través de nuevos hallazgos. De repente aparece un texto, como el Papiro del Mar Rojo... Estamos de uñas deseando que el que lo ha descubierto publique el resto del estudio. Sus conclusiones van a ser muy interesantes. Estamos expectantes.

¿Sería ahora mismo la investigación más esperada?

Para mí, sí. Es lo más parecido que tenemos a una fotografía de cómo se construyeron las pirámides de la época de Keops. Es un capataz que se encargaba de un equipo de unas 200 personas y de su recuento dependía que los demás cobraran su sueldo.

Templo de Debod.- ABC

Preguntado sobre el templo de Debod de Madrid, con el que Egipto agradeció a España su aportación en el rescate de Abu Simbel y los templos de Philae, José Miguel Parra advierte de que «no está del todo bien conservado». «En los 45 años que lleva aquí ha sufrido más que el tiempo que estuvo en Egipto. No se está cayendo a pedazos, pero hay que actuar», sostiene.

Por MÓNICA ARRIZABALAGA
Fuente: ABC