CIENCIA / INVESTIGADORES ESPAÑOLES Hallan los invertebrados vivos a mayor profundidad de la Tierra.




Un equipo hispano-ruso descendió por debajo de los 2.000 metros, en la cueva de Krubera-Voronja (Georgia).

Un grupo de investigadores, espeleólogos y científicos españoles ha identificado en la cueva Krubera-Voronja de Adjasia, en el Cáucaso oriental, la comunidad de fauna viva a mayor profundidad del mundo y ha descrito este ecosistema formado por nuevas especies para la ciencia de pequeños invertebrados.
La expedición a la caverna más profunda ha revelado una interesante comunidad subterránea, que vive por debajo de los 2.000 metros y que representa a más de 12 especies de artrópodos —animales invertebrados dotados de un esqueleto externo—, incluyendo nuevas especies para la ciencia.
El biólogo valenciano Alberto Sendra formó parte de la expedición hispano-rusa que decidió descender hace dos años a las profundidades de esta sima y que ha publicado el informe del hallazgo en la revista científica International Journal of Speleology.
La fauna de esta profunda cueva se compone por invertebrados que pueden vivir a 2.140 metros de profundidad. En la investigación presentada se explica que estos ecosistemas no deben ser vistos solo como la descripción de la muerte evolutiva de especies adaptadas a ambientes subterráneos (troglomórficos), sino también como un refugio para las poblaciones de invertebrados que se ven en riesgo ante las condiciones de la superficie.
La mayor parte de la fauna del subsuelo depende de fuentes de carbono orgánico procedentes de filtraciones de agua desde la superficie, corrientes de agua subterráneas, y las actividades de los animales que entran y salen de las cuevas.

Invertebrados de jardín

Sendra, técnico de fauna de suelo del Ayuntamiento de Valencia, ha dicho a Efe, que es la«primera vez» que un grupo de españoles hace un descubrimiento de tal magnitud.
«Lo que hace insólito este trabajo y le da un valor de interés excepcional a nivel mundial es la descripción por primera vez de la comunidad de vida animal más profunda del mundo, a -2.000 metros, un ecosistema único constituido tanto por animales terrestres como acuáticos».
Los invertebrados de la cueva se distribuyen verticalmente desde la entrada hasta lo más profundo de los 2.140 metros, y entre ellos se encuentran escarabajos pequeños, milpiés, pseudoescorpiones y colémbolos. También hay crustáceos y anfípodos. Sendra los describe como «un grupo de pequeños invertebrados muy parecidos a los que vivirían en el suelo de cualquier jardín pero adaptados a las condiciones de profundidad»
La expedición fue organizada por un grupo de Cavex de la Universidad de Moscú, los espeleólogos españoles Sergio García-Dils, Pilar Orche y Javier Le Pera y la portuguesa Ana Sofía Reboleira.
En el informe de la revista International Journal of Speleology, se especifica que en la cueva, este grupo de expertos, han encontrado el troglobiont que vive a mayor profundidad, es un colémboloPlutomurus ortobalaganensis, un pequeño invertebrado que sobrevive en la caverna a partir de los 60 metros hasta lo 1.980 metros de profundidad. El anfípodo Zenkevitchia y el camarón Troglocaris son los primeros invertebrados que baten el record de vivir por debajo de los 2000 metros.
La presencia de estas especies en tal condiciones plantea varias hipótesis que los científicos se plantean resolver en próximas investigaciones. Primero, creen en la posibilidad de que el ministros de alimentos transportados por el flujo de agua en la cueva, pueden apoyar la fauna de los invertebrados en las partes profundas de los sistemas cáusticos. También plantean la teoría de que la presencia de que la producción quimiolitrófica a nivel microbiológico pueda estar contribuyendo a la supervivencia de estas especies.
Fuente:  ABC  Ciencia.










Las Danzas de la Muerte.





Las Danzas de la Muerte se caracterizan por presentar a la Muerte como el protagonista central que debe "dialogar" con una serie de personajes que representan las distintas clases sociales. La Muerte nombra a su interlocutor por su oficio, cargo o condición y lo convoca a su danza fatal. Este responde a su llamado por medio de la súplica, el lamento o la confesión de sus pecados. Por último, la Muerte dictamina la sentencia. Esta secuencia se repite constantemente hasta el final de la obra, lo que determina la estructura de la misma.
En el texto aparecen los topoi característicos del género: vanitas terrenal; ubi sunt?; de contemptus mundide putredine cadaverummemeto moriquattor hominum novissima que abarcan la muerte, el Juicio Final, el infierno y la gloria; tempus fugit. Sirven para enfatizar la crítica social, la igualación ante la muerte y el carácter moral y didáctico de la obra.

El género ocupó casi toda Europa. Una buena parte de la ideología macabra fue heredada del mundo escatológico egipcio y  a esta cultura debemos una de las obras maestras de la literatura funeraria universal: El Libro de los Muertos

. Obras representativas:


El Debate del Alma y el Cuerpo, de finales del siglo XII,  presenta como recurso el diálogo característico de las Danzas. Pero aquí, el diálogo aparece en forma de debate. No hay muerte personificada ni personajes que representen los estratos de la sociedad. Tampoco hay danza. Sin embargo, podemos notar la intención didáctica y moral del texto en que el Alma reprende con dureza los errores cometidos por el Cuerpo. Nos encontramos con los topoi de los pecados capitales que aparecen en las Danzas, así como también con otros lugares comunes relacionados con la cosmovisión medieval de lo macabro: descripción de la podredumbre material de la carne (de putredine cadaverum), castigos demoníacos y visiones apocalípticas. Hay influencias del mundo clásico, incluso de la Biblia, que también encontramos en las Danzas.

El Encuentro de los Tres Vivos y los Tres Muertos: En 1295, Baudoin de Condé compuso un breve poema titulado El Encuentro de los Tres Vivos y los Tres Muertos, de enorme importancia textual e iconográfica para el género que estudiamos. En él aparecen todos los topoi característicos de las Danzas. Además, muestra un gran énfasis en el Ars vivendi relacionado con el Ars moriendi que se funda en el motto: "Quod fuimus, estis, quod sumus, eritis", en el que se basó el autor del poema. Dicho motto es de origen clásico y oriental. Era un epitafio bien conocido en el medioevo y está ligado a motivos iconográficos mortuorios repartidos por toda Europa.
El poema trata sobre el encuentro de tres jóvenes de la nobleza (o tres reyes) con tres muertos "revividos" que reflejan el futuro de los primeros. Se entabla un diálogo acerca de la vanidad de las cosas mundanas (vanitas) y de cómo se debe vivir para evitar el mal morir (ars vivendi ars moriendi).
El Encuentro presenta diálogo, elemento característico de las Danzas; pero los vivos, en lugar de hablar con la Muerte, dialogan con sus dobles muertos. Esto es más característico de las Danzas de los muertos. Es posible que estas últimas sean una expansión del poema, en que todos los miembros de la sociedad encuentran su doble muerto. Por otra parte, este poema también tiene carácter moral y didáctico.
Un dato muy relevante es que el texto del poema aparece acompañado de su correspondiente iconografía macabra, como es propio de las Danzas. Esta representación suele aparecer en manuscritos como los Libros de Horas y en los murales de las iglesias. En Inglaterra, el poema se difunde a finales del siglo XIII cuando dos tablas con el Encuentro representado fueron compradas. La representación de los cuerpos en putrefacción y los esqueletos en la ilustración del poema hace indudable su relación plástica con la iconografía macabra de las Danzas.


La Danse macabre:  En 1424, una Danza de la Muerte fue pintada en las paredes del Cementerio de los Inocentes en París. Una vez terminada, John Lydgare vino de Inglaterra, copió los versos y los tradujo al inglés. Desafortunadamente, el cementerio debió ser destruido en 1786 debido a que la tierra estaba contaminada por los cadáveres. Actualmente, sólo conocemos la Danse macabre  francesa a través de su primera copia impresa, que fue llevada a cabo en París por Guy Machant, en 1485. En la representación gráfica se evidencia la búsqueda de representar la sociedad. A cada personaje le corresponde un muerto que es su doble. Los vivos se muestran más rígidos y los muertos más activos a diferencia de otras representaciones. Muchos personajes llevan elementos característicos de sus profesiones: el carcelero, llaves; el clérigo, una cruz, etc. Casi la mitad de los personajes son pertenecientes al clero, con el fin de enfatizar la importancia de la iglesia en la sociedad medieval. Los personajes varían el rango de mayor a menor importancia social desde el principio hacia el final de la Danza. Este orden de los personajes es característico de las Danzas en general puesto que está basado en la realidad social de la época.
Los versos del texto también fueron copiados de las paredes del cementerio. Y las estructuras sociales también se manifiestan allí. La Danza la inicia el Papa, al que le sigue el emperador, y sucesivamente se intercalan religiosos y laicos, cada vez de menor rango hasta el final. Pero estos personajes no dialogan con la muerte, sino con sus dobles muertos, por lo cual puede discutirse si esta obra sería una Danza de la Muerte o de los muertos. En esta obra las mujeres aparecen totalmente excluidas de las jerarquías sociales, lo que sucede también en otras Danzas como, por ejemplo, la castellana. Por otro lado, existen Danzas únicamente de mujeres como la Danse macabre des femmes, pero son escasas.



La Wurzburg Totentanz es el texto alemán más importante del género. Se cree que fue compuesta en 1350. En esta Danza la rígida disposición de la sociedad ha desaparecido. Se mantiene el orden de los estratos superiores a los inferiores, pero ya no se respeta la intercalación de personajes del clero y personajes laicos. Además, las mujeres son incluidas entre los hombres.


Se sabe que existió una edición de 1520 de la Dança General de la Muerte, de origen sevillano, que se ha perdido. Sólo se conserva una transcripción editada por A. de los Ríos. Algunos investigadores opinan que esta edición es una versión ampliada de la Dança castellana, mientras que otros sostienen que el original de esta edición no es el manuscrito esculariense, sino otro, seguramente más arcaico. Gracias al colofón de la transcripción tenemos certeza de que esta edición fue impresa en la ciudad de Sevilla por Juan Varela de Salamanca en 1520.
En la amplificatio que presenta esta Danza en relación con la castellana, son añadidos personajes representativos de los estratos más bajos de la sociedad y también las mujeres. La intercalación de personajes religiosos y laicos se pierde, pero el orden jerárquico se mantiene..




Fuente: María Laura Pérez Gras, USAL.

Para saber más: Jurgis Baltrusaitis, La Edad Media Fantástica.

¿Por qué hay laberintos en algunas catedrales?





Muchos de los turistas que penetran en la catedral de Chartres se plantean la misma pregunta: ¿qué hace un laberinto, un símbolo pagano, representado en el pavimento de un templo cristiano?



Este peculiar elemento podría pasar por una excentricidad de los constructores si no fuera porque no se trata de un caso aislado. Decenas de templos de toda Europa poseen representaciones similares a las del laberinto de la catedral francesa; al igual que los turistas, los historiadores todavía se preguntan cuál fue el auténtico significado y función de estas enigmáticas representaciones.
El laberinto de Chartres tiene un diámetro de 12,89 metros. Aquel que se aventuraba a recorrer su sinuoso trazado tenía que caminar unos 260 metros. Al alcanzar el centro —sin posibilidad de perderse, ya que hay un único camino—, se encontraba con una losa central en la que aparecían representados Teseo y el Minotauro, figuras hoy desaparecidas.
En Amiens encontramos otro dédalo similar. El que puede contemplarse en la actualidad — fruto de una restauración del siglo XIX— tiene 14 metros de diámetro y posee un diseño octogonal. El centro del laberinto está ocupado por otro pequeño octógono, una losa con una cruz en su interior. En los extremos de ésta aparecen representados cuatro ángeles y, entre los brazos, se observan otras cuatro figuras.


Una de ellas parece la de un obispo, mientras las otras representan a tres constructores: uno de ellos porta en la mano una regla, mientras los otros dos sujetan una escuadra, un compás y un nivel.
En la actualidad, la hipótesis más aceptada entre los historiadores propone que estos laberintos cumplían una función muy concreta: servir de sustitución del peregrinaje a Jerusalén para aquellas personas que no pudieran recorrer el duro y peligroso camino que terminaba en Tierra Santa. De este modo, el feligrés debía recorrer el laberinto de rodillas, lo que en el caso de un laberinto como el de Chartres —con recorrido de unos 250 metros— se convertía en un trayecto de una hora y media.
El "peregrino" debía acompañar su desplazamiento con rezos y meditaciones hasta que alcanzaba el ansiado centro, símbolo a la vez de Jerusalén (la terrena y la celestial) y de Dios. Además de esta función de 'pseudoperegrinaje'algunos autores proponen también un posible uso como penitencia. Así, el pecador podía purgar las faltas cometidas y, al igual que el auténtico peregrino que alcanzaba Jerusalén, obtenía el perdón. Los defensores de esta teoría se apoyan en que algunos de estos laberintos fueron conocidos también como 'Chemins de Jhérusalem' (Caminos de Jerusalén).
Un detalle que podría servir para rechazar la hipótesis del 'peregrinaje' es el hecho de que la longitud de algunos de estos laberintos es muy reducida; ni siquiera recorriéndolos de rodillas resultarían lo suficientemente largos y duros como para justificar una 'pseudoperegrinación' o una penitencia.

Además, no hay que olvidar que ya existían laberintos en iglesias cristianas en épocas muy tempranas, como el de la iglesia de Orléansville —siglo IV—, cuando todavía no había una fuerte tradición de peregrinaje a Tierra Santa que justificase el uso de estos diseños para tal fin. De todos modos, es innegable que algunos de ellos fueron utilizados con esa finalidad. Sin embargo, nada impide que estas figuras tuvieran un doble sentido.
Para algunos autores, por otra parte, los laberintos serían una metáfora de las adversidades y pruebas de la vida —representadas mediante los giros y vueltas del dédalo— a las que se enfrenta el alma humana y que desaparecen al llegar al centro (Dios). Otra hipótesis sugerente propone que estos símbolos de origen pagano eran en realidad una especie de "firmas" de los maestros constructores, basándose en ejemplos en los que éstos aparecen representados. Por último, no faltan tampoco quienes defienden que los laberintos son símbolos alquímicos, una idea que se hizo muy popular después de que el enigmático Fulcanelli lo asegurara en su célebre obra 'El misterio de las catedrales', señalando que estos dédalos eran trazados iniciáticos que conducían a la iluminación.

Fuente: Yahoo Noticias, artículo de Javier García Blanco. Imágenes, Wikipedia.




Vasili Arkhipov, el marino soviético que salvó al mundo del holocausto nuclear.




Durante la crisis de los misiles cubanos, destructores de EE.UU acosaron a un submarino soviético que estuvo a punto de lanzar un torpedo nuclear. La sangre fría de un oficial evitó la tercera guerra mundial en un episodio que permaneció años oculto.


«Un tipo llamado Vasili Arkhipov salvó al mundo». Así explicóThomas S. Blanton, director del Archivo de Seguridad Nacional de EE.UU, el papel protagonista desempeñado por un desconocido marino soviético en la crisis de los misiles cubanos de 1962. De aquel episodio la humanidad recuerda que los Estados Unidos y la Unión Soviética estuvieron a punto de arrastrarla al abismo en su pulso nuclear. Lo que poca gente conoce es que fue la decisión de una sola persona, Arkhipov, la que evitó que estallara la que habría supuesto la tercera guerra mundial.
Pongámonos en antecedentes. Arkhipov es uno de los tres oficiales al mando de un submarino soviético B-59, un sumergible de ataque al que la OTAN denominaba Clase Foxtrot. En los últimos días de octubre de 1962 navega sumergido junto a otros cuatro submarinos similares con destino a Cuba. La URSS ha instalado secretamente en suelo cubano varias lanzaderas de misiles nucleares, capaces de alcanzar territorio estadounidense en apenas unos minutos. Es la respuesta al despliegue previo de proyectiles atómicos de Estados Unidos en tierras de Turquía, una amenaza capaz de golpear y devastar Moscú en apenas un cuarto de hora que el Kremlintenía que contrarrestar.
En medio de esa escalada de tensión, con el planeta entero conteniendo el aliento y los dos colosos enseñándose los dientes, la 69 Brigada Submarina Soviética, en la que se encuadra la nave de Arkhipov, se dirige hacia aguas cubanas. Su misión, burlar el embargo que la Armada norteamericana ha dispuesto en torno a la isla y establecer una base submarina en la bahía de Mariel, en la costa norte de Cuba. El B-59 de Arkhipov va equipado con torpedos nucleares, una carga letal para una guerra desastrosa que cada vez se ve como más inminente. Pocos días antes, un avión espía U-2 de los Estados Unidos ha caído derribado en suelo cubano y un grupo de cazas MIG soviéticos ataca a otro de estos aparatos mientras completaba un vuelo de reconocimiento en Siberia.
Mientras en el Pentágono se ultiman los detalles para la invasión final de la Cuba castrista y prosoviética, los buques de la US Navy y losaviones espías de la CIA sobrevuelan el Caribe en busca de embarcaciones soviéticas intentando introducir más armamento nuclear en la isla. Las instrucciones del secretario de Defensa Robert Mcnamara son tan claras como peligrosas: si detectan cualquier intruso, los buques norteamericanos deben obligarlo a emerger e identificarse y bloquear su acceso. Una de esas embarcaciones es el B-59. El máximo responsable del buque, Vitaly Savitsky, lleva como segundos a bordo a Arkhipov y un oficial político.

Cazando al submarino intruso

A media tarde del 27 de octubre de 1962 los acontecimientos se precipitan. Un grupo de destructores estadounidenses detecta la brigada del B-59. Ignorando que se las ven con buques con armamento nuclear, los barcos norteamericanos comienzan a lanzar cargas de profundidad para forzar a los submarinos soviéticos a emerger. A bordo del sumergible de Arkhipov se viven momentos de pánico y caos. Ante la gravedad de los acontecimientos, el trío de oficiales al mando había zarpado de la URSS con autorización para lanzar sus torpedos nucleares si todos ellos estaban de acuerdo en hacerlo. Sin comunicación con Moscú, y dudando si ya había estallado la guerra entre las dos superpotencias, bajo las aguas del Caribe, con medio mundo pendiente de sus televisores, de las decisiones de Kennedy y de Kruschev, un grupo de marinos acosados tendría que decidir el destino de la humanidad.
El oficial de comunicaciones Vladimir Orlov vivió a bordo aquellos dramáticos instantes. Según su versión, tras una larga travesía transoceánica sumergidos, la tripulación y el capitán Savitsky «estaban exhaustos». Las cargas de los destructores norteamericanosexplotaban a pocos metros del casco del submarino soviético. «Era como estar sentado en un barril de metal que alguien golpea continuamente con un martillo». Así hostigado, al límite de su resistencia psicológica, presionado por una marinería que exigía defenderse, Savitsky hace un último intento de contactar con Moscú. No hay manera. Enfurecido y desesperado, decide lanzar su mortífero torpedo, aun a sabiendas de que sería el fin también para él y sus hombres: «Los volaremos por los aires; moriremos todos pero hundiremos todos sus barcos», exclama antes de reunir a sus dos segundos a bordo para ratificar una decisión que requiere su consentimiento.
En medio del bombardeo yanqui, a unos centenares de metros bajo el Caribe, los tres marinos celebran una reunión que decidió el destino de la humanidad. Savitsky quiere abrir fuego, el oficial político está de acuerdo. Solo falta Arkhipov. Pero él dice que no. En esas circunstancias extremas, únicamente la frialdad y el coraje de un hombre evitan lo que habría supuesto una catástrofe sin precedentes.

«Un tipo que salvó al mundo»

Arkhipov convence a Savitsky de que haga emerger el submarino. El B-59 asoma a la superficie y da media vuelta a la espera de instrucciones del Kremlin rehuyendo el enfrentamiento con la Task Force norteamericana. Pocas horas después, Kennedy y Kruschev alcanzan un acuerdo que hace suspirar de alivio a toda la humanidad.
Nadie lo supo entonces, ni siquiera Kennedy, pero Arkhipov salvó aquel sábado al mundo. Su historia no se hizo pública hasta 2002. En un congreso celebrado en La Habana a los cuarenta años de aquel episodio, Mcnamara, basándose en documentos estadounidenses desclasificados, admitió que la guerra nuclear estuvo más cerca de lo que nadie había pensado. Thomas S. Blanton aclaró a que se refería: «Un tipo llamado Vasili Arkhipov salvó al mundo». Aquel tipo había muerto tres años antes.
Fuente: ABC Hemeroteca.


Descubren el calendario maya más antiguo: las tablas astronómicas del sigo IX describen el ciclo de la Luna y los planetas más allá de 2012


Las tablas astronómicas del siglo IX, pintadas en las paredes de una casa en un yacimiento de Guatemala, describen el ciclo de la Luna y los planetas mucho más allá de 2012


Figuras humanas que aparecen en una de las paredes con las tablas astronómicas - NATIONAL GEOGRAPHIC

Un equipo de arqueólogos norteamericanos ha descubierto en el yacimiento de Xultún, una gran ciudad escondida en la selva de Petén, en Guatemala, el calendario maya más antiguo que se conoce. Estas tablas astronómicas del siglo IX, que anteceden en varios siglos a los famosos códices mayas escritos en papel de corteza, están pintadas en los muros intactos de lo que parece ser la vivienda de un escribano. Las paredes, adornadas con pinturas únicas -una de ellas representa una formación de hombres con uniformes negros-, están repletas de cientos de números garabateados. Los glifos son cálculos de ciclos: el ceremonial de 260 días, el solar de 365 días, el de 584 días del planeta Venus y el de 780 días de Marte. Las tablas, que intentan encontrar la armonía entre los eventos celestes y los rituales sagrados, se extienden unos 7.000 años en el futuro y son cíclicas, por lo que, según los investigadores, no proporcionan ninguna señal para pensar que el fin del mundo ocurrirá en diciembre de 2012, como la creencia popular se empeña en mantener. El sorprendente hallazgo aparece publicado en revista Science.
Xultún, un área de 12 kilómetros cuadrados donde decenas de miles de personas vivieron una vez, comenzó a construirse en el siglo I antes de Cristo. El lugar prosperó hasta el final del período Clásico maya -su último monumento data del año 890 d.C.- y quedó en el olvido hasta que fue descubierto hace unos cien años por unos trabajadores guatemaltecos. En 2010, una expedición financiada por la National Geographic Society sacó a la luz una vivienda de la antigua ciudad oculta por la vegetación, a un metro bajo la superficie.
Lo que había dentro asombró a los arqueólogos. Tres muros pintados, cada uno con su propia historia, prácticamente intactos. En ellos, pequeños glifos rojos y negros arriba y abajo por toda la pared, barras y puntos que representan columnas de números. «No es un templo ni un monumento. Por primera vez, teníamos ante nuestros ojos los registros reales en poder de un escribano», describe por teléfono a ABC.es William Saturno, profesor de arqueología en la Universidad de Boston (EE.UU.). «Es como ver un episodio de la serie de televisión 'Big Bang Theory', utilizaban las paredes como un pizarrón para escribir sus problemas matemáticos», continúa. El investigador cree que los escribanos o astrónomos de la época copiaron los datos de «algún libro que no ha llegado hasta nuestros días».

Predicción de eclipses

Las pinturas representan el primer arte maya encontrado en las paredes de una casa. El muro norte, al frente según se entra en la habitación, muestra a un rey sentado, vestido con plumas azules. La imagen de otro hombre aparece en un vibrante color naranja. Los glifos cerca de su cara le llaman «hermano más joven de Obsidian», un curioso título rara vez visto en los sitios mayas. Saturno cree que puede tratarse del hijo o del hermano menor del rey, posiblemente el escriba que vivió en la casa.
En la pared oeste, otras tres misteriosas figuras masculinas aparecen pintadas de negro, con taparrabos blancos, medallones alrededor de sus cuellos y tocados con una pluma, algo que también supone una novedad. Una especialmente corpulenta «como un luchador de sumo» es el «hermano mayor de Obsidian».
Pero lo que sin duda resulta más atractivo y misterioso son los calendarios y los cálculos que, en vez de en códices, como ocurriría cientos de años después -el más famoso es el códice de Dresde-, han aparecido escritos en las paredes. El muro oriental está dominado por figuras numéricas, incluidas las columnas de números que representan los cálculos de conteo y calendario. Algunos siguen las fases de la Luna, otros intentan reconciliar los períodos lunares con el calendario solar, «una forma de predecir eclipses», dice Saturno. Incluso algunas notas pintadas en rojo junto a los cálculos parecen correcciones. «Los mayas tenían grandes conocimientos de astronomía», dice el arqueólogo. «Los utilizaban para planificar sus eventos en sus vidas, como por ejemplo la coronación del rey o cuándo empezar una guerra con otro pueblo».

7.000 años en el futuro

Precisamente, en el muro norte cuatro largos números que representan de un tercio de millón a 2,5 millones de días reúnen todos los ciclos astronómicos que los mayas consideraban importantes, como los de Marte, Venus y los eclipses lunares. Estas fechas se extienden unos 7.000 años en el futuro, demasiado tiempo como para considerar que el mundo puede acabar en 2012.
Muy al contrario, los científicos creen que estos símbolos reflejan una visión determinada del mundo que nada tiene que ver con las populares profecías sobre el final de los tiempos. «Para los mayas todo era cíclico», dice William Saturno, que se ríe al recordar los terribles presagios para finales de año y pone un ejemplo: «Debemos pensar en el cuentakilómetros de un coche, cuando se pone otra vez a cero, vuelve a empezar». Pese a estos razonamientos, el científico está convencido de que cuando llegue el 21 de diciembre y no ocurra nada, los catastrofistas «se inventarán una nueva fecha». «Tenemos algo que aprender de los mayas y es que nosotros, en vez de pensar en cómo mejorar el mundo, parece que solo pensamos en su fin», reflexiona.

Fuente: abc.es

Collodictyon, organismo que cambia el árbol de la vida.

Por José de Toledo | Apuntes de Naturaleza 
En biología, como en otras ciencias, es muy raro que aparezcan nuevos resultados que modifiquen de una manera importante la forma en la que entendemos el mundo. Pero la publicación de un artículo hace unos días puede cambiar nuestras ideas sobre el árbol de la vida.
En dicha publicación se da a conocer al que han llamado "el ancestro más antiguo del hombre", el Collodictyon, un tipo deprotozoo que han encontrado en un lago noruego. Se trata de un organismo que no encaja con ninguna de las líneas evolutivas conocidas hasta ahora. Lo han clasificado de momento como un protozoo porque en realidad esun cajón de sastre para muchos seres vivos que no terminamos de entender ni podemos clasificar.
Pero, ¿qué es lo que lo hace tan especial? Básicamente, que mezcla características de varios grupos distintos y, al mismo tiempo, tiene algunas que nunca se habían visto. Los biólogos clasifican todos los seres vivos en un sistema de taxonesgrupos afines que están relacionados evolutivamente. La forma más fácil de verlo es como un sistema de cajones. Cada cajón guarda organismos que tienen algo en común. En los cajones más grandes (Reino o Filo) las características comunes son muy generales. Según se van haciendo más pequeños los cajones, las diferencias son menores, hasta llegar al cajón más pequeño, el de Especie.
El taxón más alto que se acepta hoy en día es el de Dominio, y sólo hay tres: bacterias, arqueas y eucariotas. El siguiente es el de reino, y para eucariotas, que es al que pertenecemos todos los animales y plantas, hay cuatro: Animales, Plantas, Hongos y Protistas (o protoctistas). Lo que todos estos seres vivos tenemos en común es que nuestros cromosomas están contenidos en una membrana, es decir, que tenemos núcleo celular.
Una de las características que diferencian a los distintos reinos es el número de flagelos. Puede parecer una diferencia poco importante, pero no es así por dos buenos motivos. El primero es que las diferencias en el número de flagelos implican distintas formas de moverse, y esta es la "primera gran decisión" de todos los organismos. Y la segunda es que, hasta ahora, sólo se conocían dos opciones:tener dos flagelos por célula, como las algas y las plantas; o uno como los hongos, amebas y animales.
Pero esto ha cambiado al estudiar al protozoo de Noruega. Este organismo tiene cuatro flagelos, y por su estructura y su disposición en la célula, los investigadores están razonablemente seguros de que es una opción totalmente distinta. Es decir, que no son dos pares del mismo tipo de flagelos que había antes, ni cuatro copias del otro tipo de flagelos. Esto coloca a este protozoo en un lugar nuevo del árbol de la vida, a mitad de camino entre los dos anteriores.
Pero ahí no queda la cosa. Por su estructura celular interna, se parece al tipo más antiguo de organismos con dos flagelos, los Excavata. Pero la forma de su membrana celular es igual a la de ciertos tipos de amebas, que serían los más antiguos con un sólo flagelo. Al tener características de ambos grupos, habría que situarlo en un escalón evolutivo por debajo. Es decir, este nuevo tipo de seres vivos serían los antecesores comunes tanto de plantas como de animales.
El siguiente paso que tienen que dar los investigadores es el de encontrar más organismos parecidos. El problema está en que este tipo de seres vivos no son fáciles de encontrar, y tampoco de criar en el laboratorio. De momento, sólo se conoce un posible "primo evolutivo" de estos curiosos organismos, otro protozoo encontrado en Japón. Cuando se consiga secuenciar su ADN y se compare con el de Noruega, se podrá ir rellenando esta nueva rama del árbol de la vida. O podarla por completo, si se encuentra otra explicación mejor.

Fuente: Yahoo.es 

Cuerpos despellejados, misterioso ritual mortuorio en el Himalaya.



Los restos de 27 hombres, mujeres y niños de la antigüedad se han descubierto en cuevas sobre acantilados en Nepal. Los expertos afirman que muchos de los huesos muestran cortes que apuntan a un ritual mortuorio desconocido hasta el momento.
Los cuerpos, a muchos de los cuales se les había quitado la carne,fueron colocados en altísimos depósitos de cadáveres hace alrededor de 1.500 años.
Los investigadores, que encontraron los restos en 2010, indicaron que cerca del 67 por ciento de los cuerpos habían sido despellejados, probablemente con un cuchillo de metal.
Después del proceso de desollamiento, los cuerpos se dejaron cuidadosamente sobre plataformas anchas de madera, aventuran los investigadores. No obstante, debido a siglos de exposición a los elementos, los huesos y las plataformas, así como muchas de las cuevas en sí se habían derrumbado para cuando el equipo entró en las estancias.
Entre el montón de cosas se encontraron también restos de cabras, vacas y caballos, quizás sacrificios de ofrenda para los muertos, aunque su intención sigue siendo un misterio.
Excavadas en los acantilados del distrito de Upper Mustang, con su característico color rojizo, las cuevas de manufactura humana se encuentran a 4.200 metros sobre el nivel del mar, a bastante más altura que el pueblo de Samdzong.
En la antigüedad, los afloramientos rocosos y, probablemente, el uso de escaleras, habría facilitado el acceso a las cuevas. Sin embargo, desde entonces la erosión ha convertido las cuevas en lugares tan sólo accesibles para escaladores expertos, como Pete Athans, que ha conquistado la cima del Everest en siete ocasiones y que fue uno de los co-líderes del equipo.
"Las pistas sobre cuándo se construyeron estas cuevas y quién las construyó se están deshaciendo ante nuestros ojos”, dijo Athans en una declaración ante la prensa. “La tumba de la cueva se encuentra gravemente amenazada. Está situada sobre una matriz de roca frágil que ya se ha derrumbado alguna vez en el pasado. No creo que la tumba hubiese aguantado otro monzón”.

Despellejados, con todos los respetos

Se sabe muy poco sobre los tres antiguos grupos del Himalaya que despellejaban y enterraban a sus muertos en las altas cuevas de Mustang, lo que hace los motivos que rodean al rito incluso más turbios. A pesar de todo, el equipo ha descartado el canibalismo.
"Cuando uno quiere la carne, procesa el esqueleto de forma muy diferente de cuando sólo intenta quitarla”, explicó el líder del proyecto, Mark Aldenderfer, arqueólogo de la Universidad de California, en Merced.
"En los casos de canibalismo, la base del cráneo suele estar aplastada (para llegar al cerebro), y los huesos están rotos y retorcidos, normalmente para intentar alcanzar la médula. Nada de esto se da en niguna de las partes del cuerpo que hemos recuperado.
"Esto se hizo de forma respetuosa”, añadió Aldenderfer, que recibió financiación parcial por parte del National Geographic Society's Committee for Research and Exploration (Comité para la Investigación y la Exploración de la Sociedad National Geographic). Esta sociedad es la propietaria de National Geographic News.
Los análisis preliminares de ADN de algunos de los huesos sugieren que los sujetos despellejados estaban relacionados. "Supongo que muchas de estas cuevas mortuorias son para familias extensas numerosas”, dijo Aldenderfer. "Éste debía de ser su lugar tradicional de entierro, y las demás familias tendrían el suyo propio”.

¿Un rito de segunda mano?

Aldenderfer y su equipo creen que la práctica de desollar cuerpos y enterrarlos en cuevas podría ser un nexo, hasta ahora desconocido, entre otros dos rituales mortuorios cuya existencia ya se conocía.
Por un lado, el funeral celeste tibetano (que, según se cree, se originó varios cientos de años después) incluye el desmembramiento de un cuerpo y su exposición a los elementos y a los animales carroñeros, como los buitres. El Tíbet actual se encuentra a tan sólo 16 kilómetros de las tumbas de las cuevas.
El otro ritual funerario es más antiguo y viene de la religión de Zoroastro, cuyas raíces se remontan a la antigua Persia (la actual Iran). Según Aldenderfer, se sabe que los zoroastristas “quitaban la carne de sus muertos y se la daban a los animales como comida”.
Los antiguos habitantes de la región Upper Mustang podrían haber adoptado rituales funerarios de los viajeros zoroastristas que se dirigieran al oeste, indicó Aldenderfer. Estos ritos, a su vez, se podrían haber transformado en el ritual funerario celeste de los tibetanos o, por lo menos, haberlo inspirado.
Esta idea, de acuerdo con el antropólogo Mark Turin, que no formó parte del proyecto, es una “hipótesis interesante y que se puede desarrollar perfectamente".

«Complejos residenciales»

Los nuevos hallazgos no son sino los más recientes de una serie de ellos descubiertos en los remotos acantilados. En los años ochenta, un equipo nepalí-alemán descubrió tumbas en cuevas que databan de 3.000 años atrás. Sin embargo, los restos humanos encontrados en esas cuevas no habían sido despellejados.
En 2009, el equipo que ha llevado a cabo el hallazgo más reciente anunció que había encontrado una cueva en un acantilado con un valioso contenido consistente en arte tibetano, manuscritos y esqueletos del siglo XV.
Junto con el reciente descubrimiento de las cuevas mortuorias, el equipo de Aldenderfer ha encontrado cuevas adyacentes que se crearon posteriormente, con toda probabilidad con la intención de usarlas como viviendas.
"No creo que la gente que construyó estos ‘complejos residenciales’ supiera en realidad que las cuevas mortuorias estaban cerca”, comentó Aldenderfer.
Turin, director del Proyecto Digital Himalaya en la Universidad de Cambridge, aseguró que no le sorprendía que la gente se hubiera sentido atraída de forma repetida hacia los acantilados de Upper Mustang, a pesar de las dificultades.
De hecho, el aislamiento del acantilado podría haber supuesto una parte importante de su atractivo. Muchas de las creencias locales que se han venido practicando en la región, incluido el budismo, otorgan un gran valor a la idea del retiro espiritual, añadió Turin.

Paisaje sagrado

"Hoy en día los monjes pueden practicar y residir en monasterios, pero estamos hablando de épocas muy anteriores a la creación de los monasterios”, prosiguió. "Perfectamente podrían estas cuevas haber sido lugares protomonásticos… y, como tales, la gente se podría haber retirado a ellos o haber enterrado a sus muertos en ellos”.
Además, Turin añadió, la gente de la época podría haberse sentido unida a la tierra de una forma que podría resultar difícil de comprender para muchos occidentales modernos.
Incluso hoy en día, “hay una historia muy famosa sobre el amansamiento del territorio que aún circula… Cuando los santos budistas llegaron y mataron a las deidades locales, su sangre (y sus partes del cuerpo) mancharon la tierra y crearon los colores” del paisaje, dijo Turin.
"La cultura religiosa que existe en las mentes de las personas se puede leer en el paisaje de su tierra. Esto significa que el paisaje es sagrado, y que por lo tanto las cuevas y los lugares de retiro lo son igualmente”.
Fuente: National Geographic (en español).