Descubren un ajuar visigodo único en España en el yacimiento de Argandenes (Piloña, Asturias)

El ajuar encontrado en el yacimiento visigodo de Argandenes, en Piloña, Asturias, es único en España. Lo dice el arqueólogo Rogelio Estrada, que ayer presentó en Infiesto los resultados de la segunda campaña realizada entre septiembre y octubre gracias a una subvención municipal de 7.000 euros.


Un kurzsax (espada corta de hierro de un solo filo), una cruz de bronce, hebillas bañadas en plata, tachuelas de calzado, un dardo, cuentas de collar de vidrio y un pendiente de arete son sólo algunos de los casi 300 objetos que aparecieron en los nueve metros cuadrados de la última excavación, que en esta ocasión se ubicó al oeste del panteón localizado durante la primera campaña en la Lladrea. Entre todos ellos destacan tres fragmentos de una lámina de oro que habrían formado parte de los apliques del cinturón de un varón enterrado en una tumba doble mixta, probablemente un aristócrata.


Los fragmentos son importantes por varios motivos: no se conocen hallazgos en oro de esta época en Asturias, salvo contadas excepciones como una moneda del castillo de Gauzón, en Castrillón. El hecho de que se hayan localizado in situ, formando parte de un yacimiento, permite una contextualización sobre la época y sobre quiénes fueron sus dueños, algo impensable con otros hallazgos relevantes como la diadema de Moñes, por poner un ejemplo. Más: su decoración, que podría ser una evocación astral de crecientes lunares o incluso evocar un lábaro cántabro, es rica en detalle e inusual para la época.


Así las cosas, el equipo multidisciplinar que participó en la última campaña de Argandenes confía en que los análisis que quedan pendientes -se enviarán por ejemplo restos orgánicos aparecidos junto a las placas de oro al laboratorio Beta Analytic, de Florida- arrojen luz a una etapa tan oscura y desconocida como es el momento anterior a la formación del Reino de Asturias.

Rogelio Estrada durante los trabajos de Argandenes. Foto: A. Espina.

Estrada aseguró que "las piezas encontradas en el yacimiento son algo excepcional en el contexto hispano, es casi milagroso que se conserven después de tanto tiempo pues el conjunto funerario sufrió saqueos". "Seguramente habrá más conjuntos por la zona, pero son difíciles de localizar. El momento en que se construye este panteón hay presencia visigoda, pero su influencia tampoco está excesivamente marcada. Se trata de un tiempo en que las élites astur-romanas hacen pactos constantemente sin la presencia ya de un ejército romano que respalde su autoridad. Hay un afán del individuo por mostrar su capacidad adquisitiva en el contexto de cierto vacío de poder", sostiene.

"Lo que se constata es que en un arco cronológico muy reducido de entre 150 y 200 años se enterraron aquí una treintena de personas importantes, cuyos descendientes podrían haber desempeñado un papel destacado en la batalla de Covadonga con don Pelayo y no se descarta que los restos pertenecieran a una sola familia, por lo que queda pendiente un análisis de ADN para ver el grado de parentesco", afirma Estrada.

El alcalde de Piloña, Iván Allende, confirmó ayer la intención del equipo de gobierno socialista de incluir una nueva partida de 7.000 euros en los presupuestos de 2017 para dar continuidad a las investigaciones.


Fuente: LNE.es | 10 de diciembre de 2016

Científicos españoles sitúan el origen de la agricultura en Siria, hace 10.500 años

Foto: Siega experimental de cereales silvestres en Yebel Drouze (Siria).

De todas las revoluciones que ha pasado el hombre, el Neolítico es probablemente la que más le transformó. Gracias a ella, pasó de vivir a la intemperie o dentro de cuevas a construir casas con muros y habitaciones. Pasó de vivir de lo que cazaba y recogía, a poder cultivar su propia comida e incluso a molerla para fabricar pan. Algunos animales, como cabras y vacas, comenzaron a vivir con él. Esto permitió que viviera en asentamientos estables y mayores, pero allanó el camino de enfermedades infecciosas como la tuberculosis. A pesar de todo, se las arregló para sembrar los gérmenes de las ciudades y de las primeras civilizaciones, con sus templos, leyes y dioses.
Si ocurrió todo esto fue quizás gracias a la domesticación. Un fenómeno por el cual el hombre seleccionó plantas y animales y acabó transformándolos en su propio beneficio. Según un artículo publicado este lunes en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) y realizado por científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Copenhague, la primera vez que ocurrió esto fue en Siria, en un poblado cercano a la actual ciudad de Sweida, hace 10.500 años.

«Lo más importante de este estudio es que hemos documentado el momento de transición en que se comenzó a domesticar cereales, en concreto dos tipos de trigo y una variedad de cebada», ha explicado a ABC, Juan José Ibáñez (izquierda), investigador del CSIC implicado en el estudio, dirigido por Amaia Arranz-Otaegui. «Hemos encontrado evidencias de que la domesticación estaba ocurriendo hace 10.500 años y en un lugar muy concreto».


Por entonces, lo cierto es que aquellos «sirios» llevaban 1.500 años cultivando variedades de cereales salvajes, y que en muchas otras zonas de Oriente Medio es probable que también ocurriera algo similar. Pero el paso del tiempo supuso un cambio: la acción del hombre favoreció ciertos rasgos de las plantas y poco a poco aparecieron variedades con distinto comportamiento y forma. Fue así como aparecieron las primeras cepas domesticadas.

Según explica Ibáñez, en esta ocasión los investigadores han encontrado precisamente la prueba más antigua de ese proceso de domesticación. Y justo cuando estaba empezando.


Semillas carbonizadas

Para ello, analizaron los restos encontrados en el yacimiento de Tell Qarassa Norte, una zona situada cerca de la actual ciudad de Sweida y en el pasado próxima a un lago llamado Qarassa. En concreto, recogieron sedimentos e inyectaron agua para hacer flotar los restos de cereales carbonizados que fueron quemados en el pasado (por accidente o como parte de la metodología de los agricultores). Lo interesante de esto es que solo los restos carbonizados no acaban descompuestos después de pasar miles de años bajo tierra y que aún así siguen conteniendo información muy valiosa sobre lo ocurrido.

Los científicos los observaron al microscopio para analizar su forma, y después estimaron su antigüedad con la técnica del carbono 14 y teniendo en cuenta la edad de los sedimentos donde se hallaron. También trataron de extraer el ADN de esos restos, aunque no lo lograron. Después de identificar los granos, los restos de glumas (vainas), los tallos y las espigas, pudieron concluir que tres tipos de cereales, dos variedades de trigo (la escaña y el farro) y una de cebada, eran distintas a las cepas naturales. Lo que quiere decir que aparecieron allí gracias a un fenómeno de domesticación.

Yacimiento de Tell Qarassa Norte- Juan José Ibáñez

El origen de la agricultura
Esto no confirma todavía que la agricultura naciera en esa zona de Siria. «Es posible que a la vez que se produjera esta domesticación en Siria ocurriera en otros lugares de Oriente Medio», ha explicado Ibáñez.

De hecho, entre los arqueólogos hay quienes piensan que la agricultura surgió varias veces (hipótesis del multicentro) y otros que abogan más por el origen único, situado hasta ahora en el sur de Turquía. «Pero nosotros demostramos que al menos el foco de Siria llegó a la domesticación a la vez que Turquía», ha dicho Ibáñez. Esto apoya la idea del multicentro, o a posibilidad de que hubiera un origen único anterior seguido de una transmisión muy rápida de conocimientos o variedades de plantas.

Aparte de esto, tampoco hay consenso en si la domesticación fue un fenómeno más bien inconsciente o mayoritariamente premeditado. Pudiera ser que los agricultores decidieran seleccionar algunas plantas, o bien que comenzara a plantar variedades salvajes y con el tiempo fuera favoreciendo a aquellas mejor adaptadas a ese tipo de vida.

Trabajos de excavación en Qarassa3 (Sweida, sur de Siria), el poblado de hace 13.000 años de los últimos cazadores-recolectores. Imagen: CSIC.

Plantas «nuevas»

Por ejemplo, gracias a la domesticación cambió la solidez de las espigas, y dejaron de deshacerse al madurar, con lo que el agricultor podía recogerlas durante la cosecha y plantarlas de nuevo más adelante. Además,la maduración de los cereales dejó de ser progresiva (esto es un rasgo ventajoso para algunas plantas, porque evita que todas maduren al mismo tiempo y que sean vulnerables a otros factores), y se hizo simultánea. Por último, las semillas dejaron atrás su proceso de dormición, por el cual no germinan con tanta facilidad en el suelo: esto no le interesa a los agricultores que quieren que lo hagan lo antes posible.


Foto: Excavación en Querassa 3.

El germen de las civilizaciones

Por lo que se ha encontrado en este y otros yacimientos, parece que aquellos sirios del Neolítico comían trigo, cebada, lentejas, gachas y habas. Molían los granos con morteros de piedra y molinos de mano y hacían harinas que aprovechaban para hacer tortas de pan. Disfrutaban de los pistachos y las almendras y cazaban muchas gacelas y hasta las tortugas que vivían en el lago Qarassa. Parece que también domesticaron a las cabras.

Esta base de comida les permitió mantener «una estructura social compleja, en la que había culto a antepasados y entierros ceremoniales», ha dicho Ibáñez. Aquel cambio en la alimentación cambió su mundo simbólico, social y económico. El trueque se generalizó en Oriente Medio, y la zona se convirtió en un «laboratorio social».

Hicieron falta muchas pruebas para que ese laboratorio cristalizara en las primeras grandes civilizaciones, aparecidas en torno a los 3.500 años antes de Cristo. «Entonces se desarrollaron la escritura, los templos, las monarquías y las divinidades. Pero si todo eso fue posible fue gracias a que 5.000 años antes las poblaciones se hicieron sedentarias y comenzaron a cultivar cereal».

Fuente: ABC.es | 5 de diciembre de 2016

Arqueólogos descubren varias estatuas en el templo de Amenhotep III en Luxor

Las estatuas, en muy buen estado de conservación, contarían con «un gran valor artístico y del mayor interés arqueológico», de acuerdo con fuentes oficiales egipcias

Arqueólogos de la misión de conservación del templo de Amenhotep III y los Colosos de Memnon en Luxor han descubierto una serie de estatuas entre las ruinas, representando a la diosa egipcia Sejmet y los restos de una colosal esfinge.

Las estatuas contarían con «un gran valor artístico y del mayor interés arqueológico», ha señalado el Ministerio de Antigüedades egipcio en un comunicado. Según ha explicado el director del departamento del Antiguo Egipto en el Ministerio, en la sala hipóstila del templo se han encontrado cuatro fragmentos de estatuas de la diosa-leona: tres bustos y un pecho descabezado.

La directora de la excavación, Hourig Sourouzian, aclaró que las estatuas encontradas están «en muy buen estado de conservación» y que encajan con otras piezas encontradas con anterioridad en el templo. El templo de Millones de Años de Amenhotep III, como se le llama a los templos funerarios de los faraones, habría contado con un gran número de estatuas de la diosa Sejmet, temible hija de Ra con cabeza de leona. Siguiendo la mitología egipcia, Sejmet, hija del dios sol, lo defiende en contra de sus enemigos, y protegería al templo de la maldad, así como de la enfermedad o la desgracia.


En la zona del tercer pilar del templo se han encontrado grandes fragmentos de una esfinge «colosal», esculpida en caliza, además de una pieza más pequeña, el torso en granito negro de una deidad. A diferencia de las estatuas de Sejmet, las esfinges están en peor estado de conservación y requerirán de un proceso de restauración antes de ser expuestas al público, añade la nota.

Pese a que la idea central del proyecto de conservación del Templo de Amenhotep III es la de exhibir las piezas en su lugar original, Kom el-Hettan a la orilla oeste de Luxor, las estatuas encontradas recientemente «han sido almacenadas» en depósitos del Ministerio de Antigüedad, por «razones de seguridad», según ha detallado Sourouzian. «Una vez que el yacimiento se organice y proteja, serán colocadas de nuevo en su posición original», ha añadido la arqueóloga.

Dos imponentes colosos, de casi 20 metros de altura y que pueden visitarse en Luxor, preceden al templo funerario de Amenhotep III, también conocido como Amenofis III y faraón de la dinastía XVIII. En el yacimiento se han encontrado más de un centenar de piezas como imponentes cabezas de estatuas u otras reliquias religiosas, 40 de las cuales serán expuestas a partir del lunes 12 de diciembre en una exhibición temporal del Museo de Luxor. Los objetos expuestos incluirán una colección de amuletos, monedas de época grecorromana, restos de arcilla y estelas religiosas.

Fuente: ABC

Reconstruyen el rostro de un hombre del Neolítico que murió hace 9.500 años


El hombre que ven en la imagen que encabeza estas líneas tiene 9.500 años y una mirada que, aunque parezca cansada, posee la fuerza para arrastrarnos a un pasado remoto. Es la magia de la tecnología actual, que no solo puede catapultarnos al futuro, sino que también puede pincelar facciones de quienes vivieron mucho antes y solo nos dejaron de recuerdo sus calaveras.

Los arqueólogos del British Museum han conseguido que podamos ver por primera vez cómo era el rostro de una persona real del Neolítico. Al hombre que ahora podemos mirar antes solo se le conocía como "la Calavera de Jericó" debido a que se encontró en 1953 en esta región (hoy Cisjordania, Palestina). El cráneo estaba en muy buenas condiciones gracias a que su interior estaba esmeradamente enyesado.

Aunque parezca chocante y algo extravagante la práctica de extirpar el cráneo de la persona fallecida, rellenarlo de yeso y decorarlo con capas de pintura y dos cáscaras en los huecos de los ojos, esta práctica supone una forma temprana de rito funerario: los cráneos iban por separado mientras que el resto del cuerpo se enterraba bajo el hogar familiar.


¿Y qué sabemos de este hombre del Neolítico con nariz ancha, ojeras un poco pronunciadas y dos arrugas alargadas que bordean la boca? Pues que murió ya de adulto y posiblemente se tratara de una persona importante en la época.

"No podemos decir exactamente por qué su cráneo, o los otros que fueron enterrados a su lado, fueron elegidos para ser enyesados", dijo la curadora del Museo Británico, Alexandra Fletcher. "Puede haber sido algo que estos individuos lograron en vida, lo que llevó a ser recordados después de su muerte", señala.

Fletcher añadió que los individuos también podrían haber estado relacionados, ya que en cada uno de los cráneos hallados en la misma sepultura les faltaban sus segundos y terceros molares, lo que, según dijo, podría ser un rasgo hereditario.


Los arqueólogos han podido reconstruir la cara del pasado con una tecnología basada en rayos X para crear imágenes en 3D. La técnica no solo aportó toneladas de datos para conocer sus rasgos faciales, también arrojó información sobre el individuo, como que hubo un momento de su vida en el que tuvo rota la nariz y que le alargaron artificialmente la cabeza en su infancia, posiblemente para atender a los cánones de belleza estipulados en el Neolítico.

A pesar del modelo creado, a este hombre que intriga tanto se le quiere detallar todavía más. Si los científicos consiguieran extraer una muestra de ADN existiría una pequeña posibilidad para averiguar el color de sus ojos y el de su pelo. Sin embargo, esa posibilidad es escasa porque, como explica Fletcher, "la preservación del ADN en tales restos humanos antiguos puede ser demasiado pobre para obtener cualquier información".


Por el momento nos quedaremos mirando, como ya lo hicimos este verano con Ava, la joven que murió hace 3.700 años, las caras esbozadas de los que hace mucho habitaron nuestro planeta.
La reconstrucción del rostro de este cráneo estará abierta al público en la exposición "Creación de un antepasado: el cráneo Jericho", desde el 15 de diciembre al 19 de febrero de 2017 en el British Museum. Fletcher y su equipo esperan que, posteriormente, el modelo realista pueda estar en exhibición en las salas permanentes del museo.


Fuente: playgroundmag.net | seeker.com | 10 de diciembre de 2016

CENTRO HISTÓRICO DE CORDOBA


Autor: Narciso Casas -  Profesor de Arte y Escritor

    Año de inscripción en la Lista del Patrimonio Mundial en 1984/1994. La ciudad de Córdoba está ubicada entre, los montes de Sierra Morena y el río Guadalquivir. El período de gloria de Córdoba comenzó en el siglo VIII, después de su conquista por los moros, (nnatural del África septentrional frontera a España). Cuando se construyeron unas 300 mezquitas, palacios y edificios públicos. En el siglo XIII, en tiempos de Fernando III el Santo, se transformó la gran mezquita en catedral cristiana. Actualmente es la tercera ciudad de Andalucía tanto por tamaño como por población, sólo por detrás de Sevilla y Málaga.
    Es uno de los  cascos antiguos  más grandes de  Europa. En 1994, hace extensiva ésta denominación a gran parte del casco antiguo. El centro histórico posee una gran riqueza monumental conservando grandes vestigios de la época romana, árabe y cristiana.
    Su Mezquita es uno de los monumentos más importantes de toda la arquitectura andalusí, y junto a ella se puede admirar el Palacio Episcopal, Antiguo Hospital San Sebastián, La Sinagoga, el Alcázar de los Reyes Cristianos, Puente romano, Torres de Calahorra, Molinos del Guadalquivir, Baños califales, Caballerizas Reales, y otros.
    El poblamiento de Córdoba se remonta a la  Edad del Bronce, si bien la fundación de la ciudad tiene lugar a mediados del siglo II a. C. por el pretor Claudio Marcelo, convirtiéndose en capital de la Hispania Ulterior y más tarde de la Bética.
    Tras la caída del Imperio Romano de Occidente, la ciudad cayó bajo poder del Imperio Bizantino también llamado Imperio romano de Oriente  hasta que fue conquistada en el año 572 por el rey visigodo Leovigildo Hacia finales del siglo VII, las luchas civiles y las intrigas políticas debilitaron el poder visigodo, lo que facilitó la penetración de los musulmanes en la península en el año 711 y la rápida conquista del país, que permanecería bajo la dependencia del  Emirato de Damasco. En el año  717 la ciudad de  Córdoba se convirtió por sus características geográficas y sus posibilidades en capital de al-Ándalus*
    *Es el territorio de la península ibérica y de la  Septimania  región occidental de la provincia romana  que pasó bajo control del reino visigodo, terminando bajo poder musulmán durante la Edad Media, entre los años 711 y 1492.

La Mezquita Catedral de Córdoba
    En 1984, la  Unesco declaró a la  Mezquita de Córdoba como Patrimonio de la   Humanidad.  La Catedral de la Asunción de Nuestra Señora es el nombre eclesiástico de la Catedral de Córdoba, antiguamente conocida como Mezquita de Córdoba. Es el monumento más importante de todo el Occidente islámico y uno de los más sorprendentes del mundo.
    Este magnífico honor fue ampliado, cuando 10 años después se reconoció con el mismo título el Casco Histórico de Córdoba. Situada a orillas del Guadalquivir y al pie de Sierra Morena. Fue capital de la provincia romana. Posteriormente ocupó un lugar importante en la provincia de Spania del Imperio bizantino y durante el periodo visigótico. Volvió a alcanzar la capitalidad durante el Emirato Independiente y el Califato Omeya de occidente, época en la que alcanzó su mayor apogeo, llegando a tener entre medio millón de habitantes, siendo en el siglo X la ciudad más grande del mundo.
    En la Mezquita se afirmaba que en ella se conservaba el brazo de Mahoma, fundador del islam. Falleció el 8 de junio de 632 en la ciudad de Medina a la edad de 63 años, cuando se habla de Mahoma, siempre se precede con el título de Profeta  y  llegó a ser un importante centro de peregrinación para los musulmanes. A las afueras de la ciudad se encuentra el conjunto arqueológico de la ciudad de Medina Azahara mandada edificar por Abderramán III junto con la Alhambra de Granada la cumbre de la arquitectura hispano musulmana.
    La Visita Nocturna a la Catedral de Córdoba, antigua Mezquita, consiste en la creación de una nueva y forma de conocer el Templo a través de la utilización de tecnología avanzada de iluminación, sonido y proyecciones, para trasladar al visitante el conocimiento desde la perspectiva histórica, artística. Los pases de la visita se realizarán de forma permanente durante todo el año, por la noche y en grupos reducidos de personas, de forma que se le ofrece al visitante un privilegio al pasear por el interior del templo. Hoy constituye un monumento muy importante junto con la Alhambra de Granada.
    El recorrido se inicia en el Patio de los Naranjos y finalmente visitar todos y cada uno de los rincones de esta Santa Iglesia Catedral, será una experiencia que está coronado por el antiguo alminar, que fue transformado en el siglo XVII en la torre campanario de la catedral, y la sala de oración, conformada por más de ochocientas columnas de mármol, jaspe y granito sobre las que se apoyan cerca de cuatrocientos arcos de herradura bicolores.
     Está formada por un patio y una sala de oración, que consta de diecinueve naves longitudinales con una proyección audiovisual que recorre toda la historia del monumento. Las descripciones y explicaciones del recorrido las reciben los visitantes a través de un sistema de auriculares que emitirá simultáneamente en los idiomas diferentes (español, inglés, francés, alemán, italiano, portugués, japonés y árabe). Se comenzó a construir en el 786  cuando el emir Abd al-Rahmán I procedió al derribo de toda la construcción cristiana para levantar la antigua Mezquita de Córdoba. En el lugar que ocupaba la basílica visigótica de San Vicente Mártir. Se conservan abundantes restos en el subsuelo, mosaicos y pilares.

    Que revelan que pasó por tres grandes fases constructivas, las dos primeras se desarrollaron a lo largo de la segunda mitad del siglo VI como catedral paleocristiana y la tercera durante el siglo VII como catedral de época visigoda. Esta última es la que encontraron los invasores islámicos a principios del siglo VIII. La mezquita tuvo ampliaciones durante el Califato de Córdoba, fue la segunda mezquita más grande del mundo en superficie, por detrás de la Mezquita de la Meca.
     Fue reconquistada la ciudad por Fernando III el Santo, Hijo de Alfonso IX de León y la reina Berenguela I de Castilla. El monarca dispuso que en la festividad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo del año 1236 la antigua mezquita fuera dedicada a Santa María Madre de Dios y consagrada aquel mismo día por el Obispo de Osma, Don Juan Domínguez, en ausencia del arzobispo de Toledo, Don Rodrigo Jiménez de Rada en la Capilla Mayor de Villaviciosa.
    Tras la conquista de Córdoba por los cristianos, estos comenzarán a utilizar la mezquita para celebrar su culto, pero en el siglo XVI, por orden del obispo Alonso Manrique se inicia la construcción de la catedral renacentista, fusionándola con el templo musulmán. Del conjunto monumental catedralicio destaca la sillería del Coro, concebida por Pedro Duque Cornejo. Está realizada en madera de caoba antillana.  En ambos laterales del templo se encuentran múltiples capillas, fruto del deseo de los fieles católicos de enterrarse en la Catedral.
*Todo el contenido de texto que aparece sobre la Mezquita de Córdoba, procede de mi libro Historia y Arte en las Catedrales de España. (ISBN 978-84-686-3200-1).

El centro histórico de Córdoba
   Fue declarado  Patrimonio de la Humanidad  por la  Unesco en  el año 1994. El casco histórico de Córdoba está constituido por dos partes que son la Villa o antigua  Medina musulmana, al oeste, y la  Axerquía  o barrio oriental.  Situada al este de la antigua  medina  que comprendía varios  arrabales de la ciudad.
    Se encuentra situado en pleno centro del casco antiguo  de la ciudad, justo enfrente de la fachada occidental de la  Mezquita de Córdoba. Forma parte del centro histórico de Córdoba que fue declarado  Patrimonio de la Humanidad  por la  Unesco  en  1994. Fue edificado sobre el antiguo alcázar califal.
   Fernando III donó el edificio a  Lope de Fitero, obispo de Córdoba. Desde entonces ha sido sede del  Obispado de Córdoba. A mediados de los años ochenta parte de este complejo se convierte en Museo Diocesano. Este museo reúne gran parte del patrimonio artístico de la iglesia de Córdoba, con una colección que incluye pinturas, tapices y esculturas desde la Edad Media hasta nuestros días.

El hospital de san Sebastián 
    Es un edificio del  siglo XVI situado en la calle Torrijos de Córdoba, justo enfrente de la fachada occidental de la Mezquita de Córdoba. Desde 1980 es sede del Palacio de Congresos y Exposiciones y de una oficina de información turística. Forma parte del  centro histórico de la ciudad de Córdoba  que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994. Fue construido entre 1512 y 1516 por obra del arquitecto  burgalés Hernán Ruiz el Viejo. Desde su fundación hasta 1724, fecha en la que se construye el Hospital del Cardenal Salazar, fue el mayor hospital de la ciudad.

La sinagoga de Córdoba 
    Es un templo hebreo localizado en la calle Judíos de la ciudad de Córdoba. Este templo fue construido en el año 1315. Es la única sinagoga existente en Andalucía  y una de las únicas tres que se conservan en  España de esa época, juntos a la Sinagoga del Tránsito y la de Santa María la Blanca en la ciudad de Toledo. El 24 de enero de 1885 fue declarada Bien de Interés Cultural en la categoría de monumento. Forma parte del centro histórico de Córdoba  que fue declarado Patrimonio de la Humanidad  por la   Unesco en 1994.
    Después de la expulsión de los judíos en 1492, el edificio se transformó en el hospital de de Santa Quintería de hidrófobos (Horror al agua, que suelen tener quienes han sido mordidos por animales rabiosos). Más tarde, en 1588 se usó como Ermita de San Crispín y San Crispiniano. Ya en el siglo XIX se empieza a usar como escuela de niños de parvularios.
    En 1884, realizándose unas reparaciones en el edificio, Rafael Romero Barros, padre del famoso pintor cordobés Julio Romero de Torres, descubrió restos de escritura hebrea lo que llevó a que, en el año siguiente, se declarara al monumento como Bien de Interés Cultural. En el Muro Sur encontramos un fragmento del libro de los Proverbios (es un libro bíblico del Antiguo Testamento y del Tanaj hebreo (es el conjunto de los 24 libros de la Biblia hebrea). En el Muro Norte encontramos versos muy completos del verso 4 del Cantar de los cantares, conocido también como Cantar de Salomón o Cantar de los Cantares de Salomón, es uno de los libros de la Biblia y del Tanaj.

El alcázar de los reyes cristianos
    El Alcázar está declarado  Bien de interés cultural  desde el año 1931. Forma parte del centro histórico de Córdoba que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994.
    Es un edificio militar ordenado construir por el rey Alfonso XI de Castilla el Justiciero en el año 1328, sobre construcciones anteriores, ubicada en uno de los márgenes del río Guadalquivir, en  Córdoba.  El conjunto arquitectónico rodeado, de magníficos jardines y patios que mantienen una inspiración Los Reyes Católicos pasaron más de ocho años en la fortaleza, dirigiendo desde la misma, la campaña contra el Reino de Granada.
    Se encuentra rematado por cuatro torres: Paloma, Leones, Homenaje e Inquisición, dando al edificio una forma casi cuadrada. En 1812, y tras la abolición por parte de las Cortes Constituyentes de Cádiz del Tribunal de la Inquisición, se convirtió en cárcel civil hasta que en el año 1931, se destinó a instalaciones militares, los cuales lo cedieron en el año 1955  al Ayuntamiento de Córdoba. Actualmente el Alcázar es sede de diferentes eventos municipales.
    La antigua Huerta del Alcázar se ha transformado en una impresionante superficie unos 55.000 metros cuadrados de maravillosos jardines como palmeras,  naranjos y  cipreses, alrededor de las fuentes y estanques.

El puente romano de Córdoba 
    Desde 1931, el puente, conjuntamente con la  Puerta del Puente  y la torre de la Calahorra  está declarado  Bien de interés cultural  en la categoría de monumento. Forma parte del centro histórico de Córdoba  que fue declarado Patrimonio de la Humanidad  por la Unesco en 1994.
    Está situado sobre el río Guadalquivir  y une el barrio del Campo de la Verdad -Miraflores  es un barrio del  distrito sur de Córdoba con el Barrio de la Catedral. También conocido como el Puente Viejo fue el único puente que ha estado en vigor durante 20 siglos, hasta la construcción del Puente de San Rafael, este puente fue inaugurado el 29 de abril de 1953 por el General Franco siendo Antonio Cruz Conde alcalde de la ciudad. Este puente fue el segundo puente que tuvo  Córdoba  después del  Puente Romano  está formado por ocho arcos de 25 metros de luz y con una longitud entre estribos de 217 metros.

La torre de la Calahorra 
    Fue declarada  Conjunto Histórico Artístico  en 1931. Forma parte del centro histórico de Córdoba  que fue declarado  Patrimonio de la Humanidad por la  Unesco  en  1994. La torre, que se levanta en la orilla izquierda del río Guadalquivir, fue reformada por orden de  Enrique II de Trastámara para defenderse de su hermano Pedro I de Castilla.
    Es una fortaleza de origen islámico  como  protección del  Puente Romano.  En 1987, se creó la Fundación Garaudy  de las Tres Culturas. En 2002, recibió el  Premio Internacional Gadafi de los Derechos Humanos  de  Libia. Roger Garaudy fue un filósofo y político francés.  En enero de 2007, se llevó a cabo la restauración de la fortaleza.

Los baños califales 
    Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994. Son unos baños árabes, cuyos restos se hallaron de forma accidental en 1903 en el Campo Santo de los Mártires, que meses más tarde fueron soterrados. La limpieza corporal constituía una parte esencial en la vida del musulmán. Eran preceptivos de la oración, además de constituir un rito social. Realizados bajo el califato de Alhakén II para el disfrute del califa y de su corte. Durante los siglos XI al XIII, fueron reutilizados por  almorávides  y  almohades.

Las caballerizas reales de Córdoba 
    Desde 1929  están declaradas como Monumento Histórico Nacional así como Patrimonio Nacional. Forma parte del centro histórico de Córdoba  que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994. 
    Construidas en el año 1570 por Real Decreto de Felipe II que encargó a Diego López de Haro y Sotomayor, marqués de El Carpio, la creación de las mismas donde agrupó los mejores sementales y yeguas, siendo esta yeguada real el origen de la raza del caballo andaluz. Las Caballerizas Reales fueron erigidas en un solar propiedad de la iglesia ubicada entre las murallas defensivas de la ciudad y el Alcázar de los Reyes Cristianos. 
    En 1734 se incendiaron y el edificio quedó totalmente arrasado. Felipe V quiso llevar a cabo su reconstrucción. Fueron propiedad real hasta el reinado de Fernando VII, pasando posteriormente a propiedad estatal. Desde 1866 el ejército de España fue el encargado de continuar la tradición de la cría equina, sirviendo como criadero de caballos hasta 1995  bajo la tutela del Ministerio de Defensa. En el año 2002. Se hizo cargo del edificio la Concejalía de Turismo y Patrimonio de la Humanidad del Ayuntamiento de Córdoba.

Los molinos del Guadalquivir 
    El 30 de junio de 2009 fueron declarados Patrimonio Histórico Andaluz. Son un total de once molinos situados a lo largo del cauce del río  Guadalquivir  a su paso por Córdoba.   Estos molinos son vestigios de emblemáticas construcciones medievales algunos de ellos han sido restaurados y empleados para fines culturales y turísticos como el  Molino de la Alegría  en la margen derecha del río Guadalquivir, aguas abajo del Puente de San Rafael que alberga al Museo de Paleobotánica del Jardín Botánico de Córdoba.

La calle de las flores
    Forma parte del  centro histórico de Córdoba  que fue declarado Patrimonio de la Humanidad  por la  Unesco  en 1994. Es una de las calles más populares y turísticas de Córdoba. Situada como una bocacalle de la calle de Velázquez Bosco, es una calle ciega, estrecha y peatonal que desemboca en una plaza. A mediados de los años 50 fue adornada con los arquillos que hoy la contemplan, así como con la construcción de una fuente diseñada por el arquitecto  Víctor Escribano Ucelay integrando restos arqueológicos en el año 1960.
    La calleja de las Flores se ha convertido la ciudad en la visita de los turistas que diariamente retratan la imagen de la torre de la Mezquita desde la pequeña plaza terminal de la calleja de las Flores.

Autor: Narciso Casas -  Profesor de Arte y Escritor                                                                   Fuente: Mi libro titulado Patrimonio Mundial Cultural de la Humanidad en España ISBN:  978-84-686-7933-4 - Editorial Bubok.

Un misterioso descubrimiento revela la identidad de un gobernante romano en Judea

Inscripción que lleva el nombre de un gobernador romano de Judea hasta ahora desconocido. Fue descubierta frente a Tel Dor por la Universidad de Haifa, en enero de 2016. (Cortesía de la Universidad de Haifa)


Buceadores israelíes que trabajan con la Universidad de Haifa han encontrado un raro artefacto arqueológico que arroja luz sobre un prefecto romano previamente desconocido de la provincia de Judea en el tiempo anterior a la revuelta de Bar Kojba.

A principios de este año se descubrió una gran roca con una inscripción de 1.900 años de antigüedad en el lecho marino de la costa, al sur de Haifa, en el Mar Mediterráneo, con el nombre de Gargilius Antiques y mencionando la provincia de Judea.
Los arqueólogos fueron capaces de determinar que Antiques gobernó sobre Judea justo antes de la legendaria revuelta contra el Imperio Romano, luchó desde el año 132 al 136 d.C. El levantamiento fue finalmente aplastado, dando como resultado el exilio de judíos. El emperador Adriano renombró a Jerusalén Aelia Capitolina y Judea Siria Palestina.

El objeto, que se cree es la base de una estatua, fue encontrado en enero de 2016 como parte de una excavación marítima en el sitio arqueológico de Tel Dor. La ciudad había sido un puerto importante en la época romana y estuvo activo al menos hasta el siglo IV.
La roca, que mide 70 por 65 centímetros y pesa más de 600 kilogramos, estaba cubierta de criaturas marinas cuando fue descubierta.

Foto: El Dr. Gil Gambash (izquierda) y el profesor Yasur- Landau posando al lado de la inscripción hallada.

“No sólo pudimos por primera vez identificar con certeza el nombre del gobernante que supervisó Judea en los años críticos de la revuelta de Bar Kojba, sino que es también la segunda vez que la mención de Judea ha sido descubierta en inscripciones que se remontan a la era romana”, dijo el profesor Assaf Yasur-Landau, de la Universidad de Haifa, quien se encargó de descifrar el texto.
El nombre Antiques, se encontró por primera vez en una inscripción hace unos 70 años, a pesar de que la mención del territorio que gobernó no se conservó y como consecuencia no se podía ubicar el lugar de modo alguno.

El texto descubierto este año, comenta Yasur-Landau es el más largo que se haya obtenido en las excavaciones marítimas de Israel. No obstente, se ha perdido una parte del escrito, el cual reza aproximadamente así: “La ciudad de Dor honra a Marcus Paccius, hijo de Publius, Silvanus Quintus Coredius Gallus Gargilius Antiquus, gobernador de la provincia de Judea, así como […] de la provincia de Siria y patrón de la ciudad de Dor.”

Fuente: aurora-israel.co | 8 de diciembre de 2016

Fijan en 40 kilómetros la longitud de los canales romanos de La Leitosa (León)

Nadie los había recorrido antes al completo. Y gracias a la tesis doctoral sobre la minería del oro romana que el ingeniero Roberto Matías prepara en la Escuela de Minas de la Universidad Politécnica de Madrid ahora se sabe que los tres canales que conducían el agua a la explotación de La Leitosa (Vega de Espinareda) en el siglo I miden en conjunto 40 kilómetros de longitud.

El más largo de los tres canales, según dio conocer Matías en una conferencia sobre el pasado romano y prerromano de Vega de Espinareda organizada por el Ayuntamiento en la Casa de la Cultura en la tarde del pasado miércoles, mide 20 kilómetros y traía el agua desde Burbia.
Matías destacó a este periódico «la imponente sección del canal tallado en un farallón de roca» donde se aprecia toda la pericia de los ingenieros romanos. Más cortos, de diez kilómetros cada uno, son los otros dos canales que conducían el agua por la vertiente norte desde el valle de Paradiñas hasta La Leitosa para que los romanos extrajeran el oro mediante el mismo procedimiento de demolición de la montaña que también empleaban en Las Médulas a gran escala.

Julio Vidal, Roberto Matías y el alcalde, Santiago Rodríguez. AFB

Matías, que también está estudiante la minería subterránea romana de la que hay evidencias en Los Ancares y «apenas investigada», insistió en destacar la red hidráulica de La Leitosa, uno de los tres lugares del Noroeste, junto con Las Médulas y el yacimiento de Viana do Bolo en Orense, donde los romanos extrajeron oro a cielo abierto.

El ingeniero compartió conferencia junto al arqueólogo del Servicio Territorial de Cultura la Junta de Castilla y León, Julio Vidal, que habló a los vecinos de Vega de los 17 castros prerromanos que la administración tiene catalogados en el municipio. Vidal, que no descartó la aparición de nuevos yacimientos, apostó por la puesta en valor y el estudio del mayor de todos los castros prerromanos del que se tiene noticia en toda la provincia, el de Peña Piñera, muy próximo a las cuevas donde hace treinta años que se descubrieron las primeras pinturas ruprestres. «Nunca ha sido objeto de excavación y es un castro excepcional», afirmó Vidal, que espera que en un futuro pueda estudiarse desde el ámbito académico.

Fuente: diariodeleon.es | 9 de diciembre de 2016