Réplica del Miliario de El Priorato





Fotografías facilitadas por José Luis Vicente González

Los "Caminos Zamoranos": ¿Hubo alguna vez una época en la que nadie ignoraba dónde se encontraba la ciudad de Zamora?

CAÑADA “ZAMORANA” EN GORDONCILLO (LEÓN). MTN 1/25.000 (I.G.N.).

Zamora es, actualmente, una pequeña y tranquila ciudad de poco más de 65.000 almas, capital de una provincia que desde hace siglos parece haber quedado casi totalmente a trasmano del devenir de la Historia (aprovecho la ocasión para invitar a visitarla a todos los miembros de REHA, pues su pasado y patrimonio cultural hacen que Zamora sea especialmente atractiva para los aficionados al estudio de la historia).

Cuando el que suscribe era más joven, pasaba buenos ratos poniendo en apuros a sus amigos y conocidos madrileños desafiándoles a que acertaran, sin fallar ninguna, las provincias que rodeaban a aquella de la que desciende por parte de ambos progenitores, que no es otra que Zamora (al autor de estas líneas le nacieron, "por error", en Madrid, desliz que pudo subsanar felizmente al terminar los estudios y comenzar a trabajar).

Volviendo al desafío reseñado, pese a que el nivel de los candidatos a superarlo no solía estar en absoluto por debajo de la media nacional, nadie consiguió solventar jamás con total éxito el reto planteado.

Sin embargo, la ciudad de Zamora también tuvo, sin duda, sus pasados momentos de gloria y esplendor. Así lo certifican numerosos topónimos camineros que se distribuyen, de manera aparentemente inconexa, por buena parte del occidente de la Meseta Septentrional.

En total, hemos recopilado, en diversas cartografías, alrededor de 60 topónimos alusivos a vías de comunicación que conducen, o condujeron en su momento hacia Zamora desde la comarca de "Tierra de Campos"y alrededores: “Camino Zamorano”, “La Zamorana”, “Cañada Zamorana”, Camino Real de Zamora”, “Carrezamora”, “La Zambrana”, etc. Estos variados topónimos suelen alternarse, en muchas ocasiones, a lo largo de un mismo trazado. A la vista del aparente caos que puede apreciarse en el mapa incluido a continuación, donde tales denominaciones se representan por medio de rombos de color negro, es obligado hacerse la siguiente pregunta: ¿obedece a alguna razón coherente tal batiburrillo de "Caminos Zamoranos"?.

TOPÓNIMOS "CAMINO ZAMORANO" Y SIMILARES (ROMBOS NEGROS).

La respuesta, sorprendentemente, ya que la ciudad de Zamora no existía, o era un diminuto villorrio por épocas tan lejanas en el tiempo, viene de la mano de los romanos, tal y como explicaremos a continuación.

Si consultamos la cartografía de detalle elaborada a partir de principios del siglo XX, podremos comprobar que el topónimo "Camino Zamorano" se concentra insistentemente a lo largo del recorrido de diversas vías pecuarias que corren paralelas a los más importantes cursos de agua que riegan la “Tierra de Campos” y algunas otras áreas próximas:
  • Río Cea, entre Sahagún y Fuentes de Ropel.
  • Río Valderaduey, entre Sahagún y San Martín de Valderaduey. 
  • Río Sequillo, entre Villamartín de Campos y Coreses.
  • Río Órbigo, entre Villabrázaro y Benavente.  
  • Arroyo de la Almucera, entre Cunquilla de Vidriales y Mózar.
Veamos, a continuación, algunos ejemplos sobre la cartografía manejada:

"CAMINO ZAMORANO" EN EL MTN 25 (I.G.N.).
 "CAMINO ZAMORANO" EN EL MTN 50 (I.G.N.).

 "CAMINO ZAMORANO" EN PLANIMETRÍA DE PRINCIPIOS DEL SIGLO XX (I.G.E.).
 ENLACE A OTROS EJEMPLOS SIMILARES, ACCESIBLES EN “MIS FOTOS".

Vamos a añadir un nuevo mapa donde pueden observarse, en toda su extensión, los tramos de las cañadas que siguen los cursos de agua arriba citados en los que se concentran los topónimos objeto de nuestro interés.

TRAMOS DE CAÑADAS DENOMINADOS "CAMINO ZAMORANO" O SIMILAR (LOS CÍRCULOS AMARILLOS INDICAN LA PRESENCIA DE YACIMIENTOS DE ÉPOCA ROMANA).

Todas las cañadas representadas en el mapa anterior discurren sobre el trazado de antiguas vías romanas, como apunta la nutrida concentración de yacimientos de la época que las jalonan, (círculos de color amarillo). Ahora bien ¿qué tiene que ver esto con la ciudad de Zamora, se preguntará el paciente lector?...

Veamos que sucede cuando al mapa le añadimos los trazados que, según el autor, se identifican con el recorrido de las principales calzadas romanas que vertebraron el occidente de la Meseta Septentrional (vías relacionadas en el Itinerario de Antonino, vía que enlazaba PETAVONIVM con OCELO DVRI a través de Milles de la Polvorosa, y enlaces BRIGECIO - LEGIO VII).

"CAMINOS ZAMORANOS", VÍAS DESCRITAS EN EL ITINERARIO DE ANTONINO, VÍA OCELO DVRI – PETAVONIVM Y ENLACES BRIGECO – LEGIO VII POR EL ESLA (LOS ROMBOS EN COLOR ROSA IDENTIFICAN LOS TOPÓNIMOS ALUSIVOS A “CAMINOS ZAMORANOS” LOCALIZADOS EN LAS DISTINTAS FUENTES UTILIZADAS).

Ahora sí que parece que la cosa va tomando color. En el mapa anterior, además de los trazos negros y blancos que representan las vías desplegadas en época romana, aparecen unos tramos de reducido recorrido, aledaños a la ciudad de Zamora, diferenciados del resto mediante una simbología particular (trazos discontinuos blancos y negros). Tales tramos representan los únicos añadidos que las gentes del Medievo tuvieron que acondicionar para conectar a Zamora “La Bien Cercada”, según el Romancero, a la red viaria heredada del periodo de dominación romana.

La conclusión de este pequeño "divertimento" es bien patente. Tal y como escribimos anteriormente en la comunicación destinada a explicar, en líneas generales, la metodología por nosotros aplicada para investigar la red viaria de HISPANIA durante la Edad Antigua mediante herramientas SIG, Historia y Caminería son dos conceptos intensamente interrelacionados, y el uno no se puede explicar coherentemente sin tener en cuenta el otro.

Dicho de otra manera, las evidencias históricas y arqueológicas se configuran, junto al conocimiento de las técnicas constructivas utilizadas, como un apoyo insustituible para rastrear la traza de caminos perdidos hace siglos, y el conocimiento de la red viaria (muy condicionada, a su vez, por la topografía y la geología) se revela como una herramienta utilísima para dar su correcto sentido a determinados yacimientos arqueológicos, o para contribuir a explicar determinados sucesos ocurridos en el pasado.

Por José Luis Vicente González
Milles de la Polvorosa, a las 00:00 horas del 9 de marzo de 2012.

Un saludo a todos.

La calzada del Miliario de "El Priorato" (Milles de la Polvorosa, Zamora) II: Recorrido de la vía que terminó con la independencia de las tribus astures

EN TRAZO DISCONTINUO BLANCO Y NEGRO, RECORRIDO DE LA VÍA OBJETO DEL “POST”. EN COLOR NEGRO, TRAZADO DE OTRAS VÍAS PRÓXIMAS DESCRITAS EN EL ITINERARIO DE ANTONINO.

Cumpliendo con el compromiso adquirido en el anterior “post”, aquí estamos de nuevo para contar a quien quiera leerlo lo que hemos averiguado durante estos últimos años en relación con la vía que pasa por el término del pueblo donde vivimos, y del que descendemos por parte materna.

En primer lugar, diremos que, por el occidente del Esla, desde un primer momento estaba claro el destino de la calzada a cuya vera apareció el miliario, que no podía ser otro que PETAVONIVM, uno de los principales enclaves militares romanos en Hispania desde finales del siglo I a.C. hasta la caída del Imperio Romano.

La importancia de PETAVONIVM como asentamiento legionario no tiene discusión, ya que goza de rotundos avales arqueológicos, y además aparece citado en dos solventes fuentes escritas originarias de la época romana (NOTITIA DIGNITATVM e Itinerario de Antonino).

El punto donde apareció el miliario enlaza con PETAVONIVM a través de un trazado, modernamente muy transformado a causa de las concentraciones parcelarias realizadas a finales del siglo XX, cuyas sucesivas denominaciones avalan su gran relevancia comarcal y largo recorrido en épocas ya olvidadas. Nos referimos al "Camino Zamorano" que desde “El Priorato”, progresa ribera arriba a lo largo del "Valle de Vidriales".

Las planimetrías elaboradas por el Instituto Geográfico y Estadístico (IGC) entre 1908 y 1911 dan constancia de que este recorrido se conoció, en época moderna, bajo las siguientes denominaciones (entre paréntesis, localidades a que corresponden las planimetrías donde se cita el nombre):
  • Camino del Priorato (Milles de la Polvorosa).
  • Camino de Mózar a Milles (Mózar). 
  • Camino Zamorano (Mózar, Villanázar, Vecilla de Trasmonte, Colinas de Trasmonte y Quiruelas de Vidriales).
  • Camino de Cunquilla de Vidriales a Quiruelas de Vidriales llamado "Zamorano" (Quintanilla de Urz, Brime de Urz y Cunquilla de Vidriales). 
  • Camino de Moratones a Cunquilla de Vidriales (Granucillo).
  • Camino de Bercianos a Cunquilla de Vidriales (Bercianos-Villaobispo-Moratones). 

EL "CAMINO ZAMORANO" EN LA CARTOGRAFÍA 1/50.000 DEL I.G.N. (1ª EDICIÓN).

A partir de Bercianos la calzada desaparece de las planimetrías, al no haberse conservado el tramo existente entre dicha localidad y la puerta pretoria del campamento del ALA II FLAVIA HISPANORVM CIVIVM ROMANORVM, emplazado en Rosinos de Vidriales, que está perfectamente alineada con la dirección del trayecto.

Por fortuna, el Inventario Arqueológico de Zamora incluye una ficha que nos permitió confirmar la existencia de la calzada, y rastrear  su recorrido en su tramo no coincidente con ningún camino que haya llegado a nuestros días.

El motivo de que desapareciera de la red viaria este último sector de la calzada es fácil de comprender, si consideramos que PETAVONIVM desapareció también como enclave habitado al finalizar la Edad Antigua.

El yacimiento que se corresponde con la calzada se denomina "Carretera de los Moros", y la descripción que de él se hace en la ficha del inventario es la siguiente: " La calzada se encuentra situada en unazona de baldío, dentro de la vega del Almucera que en la actualidad se dedica a pastos, a unos 120 m. al N. del arroyo, discurriendo paralela al mismo. Por el O se pierde a la altura del camino que, saliendo de Bercianos, se dirige al arroyo Almucera. Por el E se sigue con claridad hasta el pago conocido como Los Arenales, perdiéndose después. Dentro de la llanura general, la calzada supone una ligera elevación (25-30 cm.) sobre el nivel general del suelo, estando además señalada por la distinta coloración de la maleza con respecto a la zona circundante. Posee una anchura de 7,5 m. y está compuesta por un material pedregoso (gravas con cantos rodados) que contrasta con la composición de la periferia (arcilla). Su orientación es NO-SE. La cronología concedida a esta calzada abarca desde momentos romanos a medievales".

Y más adelante se añade: "A partir de las encuestas realizadas a los vecinos de la localidad, se ha podido saber que esta calzada debió conectar el campamento de Petauonium, Rosinos de Vidriales, con Granucillo. También se nos ha  señalado que un tramo de la calzada pasaba al S del caserío de Villaobispo, siendo imperceptible en la actualidad, debido a las labores agrícolas y a la construcción de casas".

Desafortunadamente, el yacimiento fue recientemente arrasado, al realizarse una plantación de chopos en la zona en 2005 o 2006, por lo que muy poco resta hoy en día del terraplén o agger descrito en el anterior texto.

Sin embargo, el arqueólogo que elaboró la ficha en noviembre de 1990, Sr. Lucio Martínez, tuvo la precaución de incluir en su informe diversas fotografías, por lo que, al menos, debe quedar testimonio gráfico de estos últimos restos de vía (según refleja la ficha "La documentación fotográfica de esta ficha se encuentra depositada en el Servicio Territorial de Arqueología de la Junta de Castilla y León en Zamora, dentro de los informes correspondientes al Inventario de 1990, dirigido por R. Martín Valls y A.Esparza").

Una vez llegado a PETAVONIVM, un hipotético viajero podría escoger, entre otras posibles opciones, entre dirigirse a BRACARA AVGVSTA, o continuar su camino hacia ASTVRICA AVGVSTA, dependiendo del sentido en que decidiera seguir la ruta 17 descrita en el Itinerario de Antonino que, como es bien sabido, tiene en PETAVONIVM una de sus mansiones.

Vayamos a continuación con el otro extremo de la vía, que nos resultó bastante más complicado de rastrear. Para empezar a tirar del hilo, contamos con una importante y confiable pista, el numeral del miliario. El hecho de que, en un primer tanteo, la cifra indicada (259 millas romanas, es decir, 383,32 Km) se ajuste bastante bien a la distancia que separa Mérida del punto de aparición del miliario (siguiendo el recorrido de la ruta 24 del Itinerario hasta OCELO DVRI, y progresando desde dicho punto hacia el norte en dirección más o menos recta), induce poderosamente a considerar que la referencia kilométrica del miliario se corresponde con AVGVSTA EMERITA.

Por otra parte, hay otras razones que apoyan la propuesta anterior. Las inscripciones miliarias tenían un importante componente propagandístico, y el punto de paso del Esla, por entonces denominado  ASTVRA, cruce obligado para todos los contingentes legionarios que circulaban entre PETAVONIVM y los destinos situados al oriente del río, se configura como un emplazamiento ideal para llegar "publicitariamente" a la tropa y al personal civil en movimiento por el Noroeste de Hispania. No debe olvidarse a tal efecto, que AVGVSTA EMERITA fue fundada como colonia de veteranos en época de OCTAVIO AVGVSTO, y que fue un enclave que gozó de todas las comodidades a las que podía aspirar una urbe por entonces (acueductos, alcantarillado, termas, teatro, circo, anfiteatro, etc.). Por tanto, un miliario que indicase la distancia a AVGVSTA EMERITA, podría estar recordando constantemente a los legionarios destinados en la gran zona minera del Noroeste el "premio" que les esperaba al final de su vida militar, si cumplían correctamente con sus obligaciones durante su prolongado periodo de servicio. 

Una vez prefijada la hipótesis de que el destino final de la vía al otro extremo del puente sobre el ASTVRA fuera AVGVSTA EMERITA (se entiende que a través OCELO DVRI, enclave donde la vía enlazaría con la ruta 24 del Itinerario), procedimos a buscar en las planimetrías del I.G.E. una combinación de caminos que se dirigiera hacia OCELO DVRI respetando los condicionantes característicos de toda vía romana: ausencia de grandes pendientes, óptima geometría y presencia de vestigios de existencia de infraestructura de cimentación

En principio la cosa no fue fácil, pues la tirada más evidente, bajar desde Villaveza del Agua por el "Camino de Villaveza del Agua a Villarín de Campos" hasta enlazar con el "Camino de las Carretas", arteria de indiscutible vocación carretera que atraviesa el oeste de la comarca terracampina en dirección norte-sur, conducía directamente al cauce del río Salado, que también exhibe una orientación norte-sur.

El "Camino de las Carretas" enlaza, por la ribera occidental del Salado, con otros tramos viarios, muy próximos al cauce del río, que continúan progresando hacia el sur, hasta llegar al río Valderaduey, cauce del que el río Salado es tributario, en las cercanías de la localidad de Molacillos.

El fondo de valle del Salado acumula una gran cantidad de limos y arcillas, que "a priori", parecían desaconsejar claramente el corredor para construir una calzada. Sin embargo, los libratores y praefectus fabrum romanos, demostrando ser bastante más listos que el autor de estas líneas, escogieron este pasillo para trazar su calzada, por los motivos que ahora explicaremos.

En primer lugar, tenemos que considerar que, al norte de OCELO DVRI, las formaciones geológicas predominantes, entre las que destacan la "Facies Tierra de Campos" y la "Facies Tierra de Campos Marginal", se caracterizan por presentar una composición en la que sobresalen por su abundante presencia las arcillas, limos y arenas, y son prácticamente inexistentes las piedras de cualquier tipo.

Por contra, los suelos aluviales del ríos Salado y Valderaduey presentan aluviones integrados por materiales detríticos gruesos, fundamentalmente cantos y bloques. Este fue el principal motivo, según nuestra opinión, por el que los ingenieros romanos decidieron llevar su calzada por el corredor del Salado.

La traza de la calzada (actualmente reconvertida en carretera en buena parte) se aleja del río lo justo para evitar los terrenos inundables, pero sin perder nunca la proximidad del cauce, a los efectos de optimizar los transportes del material de cimentación durante la fase de construcción de la vía.
Una vez comprendida la motivación anterior, procedimos a reconstruir el trazado de la vía, y a verificar su existencia real en campo y en gabinete. Por medio del SIG pudimos apreciar que la traza se ajustaba perfectamente a la distribución de los yacimientos romanos, y que las distancias cuadraban con notoria precisión, como se verá más adelante. También constatamos como uno de los escasísimos topónimos alusivos a calzadas conservados al norte del Duero en la cartografía moderna (MTN 25) se sitúa en el mapa muy próximo a la traza que proponemos.

TOPONIMO "LAS CALZADAS" EN LA HOJA 369-C2 DEL MTN 1/25.000 (I.G.N.)

Respecto a la integración del trazado con los yacimientos romanos del entorno, como puede apreciarse en el siguiente mapa, en el corredor propuesto entre Villarrín y Molacillos, se desgrana un auténtico rosario de enclaves de la época: "La Muela", "El Tesorico", "Casas Viejas", "Charco del Buey", "Pajarinos", "Valdelasierna", "Las Torrecillas", "Las Vegas", etc.

YACIMIENTOS ROMANOS EN EL CORREDOR DE LA VÍA ENTRE "EL PRIORATO" Y EL PUENTE "CORRANOS".

La vía cuenta con dos emplazamientos próximos en la orilla oriental del Esla, "El Castillete" y "El Tesoro", y uno colindante en su orilla oriental, "El Priorato", hecho al que damos una especial importancia, pues hemos constatado que la presencia de establecimientos en ambas orillas de los pasos de los ríos es un patrón que se repite insistentemente en época romana.
Existe constancia de la existencia de un puente medieval sobre el Esla entre los enclaves citados al menos desde 1140, el Puente de Deustamben que, posiblemente, fuera reconstrucción de un puente romano anterior (en la iglesia de Milles y otros pueblos aledaños se conservan sillares de arenisca procedentes de este puente). El puente fue estudiado en profundidad por D. Rafael González Rodríguez, que publicó un extenso y muy interesante artículo sobre el mismo en 1996 en la revista BRIGECIO. Se sabe que el puente tuvo un hospital anejo, citado en la documentación medieval, lo que induce a considerar que la vía que describimos fue camino de peregrinación en algún momento de su historia.
En las planimetrías a escala 1/25.000 elaboradas para la formación de la 1ª edición del Mapa Topográfico Nacional a escala 1/50.000 del Instituto Geográfico y Estadístico (IGE) la calzada se identifica, de norte a sur, con los siguientes caminos modernos:
  • "Camino de Villaveza del Agua a Villarín de Campos".
  • "Camino de Las Carretas".
  • "Camino de Benavente o de Las Carretas".
  • "Camino de Arquillinos".
  • "Camino de Arquillinos a Villalba".
  • "Camino de Villalba de la Lampreana".
  • "Camino de Cerecinos del Carrizal".
  • "Camino de Arquillinos a Zamora"
  • "Camino de Torres a Cerecinos del Carrizal".
  • "Camino de Torres a Molacillos".
  • "Camino de Molacillos a Coreses".
  • "Camino de San Pelayo". 
Como demostraremos seguidamente, la medición de la longitud de la vía cuadra con bastante precisión con la que se deduce de la inscripción del miliario. En efecto, si sumamos las distancias existentes entre las mansiones que se suceden entre AVGVSTA EMERITA y OCELO DVRI, obtenemos un total de 225 millas.
 
TRAMO
DISTANCIA
CÓDICES
(MP)
DISTANCIA
CÓDICES
(m)
EMERITA AVGVSTA - AD SORORES
26
38.480
AD SORORES - CASTRIS CAECILI
20
29.600
CASTRIS CAECILI - TVRMVLOS
20
29.600
TVRMVLOS - RVSTICIANA
22
32.560
RVSTICIANA - CAPARA
22
32.560
CAPARA - CALIONICCO
22
32.560
CALIONICCO - AD LIPPOS
12
17.760
AD LIPPOS - SENTICE
15
22.200
SENTICE - SALMANTICE
24
35.520
SALMANTICE - SIBARIAM
21
31.080
SIBARIAM - OCELO DVRI
21
31.080
SUMA
225
333.000

 Si restamos tal cifra de las 259 millas que indica el miliario obtenemos un total de 34 millas, o lo que es lo mismo, 50,320 Km.

Pues bien, la medición del trazado entre el lugar de aparición del miliario y la mansio de OCELO DVRI realizada con el SIG arroja un total de 51,77 Km, es decir, 34,9 millas.
Llegados a este punto tenemos que advertir que recientemente hemos caído en la cuenta de que una de las mansios de OCELO DVRI  tuvo que estar situada al norte del Duero, en el paraje de "San Pelayo".

"San Pelayo" es un antiguo despoblado situado enfrente del gran yacimiento romano "El Alba", actualmente transformado en cortijo, en el que, hasta la llegada de las concentraciones parcelarias, confluyeron todos los caminos del contorno. En la finca, que no figura como enclave romano en el Inventario Arqueológico, se puede observar una extraordinaria concentración de arenisca labrada, incluyendo lo que podrían ser los restos de algún miliario.

POSIBLE RESTO DE MILIARIO EN SAN PELAYO.

En nuestros recorridos de campo hemos podido encontrar también pruebas de la utilización de cantos rodados como cimentación a lo largo de la ruta, y constatamos la presencia de vestigios de obras de fábrica de muy posible factura romana, como es el caso de algunos vetustos sillares de arenisca que se observan en la fábrica actual de los actuales puentes "Corranos", sobre el Salado, y "Del Arzobispo", sobre el Valderaduey. Ambos puentes son de construcción relativamente modernas pero nosotros pensamos que reaprovechan sillares de obras anteriores, muchos de los cuales habrían sido llevados a su ubicación actual en época romana, ya que habrían sido extraídos de las cercanas canteras del "Teso de la Mora" cuando estas fueron explotadas hace, aproximadamente, 2000 años.

GRANDES CANTOS RODADOS PROCEDENTES DEL ALUVIAL DEL SALADO, EXTRAÍDOS DE LA BASE DE LA ACTUAL CARRETERA LOCA ENTRE TORRES DEL CARRIZAL Y VILLALBA DE LA LAMPREANA, CON MOTIVO DE LA CONSTRUCCIÓN DE UN MODERNO DESAGÜE .LA CARRETERA CITADA SIGUE, EN GRAN MEDIDA, EL TRAZADO DE LA VIEJA ROMANA, SEGÚN EL AUTOR. 

Queremos aprovechar la ocasión para desmitificar la pretendida "durabilidad eterna" de las obras romanas. Los puentes, en concreto, son infraestructuras expuestas a fuerzas de la naturaleza muy difíciles de afrontar con éxito de forma indefinida, como es el caso de las riadas, aún con el auxilio de las modernas tecnologías de construcción. Esto es más evidente todavía en el caso de ríos afectados por gran estacionalidad, como sucede con los ríos Salado o Valderaduey.

Con ello queremos decir que, generalmente, la mayoría de los puentes zamoranos han sido reconstruidos, sin cambiar su primitiva ubicación, una y otra vez, a lo largo de los siglos, como atestigua la documentación alusiva de todas las épocas. Por ello, muchos puentes de la geografía zamorana (y de otras provincias), que fueron inicialmente emplazados y construidos durante época romana, no disponen hoy en día de una factura atribuible a los romanos, aunque sí puedan ser plenamente romanos, según nuestro modesto entender, los materiales que los conforman y las rutas que comunican.

En el caso de la provincia de Zamora, es curioso constatar como la afirmación anterior no se cumple en el caso de sus dos ciudades más importantes, Zamora y Benavente, cuyos puentes no se remontan más allá de la Edad Media, al no haber tenido apenas ningún protagonismo el entorno en el que se ubican durante la Edad Antigua.

Habrá quien pueda pensar, leyendo este artículo, que la calzada que se refiere es una parte de la fantasmagórica "Vía de la Plata" zamorana. Nada más lejos de mi intención, pues reitero mi oposición a creer en la existencia de tal vía, en los términos que la leyenda la imagina. Llamo la atención sobre el hecho de que ni esta calzada, ni su natural prolongación hacia AVGVSTA EMERITA, siguiendo parte del trazado de la ruta 17 del Itinerario, pasa por VICO AQVARIO, ni por BRIGECIO, ni por BEDVNIA. Por otra parte, y como ya expusimos en detalle en este anterior artículo, según nuestro punto de vista esta vía se construyó para facilitar el avituallamiento desde la VLTERIOR de las legiones que conquistaron el territorio Astur. Por tanto la fundación de ASTVRICA AVGVSTA tuvo que ser posterior a la construcción de la mayor parte de las calzadas que conforman la ruta que enlaza tal civitas con Mérida.

Dudo mucho que el trazado entre OCELO DVRI y el punto donde estuvo enclavado el miliario de "El Priorato" siga un corredor natural entre Tartessos y el Noroeste Hispano; como escribí anteriormente en una adaptación revisada de mi artículo sobre el BELLVM ASTVRICVM publicado en la revista ARGUTORIO, creo firmemente que la "Tierra de Campos" fue un obstáculo natural formidable para el tráfico rodado hasta la llegada de los romanos, que con su increíble tecnología y organización para aquellos tiempos consiguieron superarlo (aunque su progresión hacia el Noroeste fuera frenada por la geología durante un inusitadamente largo intervalo de tiempo).

BELLVM ASTVRICVM. RUTAS DE APROVISIONAMIENTO Y DE INVASION.

Como he dicho anteriormente, la vía que se trata debió de ser en algún momento, con bastante seguridad, camino de peregrinación a Santiago de Compostela (existen otros indicios que de momento nos reservamos que avalan tal posibilidad), pero no creemos que fuera la ruta de peregrinación más frecuentada a lo largo de los siglos. En cualquier caso, y en contra de lo que mantiene la leyenda de la "Vía de la Plata", según parecen apuntar claramente los resultados de nuestras investigaciones viarias Zamora fue atravesada por varias rutas de peregrinación hacia Santiago de Compostela, que se fueron sucediendo en el tiempo (y a veces coexistieron) en función de diversos avatares históricos.

Finalmente, queremos constatar que el miliario de Milles de la Polvorosa estaría ubicado en la vía romana más directa entre Astorga y Mérida. En concreto, la ruta por Milles sería unas 4 millas más corta que el recorrido siguiendo las rutas 24 y 26 del Itinerario de Antonino.

Por José Luis Vicente González
Milles de la Polvorosa, 4 de marzo de 2012.

La calzada del Miliario de "El Priorato" (Milles de la Polvorosa, Zamora) I: Sobre el miliario y las conclusiones hasta ahora deducidas de su inscripción


RÉPLICA DEL MILIARIO, EN SU UBICACIÓN EN LA PLAZA MAYOR DE MILLES DE LA POLVOROSA (ZAMORA).

En 1985 se descubrió en el término del pueblo donde resido un miliario dedicado a Nerón. Las circunstancias del hallazgo fueron detalladas por D. Vidal Aguado Seisdedos en las Actas del I Congreso Internacional de Astorga Romana. Por su parte, el Dr. Abásolo Álvarez publicó en 1990 la lectura más universalmente aceptada de la inscripción del monumento, que se recoge en el Tomo II de las Actas del Primer Congreso de Historia de Zamora.

A título anecdótico, y para dejar público testimonio de las despectivas maneras con las que suelen emplearse las administraciones con los habitantes del medio rural, cabe señalar que el miliario sufrió deterioros durante su precipitado y chapucero traslado al Museo de Zamora a lomos de un camión, traslado realizado, por expresarlo de una forma poética, "con nocturnidad y alevosía" (aquí, una referencia a lo dicho en la Tesis Doctoral de Dña. Carmen Puerta Torres "Los miliarios de la Via de la Plata"). La operación se perpetró procurando evitar que los habitantes de Milles de la Polvorosa, localidad donde se realizó el hallazgo, supieran lo que pasaba y, por supuesto, sin compensar en modo alguno al ayuntamiento por el expolio de su patrimonio cultural en aras de su mejor protección y puesta en valor (motivaciones, sin duda, dignas de consideración a la hora de sopesar adecuadamente el destino final de la pieza).

En enero de 2008, el ayuntamiento, respondiendo a una iniciativa del vecindario, costeó la elaboración y colocación de una reproducción del miliario que, muy probablemente, contribuyó a dar nombre al pueblo hace más de 1000 años, en la Plaza Mayor de la localidad, donde hoy puede contemplarse. La actuación se cofinanció por medio de una subvención concedida por el G.A.L. MACOVALL 2000 en el marco del programa de desarrollo rural PRODERCAL. En este enlace se puede tener acceso a una colección de fotografías que reflejan el proceso de manufactura y emplazamiento de la réplica, íntegramente realizado por la población local. A diferencia de la ligereza, impunidad y falta de profesionalidad con que actúo la administración regional cuando se realizó el traslado a Zamora del miliario original, procede matizar que la reproducción se realizó con respeto escrupuloso al procedimiento establecido por la normativa vigente para este tipo de actuaciones (artículo 32 y siguientes del DECRETO 13/1997, de 30 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de desarrollo parcial de la Ley de Museos de Castilla y León).

La inscripción del miliario incluye en su línea final la cifra en números romanos CCLIX (259), lo que se interpretó desde un principio como una indicación de la distancia a la caput viae de la vía que señalizaba el cipo. El punto de inicio de la vía se localizó, de forma unánime, en AVGVSTA EMERITA, civitas que, efectivamente, no es difícil comprobar sobre el mapa se encuentra a tal distancia en línea recta, más o menos, del punto donde estuvo enterrado el miliario durante poco menos de 2000 años.

La Dra. Puerta Torres incluía en la página 120 de su completísima y muy interesante tesis doctoral el siguiente razonamiento, relativo al miliario que nos ocupa: "Este último ejemplar -nº 188-, situado a una distancia intermedia entre las mansiones de Vico Aquario y Brigecum, es de suma importancia. En primer lugar, junto al nº 189, de Augusto, es uno de los dos únicos documentados y con texto al norte de Salmantica y, al conservar el numeral, proporciona la única prueba indiscutible de que la vía se midió y señalizó de manera unitaria en su totalidad desde Emerita hasta Asturica - el subrayado es nuestro -".

El razonamiento anterior es, pese a lo que pudiera parecer a primera vista, bastante inconsistente, y está viciado por la consideración de que la mítica y nunca encontrada "Vía de la Plata" zamorana fue la única calzada romana digna de tal apelativo presente en la provincia de Zamora al oriente del Esla.

Tal visión de la red viaria de Hispania durante la Edad Antigua es muy pobre, y no responde en absoluto a la realidad que nos encontramos en el campo en el curso de nuestras investigaciones, ni a lo que nos trasladan al respecto las fuentes clásicas (ver la magnífica monografía "Régimen jurídico de las vías públicas en Derecho Romano", publicada por la Dra. Ponte y Arrebola en 2007), la arqueología (inscripción del "Bronce de Fuentes de Ropel") o las numerosas referencias a calzadas, carrales, karrarias, stratas, vias y otras denominaciones afines conservadas en la documentación medieval o en la toponimia de ciertas extensas áreas, como sucede con gran parte de la provincia de Salamanca.

Por poner un ejemplo gráfico, usando una argumentación similar un arqueólogo del futuro podría deducir erróneamente que León estaba situado en el trazado de la actual Autovía Rías Bajas o A-52 (Madrid - Orense), basándose en la existencia en la A-66 o Autovía de la Plata (autovía que sí pasa por León, al contrario de la A-52) de carteles informativos que hacen referencia a la distancia a Madrid.

Respecto a la alusión al miliario de Augusto, la propia autora afirma en la página 519 de su tesis: "No hay datos tampoco que confirmen su pertenencia a la vía de la Plata - el subrayado es nuestro -. En este caso tenemos documentadas además no pocas vías que parten de Asturica o que llegan a ella, y al faltar el numeral miliario no se puede determinar siquiera en qué sentido se cuenta la vía a la que pertenece. No obstante, es posible que si pertenezca a la vía y debe dejarse abierta la posibilidad."

  
MILIARIO ORIGINAL EN EL MUSEO DE ZAMORA.

Si consideramos que, efectivamente, el Itinerario de Antonino hace pasar por ASTVRICA AVGVSTA nada menos que 8 recorridos diferentes (rutas I, XXVII, XXVIII, XIX, XX, XXVI, XXVII, XXXII y XXXIV, según numeración de Saavedra) no es difícil evaluar cuan aventurado es asignar el miliario encontrado en Astorga a un supuesto tramo leonés de la "Vía de la Plata".


TOPÓNIMOS "CALZADA" EN LA ACTUAL CARTOGRAFÍA 1/25.000 DE LA PROVINCIA DE SALAMANCA Y ÁREAS LIMÍTROFES. FUENTE: INSTITUTO GEOGRÁFICO NACIONAL (IGN).

La argumentación que hemos puesto de relieve ha sido utilizada, en términos parecidos, por otros investigadores, con el objetivo de dar validez a la hipótesis de la existencia del supuesto tramo fantasma de la "Vía de la Plata" al norte del río Duero, en el pertinaz afán por justificar la existencia de una calzada con entidad propia dentro del entramado viario romano de Hispania construida con el objetivo preciso de enlazar Mérida y Astorga.

Así, el Dr. Roldán Hervás argumenta lo siguiente en su artículo "El Camino de la Plata: iter o negotium", cuya copia en pdf "colgamos" en nuestro anterior "post": "El inapreciable testimonio de los miliarios, sorprendentemente abundantes en número con respecto a otras vías de Hispania y el Imperio, constituyen, a partir de Augusto, la principal o casi única fuente de información para conocer la evolución de la calzada. Los dos miliarios de Augusto, que corresponden a la cabeza de la vía y a su término, en Mérida y Astorga, respectivamente, testimonian la unidad de su trazado - el subrayado es nuestro -. Aunque ya desde Tiberio, los miliarios hablan de intervenciones puntuales en los años 25, 45 y 50, es bajo Nerón cuando tiene lugar la primera intervención global sobre la vía desde Augusto. Se realizó entre los años 57 y 59 y debió tener una gran relevancia, puesto que se documenta a través de un número relativamente alto de piezas miliarias. Pero, de ellas, adquiere especial importancia la que, con el numeral CCLIX, se halló prácticamente in situ en Milles de la Polvorosa, junto al Esla, puesto que es hasta hoy el primer y único testimonio miliario fehaciente del carácter unitario de la vía hasta Asturica, ya que las millas indicadas corresponden exactamente a las que distan de la cabeza de ruta Emerita44  a Asturica - el subrayado es nuestro -."

El investigador citado refuerza su particular opinión sobre el asunto con la siguiente suposición: "La primera fuente antigua que nos da toda su extensión, de Mérida a Astorga, si dejamos de lado el peculiar y, a mi parecer, decididamente falso, Itinerario de Barro34, es el Anónimo de Rávena, bastante posterior al Itinerario y no, como éste, una red de rutas conindicación de paradas intermedias, sino una simple enumeración de ciudades, que, sin embargo, están indicadas siguiendo rutas fijas y no de acuerdo con divisiones impuestas por la geografía física o política. Si pensamos que el Anónimo toma sus datos del mapa mundi de Castorius, el mapa antiguo más preciso de vías romanas que se conserva, la mención prueba que el camino era considerado como una unidad en esta extensión, de Mérida a Astorga, por lo menos en el siglo IV - el subrayado es nuestro -."
El razonamiento anterior no deja de ser marcadamente subjetivo, ya que la supuesta carga probatoria se remite a la posible relación del Anónimo de Rávena con otra fuente anterior desaparecida y, por tanto, no contrastable.

El propio autor, en su artículo Itineraria Hispana (1975), expone lo siguiente, a propósito del Anónimo: "Su fuente de inspiración, y por ello lo incluimos aquí en este trabajo sobre fuentes itinerarias a pesar de que su obra en sí no corresponde a esta designación, es un mapa de rutas, - el subrayado es nuestro -  como él mismo indica en 1 18: potuissemus ... subtilius dicere totius mundi portus et promuntoria atque inter ipsas urbes miliaria, vel quomodo cunctae patriae aut qualiter ponuntur mirifice defingendo designare".

Queremos enfatizar que, en cualquier caso, en todo momento se está asimilando el Anónimo a una colección de rutas o recorridos, y no de calzadas o carreteras, diferencia que conviene resaltar, ya que, como se aclara el propio Roldán Hervás en la página 25 del artículo al que pertenece la cita anterior:  "Hay que distinguir en la utilización de los términos «ruta» y «calzada». Mientras ruta designa en forma práctica el camino que hay que recorrer entre un punto de partida y otro de llegada, independientemente de la homogeneidad del camino, de su señalización, pavimentación y de las provincias por donde discurría, llamamos calzada a un determinado camino romano que en su realización ha sido concebido como una unidad y que, por lo tanto, cuenta con un pavimento uniforme y señalización correlativa - el subrayado es nuestro -. Así el camino de Roma a Constantinopla es una ruta en la que se empalman diferentes calzadas de distinta factura; el de Mérida a Salamanca, por el contrario, una calzada, señalizada a partir de Mérida con el miliario 1 y de trazado homogéneo".

Con todo lo hasta ahora argumentado hemos querido demostrar que, en contra de lo sostenido actualmente por un buen número de investigadores, algunos de ellos con amplia trayectoria y un bien ganado prestigio en la investigación de la red viaria romana, el miliario descubierto en "El Priorato" no señalizó jamás una supuesta "Vía de la Plata" entre Mérida y Astorga, que teóricamente discurría por un trazado jalonado por las mansiones que las rutas 24 y 26 del Itinerario de Antonino enumeran entre sus respectivas cabeceras y la mansio de OCELO DVRI.
Ahora bien si el miliario no pertenecía a dicha supuesta vía ¿cuál era realmente la calzada para la que se labró?...

En la segunda parte de este artículo desvelaremos dicho enigma, según nuestras teorías al respecto, teorías que cuentan con abundantes apoyos arqueológicos todavía bien visibles sobre el terreno.
Milles de la Polvorosa, 3 de marzo de 2012. 

Por José Luis Vicente González

En busca del misterio de los númidas

Arqueólogos catalanes desentierran en las ruinas de Althiburos, en Túnez, el pasado de los jinetes más famosos de la antigüedad


..................Representación de uno de los temibles jinetes númidas

“Eorum in equitatu maxima laus fuit”. Su mayor gloria fue la caballería. La palabra númidas conjura la vertiginosa imagen de la caballería ligera más famosa y decisiva de la antigüedad. Los jinetes que ayudaron a Aníbal a convertirse en leyenda, que luego colaboraron resolutivamente a su derrota en Zama y que más tarde cabalgaron junto a César en sus campañas en la Galia. Convertida en indispensable fuerza auxiliar de las legiones, la caballería númida era tan emblemática como los honderos baleares, los arqueros cretenses o los nadadores bátavos. Tito Livio, admirado de su virtuosismo ecuestre los comparó con los desultores del circo, los acróbatas caballistas, por tener la misma capacidad de saltar de un caballo a otro, incluso en pleno combate. ¿Pero quiénes eran esos númidas ágiles y veloces que han dejado un rastro de sobresaltado respeto en el mundo antiguo?
Originarios de Numidia (abundante en feroces leones, decía Plinio), un reino que comprendía partes de Argelia, Túnez y Marruecos, entraron en contacto con los cartagineses, que los usaron como mercenarios (Serge Lancel ha dicho que fueron para Cartago lo mismo que los cosacos para el imperio ruso), y luego con los romanos. Divididos en tribus y facciones, a menudo enfrentadas, los númidas apoyaron a Cartago o a Roma y guerrearon contra una y otra en las Guerras Púnicas. Entre sus caudillos figuran grandes personajes de la antigüedad como Sifax, aliado de Cartago y casado con la desgraciada Sophonisba, entregada por su padre Asdrúbal Gisco; Naravas, inmortalizado por Flaubert en Salambó; Masinisa, amigo de Escipión el Africano, y Jugurta, que tuvo en jaque a la república romana con sus guerras y sobornos.


....................................Excavaciones en Túnez. / UB

Las fuentes clásicas nos dan información escasa y confusa sobre el pueblo númida, más allá de su relación con Roma, y la historiografía y la arqueología no los ha tenido muy en cuenta. Así que en realidad son unos grandes desconocidos y si historia está llena de enigmas. A resolverlos en lo posible se dedican ahora sobre el terreno un grupo de arqueólogos de la Universidad de Barcelona (UB) encabezados por Joan Sanmartí que excavan desde 2006 en el yacimiento númido-romano de Althiburos (actual el Medeina), en el noroeste de Túnez, en la provincia de el Kef, a 215 kilómetros de la capital del país y a menos de 50 de la frontera argelina.
Las excavaciones, un proyecto catalano-tunecino en el que colabora el Institut Català d’Arqueologia Clàssica (ICAC), trata de sacar a los númidas de la oscuridad de la historia y de momento ya ha conseguido hacer retroceder su pasado la friolera de medio milenio, hasta al menos el siglo IX antes de Cristo. Alguno puede pensar que la cronología númida no es algo para quitarnos el sueño y menos con la que está cayendo, pero descubrir que hubo una gente en el Magreb que ya se había sedentarizado y construía núcleos urbanos antes del contacto con cartagineses y romanos es un puntazo para nuestra arqueología.
“La idea de excavar allí nació al observar el vacío de conocimientos que tenemos del mundo africano pre romano”, explica Sanmartí en su abigarrado despacho de la UB en el que destaca una vieja reconstrucción de la Acrópolis y la más bien incoherente foto de un grupo de guerreros apaches, entre ellos Jerónimo. “Existe un gran desequilibrio en comparación con lo que sabemos de la historia de la otra orilla del Mediterráneo, situación que tiene que ver con los planteamientos colonialistas con los que se ha trabajado en el Magreb, una arqueología de legitimación de la ocupación occidental que exaltaba y ponía en valor el pasado romano ignorando e incluso ocultando las muestras de civilización autóctona”. En Althiburos, como en la mayor parte del norte de África, esas huellas están bajo las ciudades romanas, si exceptuamos las grandes tumbas reales númidas.
Otra razón que ha llevado a Sanmartí y su equipo a excavar es el interés por estudiar el proceso de formación de los Estados antiguos. La misión de la UB ha aprovechado las buenas relaciones catalanas con Túnez y la receptividad tunecina ante el proyecto, aunque luego se han encontrado con la Primavera Árabe y la revolución que derrocó al presidente Ben Alí, lo que les costó no poder excavar el año pasado. Regresan el próximo día 30.
“De los númidas sabíamos que en la Segunda Guerra Púnica, en el siglo III antes de Cristo ya eran importantes, así que en el siglo IV cuando menos ya debía existir un Estado númida. La Numidia de las fuentes clásicas, como Salustio, es un mundo de grandes monarcas sometido a tensiones y turbulencias sucesorias, que Roma aprovecha y a menudo instiga. ¿Pero qué había antes?”. Le pregunto al estudioso antes de seguir cómo hemos de imaginarnos físicamente a los númidas. “Eran bereberes, paleo bereberes si quieres, hay una continuidad muy clara con ellos, de idioma, de escritura, el amazigh. Su estructura política era de base tribal, no tenían una idea de estado nacional moderno; una serie de grandes señores elegirían a un primus inter pares como rey. Las fidelidades eran variables y fáciles de comprar. Esa propensión a cambiar de bando que observamos en los númidas también se da en los iberos”.
Allthiburos está en un altiplano a casi 800 metros, un lugar muy bonito en el que destacan las ruinas de la ciudad romana, foro, capitolio, teatro. “Excavamos a lado y lado del capitolio, donde podemos; hemos encontrado los niveles antiguos númidas. No hay elementos visualmente espectaculares pero hemos hallado la pared de piedra más antigua de África, descontando las estructuras prehistóricas. Del siglo IX o X a. de C. No conocíamos ni una sola pared númida anterior al siglo III a. de C. Como ves resulta un salto temporal extraordinario”. Sanmartí subraya que se aprecia en la estratigrafía una evolución fluida y una continuidad cultural. “Es el primer paso para hacer una documentación científica de este mundo. Cierto, el interés monumental es muy pequeño, pero hemos llevado a los númidas 500 años atrás en la historia, hasta el siglo X a. de C, medio milenio antes de lo que nos mencionaban las fuentes escritas. Ahora sabemos que eran sedentarios en ese momento tan remoto, cultivaban viña, y luego olivo; no eran nómadas, se habían asentado. Y lo habían hecho puramente por desarrollo propio y no por influencia de Cartago. Había empezado el camino hacia estructuras estatales”.
Le pregunto a Sanmartí que habría pasado de no mediar los cartagineses y romanos. “Es una ucronía, ¿habrían desarrollado conceptos de ciudadanía como los del mundo griego y luego romano? No parece, su base era muy tribal, no creo que hubiesen dado lugar a una gran civilización de referencia”. En todo caso, recalca, para un país como Túnez es muy importante descubrir la dimensión histórica de su pasado, aunque también es cierto, matiza, que se recela en algunas instancias de los orígenes identitarios amazigh, bereber. Se ve a los númidas como paganos remotos, preislámicos. Más sospechosos que los cartagineses, al fin y al cabo de lengua semita.
Dese el punto de vista humano, Sanmartí está encantado con la experiencia. “La gente en el mundo rural tunecino es muy hospitalaria y amable; conservan identidades tribales”. No considera que los cambios en Túnez hayan traído un clima malo, y es optimista sobre el futuro del país. Los trabajos de la UB, de los que se acaba de publicar un impresionante primer volumen de memoria científica, no acaban en Althiburos: realizan prospección en todo el valle, estudian monumentos megalíticos, quieren excavar un gran túmulo. .. Los viejos jinetes, pues, seguirán revelando sus secretos.

Fuente: http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/03/18/catalunya/1332096044_962043.html

Alerta roja para proteger el patrimonio egipcio del contrabando


Estatua de Kaemheset con su esposa e hijo. Dinastía 6 (2323 - 2200 a.C), | Museo del Cairo/A.Amin.

Cuentan que Isis emprendió una azarosa búsqueda de su esposo y hermano Osiris cuando el dios de la resurrección murió, sumergido y ahogado en un sarcófago regalado por su enemigo y también hermano, el tenebroso Set. El heroico viaje de una viuda inconsolable en busca de los restos de la divinidad resuena en la aventura de la recién publicada Lista Roja de objetos del patrimonio egipcio en peligro de sucumbir a manos de ladrones astutos, marchantes desalmados y autoridades negligentes.
En sus 11 páginas, el catálogo publicado por el Consejo Internacional de Museos (ICOM, por sus siglas en inglés) exhibe las piezas que con mayor frecuencia están en el punto de mira de los modernos seguidores de Set, como solía denominarles el mediático arqueólogo Zahi Hawas durante sus años al frente del Consejo Supremo de Antigüedades egipcio. Su sucesor, Mustafa Amin, explica a ELMUNDO.es que el documento no contiene las piezas expoliadas sino "ejemplos de objetos similares que pueden circular por los aeropuertos del planeta".
Como la tarea de Isis -que debió reconstruir el cuerpo de su esposo despedazado y esparcido por todo el país-, el patrimonio de la tierra de los faraones afronta su propia hazaña: Reunir los fragmentos expoliados al calor de la revolución de principios de 2011 y reactivar la campaña internacional inaugurada hace una década que permitió recuperar más de 5.000 objetos robados.

El legado de siete milenios, en peligro

El inventario –similar al empleado en Irak, Afganistán, Perú o Haití- transita la fértil historia egipcia. Las épocas predinástica, faraónica y nubia (5.200-332 a.C.), grecorromana (332 a.c. – 395 d.C.), copta (Siglo IV-VII d.C) e islámica (640 – 1805 d.C.) se suceden con una concisa presentación de sus tesoros.
En sus páginas –destinadas a profesionales del arte y la policía-, hay espacio para pequeñas estatuas de divinidades en bronce, cuarzo, granito o cerámica; momias humanas y animales envueltas en vendas, en papel maché decorado y ataúdes de madera o estelas pintadas con la vida diaria y el boato de ceremonias reales.


En el apartado dedicado al período de conquistadores griegos y romanos, los expertos destacan las vasijas de cerámica, loza o calcita, las monedas de bronce, plata y oro acuñadas con la efigie de emperadores o dioses y las mascaras funerarias. Un legado que hereda la era cristiana copta y talla en relieves con motivos florales, cruces o figuras humanas y perfecciona en cuadros que relatan escenas bíblicas o estampas de santos. La lista también menciona manuscritos en árabe o copto, una lengua casi extinguida que fue clave para descifrar los jeroglíficos y reducida hoy a la liturgia cristiana.
Con su cerámica de motivos geométricos, sus joyas a base de piedras preciosas y su caligrafía tallada en espadas y jarrones, la época islámica cierra el itinerario a través de un patrimonio amenazado por el mercado negro, las excavaciones clandestinas, el robo de almacenes y museos públicos y la existencia de antigüedades que aún no han sido inventariadas. "Esta lista roja de urgencia ayudará a todos aquellos que, dentro y fuera de Egipto, están involucrados en la protección del patrimonio cultural egipcio, aumentando la prevención y reduciendo el tráfico ilícito y la exportación de bienes culturales", sostiene Julien Anfruns, director general del ICOM.

Lucha para recuperar el patrimonio

En el relato mitológico, Isis logra reanimar a su esposo para concebir a Horus, su heredero. En el mundo de los mortales, las autoridades egipcias –que administran una complicada transición- tratan de hallar las varias miles de piezas que desaparecieron durante las hogueras revolucionarias. "Se han encontrado hasta 700 objetos en un almacén propiedad de un comerciante turco en una ciudad cercana a El Cairo", ilustra Amin, tranquilo con la tecnología que protege los espacios museísticos del país. "El expolio se produjo en ataques puntuales", precisa.
Uno de los éxitos recientes del Gobierno egipcio ha sido conseguir la devolución de ocho piezas faraónicas que la policía de Barcelona requisó en septiembre de 2010 en varios anticuarios de la ciudad. El material, de piedra caliza, procede de la tumba de Eimb Hur, uno de los funcionarios más notables de la VI dinastía, en Saqara, la gran necrópolis de la antigua capital de Egipto, Menfis. Según Amin, el regreso de las antigüedades –sustraídas ilegalmente en 1999- será realidad muy pronto. "Acudiré personalmente y haremos una ceremonia de entrega en Barcelona".

Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2012/03/18/ciencia/1332071908.html

La estrategia del roedor que logró sobrevivir a la era de los dinosaurios

  • Los multituberculados sobrevivieron a la extinción de hace 66 millones de años
  • La evolución de su dentadura y el aumento de su tamaño les ayudó a lograrlo
  • Finalmente, estos mamíferos se extinguieron hace 34 millones de años



.........Recreación de un multituberculado y un dinosaurio. | J. Swales

Como tantas otras especies animales, terminaron por desaparecer aunque sus estrategias evolutivas les permitieron sobrevivir a la gran extinción que acabó con los dinosaurios hace 66 millones de años. Los multituberculados, un orden de mamíferos emparentado con los roedores, desarrolló una serie de características que hizo posible que vivieran 32 millones de años más que los dinosaurios.
Un estudio publicado esta semana en la revista 'Nature' sugiere que estos pequeños animales lograron adaptarse al nuevo entorno gracias a los cambios que se produjeron en su dentadura y en el tamaño de su cuerpo.
Los investigadores de la Universidad de Washington que firman este estudio creen que estos mamíferos lograron sobrevivir, en parte, porque desarrollaron numerosas protuberancias o bultos en los dientes posteriores.
La evolución de los dientes les permitió ampliar su dieta y alimentarse de una mayor variedad de plantas. En concreto, podían comer angiospermas (plantas con flores), que eran muy abundantes en aquella época.
Los animales carnívoros, señalan los autores, tienen una dentadura relativamente simple. La comida se descompone con facilidad, por lo que no necesitan una dentadura muy sofisticada. Sin embargo, la de los herbívoros es más compleja para permitirles triturar las plantas de las que se alimentan.

Aumentaron su tamaño

Para llevar a cabo este estudio, los investigadores examinaron fósiles de dientes de 41 especies de multituberculados procedentes de colecciones de todo el mundo. Utilizaron un láser y un escáner (tomografía computarizada, TC) para obtener imágenes en tres dimensiones a muy alta resolución. Combinando estas imágenes con un software de información geográfica sobre los lugares en los que habían vivido, pudieron analizar la forma de los dientes. Las dentaduras más complejas, señalan, presentaban muchos bultos.


...............................Evolución de la dentadura. | G. Wilson

La ilustración de muestra cómo su dentadura evolucionó de forma paulatina, de un diseño muy simple (imagen superior) hacia otras más complejas. La dentadura situada abajo (d) corresponde al de un multituberculado que vivió hace unos 66 millones de años, cuando se extinguieron los dinosaurios.
Los paleontólogos explican que hace 170 millones de años, los multituberculados tenían el tamaño de un ratón. Las plantas angiospermas comenzaron a aparecer hace 140 millones de años. A partir de entonces el cuerpo de estos mamíferos fue creciendo paulatinamente, hasta alcanzar el tamaño de un castor.
Cuando los dinosaurios se extinguieron, hace 66 millones de años, los multituberculados siguieron expandiéndose, logrando estar presentes en buena parte del Hemisferio Norte. Sin embargo, paulatinamente, otros mamíferos, sobre todo primates, roedores y ungulados (mamíferos placentarios) también fueron consiguiendo ventajas evolutivas y convirtiéndose en competencia para los multituberculados, pues competían por la misma comida. Finalmente, estos pequeños roedores acabaron por extinguirse hace unos 34 millones de años, según calculan los paleontólogos.

Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2012/03/18/ciencia/1332094407.html