"LA SEÑORA" DISPUESTA A DISERTAR SOBRE LA FUNDACIÓN DE "EMERITA"


La afamada epigrafista de CANTOBLANCO Doña Alicia Canto de Gregorio, "la señora" se dispone a presentar una interesante conferencia donde pretende dejar bien claro quién fundó "Emerita" y desde REHA nos hacemos eco más allá de su corral de la pacheca en Terraeantiqvae y para dejar bien claro que somos gente de cultura y alejados de su sempiterno sectarismo.
No sabemos verdaderamente si fue Julio o Augusto el fundador de "Emerita" y como no lo sabemos ella esta dispuesta a contarnoslo y pobre de aquel que ose contradecirla.
Enfin acudan Vds si disponen de tiempo a contemplar las evoluciones dialécticas de la "señora" que a buen seguro no les dejarán indiferentes.

Vídeo-Conferencia + Comentarios + Bibliografías + Hemeroteca)
COLONIA IULIA AUGUSTA EMERITA:
SU POSIBLE FUNDACIÓN CESARIANA,
30 AÑOS DESPUÉS”. 
Alicia María Canto de Gregorio. Universidad Autónoma de Madrid.
IX Mesa Redonda Internacional de Lusitania.
Lusitania romana: del pasado al presente de la investigación.
Madrid, 29 y 30 de Septiembre de 2016.

Como los estudios de A. Canto siguen siendo en gran parte ignorados o no lo suficientemente reconocidos por el mundo académico (además de ser desconocidos por la Sociedad en general), y ante lo interesante de su hipótesis, he creído oportuno difundir este tema en el “Grupo Defensa Vía de la Plata y ser Patrimonio de la Humanidad” (en Facebook) como un capítulo más para comprender los orígenes de este Patrimonio Caminero. 

Descubren nuevos tramos de galerías romanas subterráneas de Carmona

Se trata de un tramo de unos 80 metros de longitud en la zona de Los Villa. Los arqueólogos presuponían ya la existencia de este ramal de las galerías por la presencia de pozos en la zona.
El Servicio de Arqueología del Ayuntamiento de Carmona (Sevilla) y la Asociación Andaluza de Exploraciones Subterráneas han descubierto recientemente un nuevo tramo del complejo de galerías romanas situadas en el subsuelo del municipio.

Se trata de un tramo de unos 80 metros de longitud en la zona de Los Villa. Los arqueólogos presuponían ya la existencia de este ramal de las galerías por la presencia de pozos en la zona, pero los mismos estaban taponados e inundados por lo que hasta la fecha había sido imposible su exploración y catalogación.

Para facilitar el acceso a las mismas, el Ayuntamiento ha limpiado y vaciado uno de los pozos principales. Así, gracias a este acceso, se ha descubierto un entramado de galerías de captación de aguas cuyos trazados se presuponen por una serie de pozos alineados, algunos de ellos grandes pozos tipo noria, utilizados antiguamente para el suministro de huertas o de fábricas ya desaparecidas.

Las investigaciones realizadas hasta ahora señalan a esta zona como posible origen de alguna de las minas de agua más importantes exploradas hasta ahora en Carmona, como es el caso de la mina en el Puerto de Brenes.

Las nuevas galerías son tipológicamente similares a las estudiadas hasta ahora en la zona de San Antón por lo que deben de pertenecer un extenso sistema de captación de aguas subterráneas que los romanos desarrollaron bajo Carmona. Las canalizaciones tienen recorridos kilométricos y, según se acaba de comprobar, se puede afirmar con seguridad que formaron parte de una impresionante obra de ingeniería de época romana.

Vía: Sevilla Directo

Investigadores descubren fósiles de ballenas y leones marinos de hace 10 millones de años en Jaén

Restos fósiles de cetáceos y pinnípedos de hace aproximadamente diez millones de años/ Universidad de Jaén

Una investigación liderada por la Universidad de Jaén ha encontrado restos de cetáceos y pinnípedos del Mioceno superior en el sector oriental de la Cuenca del Guadalquivir, entre las localidades jiennenses de Andújar y Villanueva de la Reina.

Investigadores del departamento de Geología de la Universidad de Jaén, liderados por el profesor Matías Reolid, han hallado restos fósiles de cetáceos y pinnípedos de hace aproximadamente diez millones de años. Estos restos pertenecen al Tortoniense (Mioceno superior) y los han descubierto entre las localidades jiennenses de Andújar y Villanueva de la Reina.
Se trata del primer estudio de fósiles marinos en el sector oriental de la Cuenca del Guadalquivir y ha sido publicado por la revista internacional de Ciencias de la Tierra Journal of Iberian Geology.
La investigación surgió en marzo de 2013 con la colaboración del doctor Fernando García, entonces también miembro del Departamento de Geología de la UJA y actualmente en la Universidad de Granada. Inicialmente, el trabajo se realizó en un área próxima al Arroyo Escobar, en un cauce de difícil acceso donde afloraban algunos de los restos fósiles estudiados en condiciones precarias debido a las crecidas. Los restos fueron hallados gracias a la ayuda de un agente de medioambiente que contactó con el Departamento de Geología de la UJA.
La primera medida fue contextualizar dónde se habían encontrado los restos de mamíferos para realizar una reconstrucción paleoambiental de estos depósitos a través del análisis de sedimentos, del estudio de trazas fósiles y de asociaciones fósiles de macroinvertebrados.
“Una vez analizados los macroinvertebrados, los restos de cetáceos y pinnípedos, así como otros restos potencialmente pertenecientes a un sirénido (un tipo de vaca marina), concluimos que se había tratado de un ambiente sedimentario relativamente alejado de la costa, profundo y con poca energía”, indica Matías Reolid.
Localizaron restos de varias costillas y extremidades de ballena, parte del cráneo de una ballena de pequeño tamaño (género Cephalotropis), numerosas costillas de sirénidos, parte de la caja torácica de un león marino, dientes de tiburón y numerosas conchas de macroinvertebrados (ostras y pectens, entre otros).
La depresión del Guadalquivir conectaba el Mediterráneo con el Atlántico, ya que el estrecho de Gibraltar estaba cerrado
“El interés de esta investigación radica en la escasez de hallazgos de fósiles de mamíferos marinos en Andalucía. Además, nos ayuda a reconstruir cómo eran las condiciones ambientales en este sector hace entre nueve y diez millones de años”, explica Matías Reolid. “En ese momento, lo que es actualmente la depresión del Guadalquivir era una de las principales conexiones del Mediterráneo con el Atlántico, ya que en aquel tiempo el estrecho de Gibraltar estaba cerrado”, indica el profesor de Geología de la UJA. 
El análisis de los restos encontrados, pese a estar incompletos, ha permitido aventurar que, en un contexto de ambiente de poca energía, los grandes restos fósiles de los cetáceos se encuentran dispersos e incompletos no por la acción de las corrientes sino por la actividad de otros organismos predadores y carroñeros. Algunos de los huesos fósiles muestran las marcas hechas por ellos.
Asimismo, los restos hallados corresponden a la misma edad que el diente del tiburón gigante (Carcharocles megalodon) localizado en Porcuna en 2015. “Siempre se ha interpretado al megalodón como predador de mamíferos marinos, principalmente cetáceos, por lo que cobra sentido que en el mismo lugar coincidan restos de él y de sus presas”.
Vía: Agencia SINC

Referencia bibliográfica:
"Palaeoenvironmental interpretation of a sand-dominated coastal system of the Upper Miocene of Eastern Guadalquivir Basin (south Spain): fossil assemblages, ichnology and taphonomy"Journal of Iberian Geology 42(3):275-290.  Diciembre de 2016 

Los primeros humanos llegaron a América 10.000 años antes de lo que se pensaba

Los primeros humanos llegaron a América desde Siberia a través del estrecho de Bering hace unos 24.000 años, 10.000 años antes de lo que se creía hasta ahora, revelan investigadores de la Universidad de Montreal en la revista 'PLoS One'. La fecha se ha establecido a partir de la datación por carbono 14 de restos de fauna que presentan marcas de herramientas de piedra. Este descubrimiento «prueba que las cuevas de Bluefish son el yacimiento arqueológico más antiguo conocido en Norteamérica», sentencian los autores del hallazgo.

Las cuevas de Bluefish son tres pequeñas cavidades del norte de Yukón, cerca de la frontera con Alaska. Fueron excavadas entre 1977 y 1987 por el arqueólogo Jacques Cinq-Mars, que encontró en ellas huesos de caballos, mamuts, bisontes y caribús que el radiocarbono fechó hace unos 30.000 años. Cinq-Mars planteó entonces que los restos podrían demostrar la presencia humana en Norteamérica mucho antes de lo que se pensaba, pero durante décadas esa hipótesis ha permanecido arrinconada porque no había otros yacimientos que apuntaran una fecha tan temprana ni pruebas de que los huesos hubieran sido llevados hasta las cuevas de Bluefish por humanos.

Ariane Burke (izquierda) y Lauriane Bourgeon (derecha), de la Universidad de Montreal, presentan ahora esas pruebas después de que la segunda haya analizado durante dos años 36.000 fragmentos óseos depositados en el Museo Canadiense de la Historia, en Gatineau.

La concienzuda búsqueda ha dado como resultado el hallazgo de quince piezas con «huellas indiscutibles» de herramientas de piedras y otras 20 que podrían presentarlas. «Las series de líneas rectas en forma de V de las superficies de los huesos fueron hechas con útiles para despellejar animales. Son marcas de corte indiscutibles hechas por seres humanos», dice Bourgeon.

36.000 huesos estudiados

La estudiante de doctorado en la Facultad de Antropología de la Universidad de Montreal Lauriane Bourgeon ha estudiado unos 36.000 fragmentos de huesos y en una quincena de ellos ha hallado huellas indisputables de actividad humana. Una veintena más mostró huellas probables del mismo tipo de actividad.

Foto: Marcas de corte en un hueso de caribú. PLoS ONE.

"Herramientas de piedra usadas para despellejar a los animales dejaron una serie de líneas rectas y en forma de V sobre la superficie de los huesos", comentó Ariane Burke, profesora de Bourgeon. Esta sometió los huesos a la datación por carbono. El resultado fue la datación hace entre 21.000 y 22.000 años del fragmento más antiguo, una mandíbula de caballo.

Esta mandíbula del caballo de la cueva II muestra una serie de marcas de corte en la superficie lingual. La lengua del animal se cortó con una herramienta de piedra. Fuente: Universidad de Montreal

"Nuestro descubrimiento confirma los análisis previos e indica que es la población humana más temprana en Canadá", aseveró Burke.

Aislados del resto del mundo

Sus conclusiones coinciden con los resultados de estudios genéticos que revelaron que varios miles de personas vivieron aisladas del resto del mundo en la región conocida como Beringia hace entre 15.000 y 24.000 años.

"Durante el último máximo glacial, Beringia quedó aislada del resto de Norteamérica por glaciares y estepas demasiado inhóspitas para la población del oeste", precisó Burke. En conclusión, los habitantes de Cuevas de Bluefish fueron los antepasados de quienes se extendieron por el continente a finales del último periodo glacial.

Fuentes: Diario Sur / PHYS.org / RT

Los primeros homínidos de Atapuerca también se alimentaban de vegetales

Foto: Ana Mateos

Un equipo de científicos del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), liderado por los doctores Ana Mateos y Jesús Rodríguez, acaba de publicar un artículo en la revista Journal of Anthropological Archaeology donde demuestra que la recolección de bellotas en los ecosistemas mediterráneos de hace alrededor de 300.000 años, resultaba más eficaz, energéticamente hablando, que el aprovechamiento de los recursos animales.



Para llevar a cabo su investigación, los autores de este artículo diseñaron un estudio de energética experimental con mujeres en el entorno de la Sierra de Atapuerca (Burgos). Las voluntarias simulaban la recolección de bellotas en dos localizaciones: una, en el entorno de Cueva Mayor, y otra, en las orillas del río Arlanzón.

Otra parte del estudio se llevó a cabo en el Laboratorio de BioEnergía del CENIEH, donde se observó que el tamaño corporal de la muestra de mujeres participantes se correspondía con la estimada para la población femenina del yacimiento de la Sima de los Huesos.

La actividad de recolección de unos 3 kilogramos de bellotas en una hora apenas supone un gasto energético de unas 300 kilocalorías, en una actividad física de carácter moderado. El retorno calórico de estos nutritivos frutos representa, aproximadamente, unas 11.600 Kcal y sería suficiente para cubrir las necesidades de cuatro personas durante un día.

“Para las poblaciones humanas del Pleistoceno, que dependían de su entorno para sobrevivir, una explotación eficiente de los recursos resultaba esencial para mantener un buen balance energético entre la ingesta de alimentos y el gasto energético de sus actividades diarias”, explica Ana Mateos.

Abundante y fácil de almacenar

Además de su aporte calórico y de sus virtudes nutricionales, las bellotas, en particular la bellota dulce producida por la encina (Quercus ilex rotundifolia), resultarían muy atractivas para las poblaciones paleolíticas al poder ser consumidas sin ningún procesado previo, por su abundancia en un ecosistema adehesado como el que, probablemente, existía en Atapuerca hace 300.000 años, y por ser de fácil almacenaje durante los meses de invierno.

Otra ventaja de este recurso frente al consumo de carne sería el escaso riesgo que supondría su obtención, en comparación con la caza o el carroñeo de grandes animales. “Este estudio no viene a cuestionar la importancia del consumo de carne, grasa y otros productos de origen animal para las poblaciones paleolíticas, pero sí pretende poner en evidencia la importancia de los recursos vegetales en la dieta de los homínidos del Pleistoceno, unos alimentos que no suelen ser considerados en este tipo de estudios porque su consumo no deja huella en el registro arqueológico”, comenta Jesús Rodríguez.

Fuente: rtvcyl.es | 16 de enero de 2017

OBRA DE ANTONIO GAUDI

Antonio Gaudí Cornet nació en 1852 en Reus, una pequeña ciudad al sur de Barcelona, hijo de Francesc Gaudí Serra, industrial calderero. Era el menor de cinco hermanos. El pequeño Gaudí, padeció reumatismo desde niño, lo que le transmitió un carácter un tanto retraído y reservado. Cursó arquitectura en la Escuela de la Llotja y en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona, donde se graduó en el 1878. Para pagarse la carrera, Gaudí trabajó como delineante para diversos arquitectos y constructores.

El 7 de junio de 1926 Gaudí se dirigía a la iglesia de San Felipe Neri, que visitaba a diario para rezar pero al pasar por la Gran Vía de las Cortes Catalanas, entre las calles Gerona y Bailén, fue atropellado por un tranvía, que lo dejó sin sentido. Siendo tomado por un mendigo, al ir indocumentado y a causa de su aspecto descuidado, con ropas gastadas, no fue socorrido de inmediato, hasta que un guardia civil paró un taxi que lo llevó al Hospital de Santa Cruz de Barcelona. Murió tres días después, a los 73 años de edad, en la plenitud de su carrera. Fue enterrado el 12 de junio grandes multitudes que quisieron darle el último adiós, en la capilla de Nuestra Señora del Carmen de la cripta de la Sagrada Familia.

En 1952, centenario del nacimiento del arquitecto, se fundó la Asociación de Amigos de Gaudí, para divulgar y conservar el legado dejado por el artífice catalán. Hombre de profunda religiosidad, se ha propuesto la beatificación de Antoni Gaudí, proceso iniciado en 1998 por el arzobispo de Barcelona, Ricard Maria Carles i Gordó. El año 2000 fue autorizado el inicio del proceso por parte del Vaticano, por el cual Gaudí pasa a ser considerado siervo de Dios, el primer peldaño para la beatificación.

Siete edificios construidos por el arquitecto en Barcelona a finales del siglo XIX y principios del XX son: Parque Güell, Palacio Güell, Casa Milá, Casa Vicens, la obra de Gaudí en la fachada de la Natividad y la cripta de la Sagrada Familia, la Casa Batlló y la cripta de la Colonia. Según datos realizados de 2011, el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia es el monumento más visitado de España, con más tres millones de visitantes, seguido por el Museo del Prado (cerca de tres millones) y la Alhambra de Granada (casi dos millones y medio de visitantes).

El templo, cuando esté terminado, dispondrá de 18 torres: cuatro en cada una de las tres fachadas y, a modo de cúpulas, se dispondrá un sistema de seis torres, con la torre cimborio central dedicada a Jesús de 170 metros de altura, otras cuatro alrededor de esta, dedicadas a los evangelistas, y un segundo cimborio dedicado a la Virgen.

AÑO 1984

Año de inscripción en la Lista del Patrimonio Mundial: «Obras de Antoni Gaudí», junto con el Palacio Güell, el Parque Güell, la Cripta de la Colonia Güell, y la Casa Milá.

El Parque Güell

Es un parque público con jardines y elementos arquitectónicos situado en la parte superior de la ciudad de Barcelona), en la vertiente de la montaña del Carmelo, perteneciente a las estribaciones de la sierra de Collserola, pertenece al barrio de La Salud, en el distrito de Gracia. Fue diseñado por el arquitecto Antoni Gaudí, por encargo del empresario industrial y político español, Eusebi Güell. i Bacigalupi, (1846 - 1918) conocido por ser mecenas del arquitecto modernista Antoni Gaudí. Construido entre 1900 y 1914, fue inaugurado como parque público en 1926.

En el recinto del Parque Güell, en el Camino del Rosario, se encuentra la Casa-Museo Gaudí, lugar de residencia del arquitecto desde 1906 hasta 1925, pocos meses antes de su muerte, fecha en que pasó a residir en el taller de la Sagrada Familia. Aquí vivió con su padre, Francesc Gaudí i Serra fallecido en 1906 a los 93 años y su sobrina, Rosa Egea Gaudí fallecida en 1912 a los 36 años. El 28 de septiembre de 1963 se inauguró como museo y actualmente acoge una colección de muebles y objetos diseñados por el arquitecto, así como obras de otros colaboradores suyos.

El Parque Güell se formó por la unión de dos fincas, Can Muntaner de Dalt y Can Coll i Pujol, en la llamada Montaña Pelada hoy día Monte Carmelo, adquiridas por Güell en 1899. El terreno había pertenecido a Salvador Samá y Torrents, al marqués de Marianao alcalde de Barcelona en (1905-1906) y (1910-1911), promotor del Parque de Samà en Cambrils, (Tarragona) obra de Josep Fontserè i Mestre (1882), uno de los maestros de Gaudí.

El parque tiene una extensión de casi 18 hectáreas por lo que mandó plantar nueva vegetación, de especies mediterráneas autóctona al terreno: pino, encina, eucalipto, palmera, ciprés, higuera, almendro, tomillo, etc. Del vestíbulo de entrada parte una escalinata que conduce a la plaza central de la urbanización, construida entre 1900 y 1903. Está dispuesta simétricamente alrededor de una escultura de salamandra que se ha convertido en el emblema del jardín y de Barcelona.

Sobre la escalinata se sitúa la Sala Hipóstila o Sala de las Cien Columnas, que sirve de soporte a la plaza superior. Construida entre 1908 y 1909. Está compuesta por 86 columnas estriadas, de 6 metros de alto y 1,20 de diámetro, confeccionadas de mortero y escombro simulando mármol, Las columnas exteriores están ligeramente inclinadas para lograr un mejor equilibrio estructural.

El Palacio Güell

Está situado en la calle Nou de la Rambla de Barcelona, cerca del puerto y el paseo marítimo de la ciudad. El palacio fue encargado a Gaudí por Eusebi Güell, quien sentía una gran admiración por el arquitecto y financió varias de sus más conocidas obras. Gaudí puso todo su empeño en esta obra, ya que era su primer encargo importante.

El Palacio Güell está sobre un solar de planta casi rectangular, del edificio se compone de sótano para caballerizas, planta baja con recibidor, portería, garaje y diversas áreas de servicios, entresuelo para el área administrativa, planta noble para el área social, segundo piso para el área privada de dormitorios, y baños, tercero con el área de servicio, la cocina y la lavandería, y azotea 8 x 22 metros Gaudí lideró un amplio equipo de técnicos y artesanos.

El edificio está construido con piedra calcárea de Garraf (Barcelona) donde Güell tenía una finca, las Bodegas Güell en el término de Sitges (Barcelona). Del vestíbulo del entresuelo parte la escalera de honor, que da acceso a la planta noble, organizada alrededor de un gran recibidor central de 80 metros cuadrados, que tiene una altura de tres plantas 17,5 metros. Este recibidor es el núcleo central del edificio, al estar rodeado por las principales estancias del palacio.

La azotea está rematado por una terraza de 481 metros cuadrados, de cuatro niveles: el más grande corresponde al cuerpo central del edificio, con 14 chimeneas, cuatro lunetas con forma de cáscara, los tragaluces y la linterna correspondiente a la cúpula central. Del conjunto del tejado destacan por un lado las chimeneas, a las que lejos de tratarlas como elementos molestos, Gaudí les dio carácter decorativo. Con ello inició una forma de diseñar las chimeneas que iría desarrollando en sus siguientes obras, hasta llegar a soluciones espectaculares como en la Casa Batlló y la Casa Milà. En total son 20 chimeneas, construidas en ladrillo y excepto seis dejadas en obra vista recubiertas de cerámica del tipo trencadís* habitual en las obras de Gaudí.

*El trencadís, es un tipo de aplicación ornamental del mosaico a partir de fragmentos cerámicos básicamente azulejos unidos con argamasa, es una mezcla de cal, arena y agua, muy habitual y característico en la arquitectura modernista catalana.

Detalle de la fachada de la Casa Milá

Casa Milà

La azotea está rematado por una terraza de 481 metros cuadrados, de cuatro niveles: el más grande corresponde al cuerpo central del edificio, con 14 chimeneas, cuatro lunetas con forma de cáscara, los tragaluces y la linterna correspondiente a la cúpula central. También llamada popularmente La Pedrera. Desde su apertura al público en 1987 ha recibido más de 20 millones de visitas (1 millón cada año aproximadamente), convirtiéndola en uno de los diez lugares más visitados de Barcelona. La Casa Milà se encuentra en un chaflán del Paseo de Gracia con la calle Provenza, ocupado anteriormente por un chalet que hacía frontera entre los municipios de Barcelona y Gracia, antes de la anexión de esta villa a la ciudad condal en 1897.
El chalet pertenecía a José Ferrer-Vidal y Soler, (1853-1927) hermano de Luis Ferrer-Vidal y Soler, (1861-1936) fundador de la Caixa de Pensiones de Barcelona. La zona se ubicaba en pleno Ensanche de Barcelona, es el distrito más poblado de Barcelona proyectado por Ildefons Cerdà Suñer y aprobado en 1859. Con el Ensanche, el Paseo de Gracia se convirtió en una de las principales arterias de la ciudad, por lo que fue elegido por la burguesía catalana para fijar sus residencias.

Gaudí recibió el encargo de construir una casa señorial de parte de Pere Milà i Camps, (1874-1940) un rico empresario cuyo padre, Pere Milà i Pi, había forjado su fortuna en la industria textil. Milà amplió el negocio familiar y diversificó los sectores donde probó fortuna, siendo por ejemplo el promotor de la plaza de toros La Monumental. También se dedicó a la política, y fue diputado por parte de Solidaridad de Catalana.

El señor Milà estaba casado con Roser Segimon i Artells, (1870-1964) viuda de Josep Guardiola i Grau, un indiano enriquecido en América con plantaciones de café, cuya fortuna heredó su mujer. En aquella época trabajaba en diversos proyectos a la vez: el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia (1883-1926), la Torre Bellesguard (1900-1909), aunque su nombre oficial es Casa Figueras, el Parque Güell (1900-1914), la Casa Batlló (1904-1906) y la restauración de la Catedral de Santa María de Palma de Mallorca (1903-1914).

El proyecto de Milà era construir un edificio de grandes dimensiones, destinar el piso principal para su propia residencia y el resto en régimen de alquiler, algo habitual en la época. Asimismo, la planta baja, en su parte exterior, fue destinada a tiendas, siendo la primera una sastrería abierta en 1928.

Durante la Guerra Civil Española la Pedrera fue ocupada por el El Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC), cuyo secretario general, Joan Comorera i Soler (1894-1958) se instaló en el piso principal. Los Milà, que estaban veraneando en Blanes en la provincia de Gerona al estallido de la contienda, se pasaron al bando nacional, y volvieron a su casa una vez terminada la guerra. En 1940 falleció Pere Milà, y pocos años después, en 1946, su mujer vendió el inmueble a una inmobiliaria, siguió viviendo en su piso hasta su fallecimiento en 1964.

La Casa Milà fue declarada Monumento Histórico-Artístico de Carácter Nacional en 1969, y en 1984 la UNESCO la incluyó dentro del Lugar Patrimonio de la Humanidad «Obras de Antoni Gaudí», junto con el Palacio Güell, el Parque Güell y la Cripta de la Colonia Güell.

El edificio se construyó sobre un solar de 34x56 metros, con una extensión 1835 metros cuadrados de superficie. Consta de seis plantas articuladas alrededor de dos patios interiores, uno circular y otro oval, más un sótano, un desván y la azotea. El edificio se encuentra coronado por una azotea situada sobre el desván, donde Gaudí situó las salidas de escalera, las chimeneas y las torres de ventilación, que por sus originales formas y diseño innovador crean un auténtico jardín de esculturas al aire libre. En la azotea se encuentran un total de 30 chimeneas, 2 torres de ventilación y 6 salidas de escalera, diseñadas con diferentes soluciones estilísticas.
La azotea se convierten en pequeñas torres de forma cónica, de hasta 7,80 metros de altura, construidas en ladrillo revocado de mortero de cal, con un revestimiento de trencadís. El filósofo y escritor Josep María Carandell (1934-2003) ofrece en su obra La Pedrera, cosmos de Gaudí una interpretación simbólica de la azotea de la Casa Milà basada en conceptos religiosos, cosmogónicos y literarios. Para este autor, la azotea sería un auto sacramental, una obra dramática en celebración del Corpus Christi.

AÑO 2005

Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco:

Interior de la Casa Vicens

La Casa Vicens

Está declarado monumento histórico-artístico en virtud del Decreto de 24 de julio de 1969 del Boletín Oficial del Estado de 20 de agosto de 1969. En julio del año 2005 la Casa Vicens fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Es un edificio modernista, siendo el primer proyecto de importancia del arquitecto Antoni Gaudí tras su licenciatura como arquitecto en 1878. Se construyó entre 1883 y 1888. Se halla ubicado en la calle Carolines, 24 del barrio de Gracia de la ciudad de Barcelona, en España.

Gaudí recibió el encargo de Manuel Vicens i Montaner para una segunda residencia veraniega de la familia, propietaria de una fábrica de cerámica. Queda de manifiesto en la fachada del inmueble, cuya decoración está basada precisamente en azulejos La casa Vicens está estructurada en cuatro niveles o plantas, correspondientes a un subterráneo para ser utilizado como bodega, dos plantas con destino a vivienda y unas buhardillas para uso del servicio.

En 1899 la viuda de Manuel Vicens, Dolores Giralt, vendió la casa a Antoni Jover i Puig. En 1925 se realizó una reforma de la casa, a cargo de Joan Baptista Serra Martínez, que construyó también un templete en el jardín, con una fuente llamada de Santa Rita, en la esquina con la Avenida Príncipe de Asturias, derribado en 1962, en la actualidad los antiguos jardines están ocupados por edificios de viviendas.

La fachada de la Natividad

Es la única parte del templo construida por Gaudí. Es la fachada del Nacimiento y la cripta, con escultura de Carles Mani, Llorenç Matamala y Joan Matamala, contando con los dibujos de Ricard Opisso. El arquitecto solo llegó a ver coronada una de las torres antes de su fallecimiento, la de San Bernabé. A su muerte se hizo cargo de las obras su ayudante Domènec Sugrañes durante los años (1926-1936), el cual finalizó las tres torres que quedaban en la fachada del Nacimiento. Fue incluida en 2005 por la Unesco en el Sitio del Patrimonio de la Humanidad «Obras de Antoni Gaudí». El templo fue consagrado y declarado Basílica menor el 7 de noviembre de 2010 por el papa Benedicto XVI.
Las de la fachada de la Natividad, están dedicadas a San Bernabé, cuando Gaudí muere en 1926 sólo la torre de San Bernabé estaba totalmente acabada y las otras tres muy adelantadas como son: San Simón, San Judas Tadeo y San Matías. Cada uno de ellos está representado en una gran estatua sedente, colocada en el punto en que las torres pasan de una estructura cuadrada a otra circular, lo que permite hacer, en los espacios triangulares resultantes, unos balcones que les sirven de base.

Está formada como las otras fachadas por cuatro campanarios de planta cuadrada en su base, que pasa a ser cilíndrica cuando llegan a la cuarta parte de su altura. Más arriba, van adoptando un perfil parabólico hasta convertirse en un pináculo que corona cada una de las torres. Las torres o campanarios: Tienen una altura de 107 metros las dos centrales y de 98 metros las exteriores.

Cada una de las torres de esta y de las otras dos fachadas, en total doce, cuatro para cada una, está dedicada a un apóstol. Toda la longitud de los campanarios está abierta por medio de una especie de persianas de piedra que permitirán la difusión del sonido de las campanas tubulares previstas por Gaudí. Para los pináculos, Gaudí imaginó entre 1914 y 1922 diferentes soluciones. Gaudí diseñó para este pórtico una impresionante iconografía en la que además de las figuras religiosas, se han esculpidos enormes cantidades de elementos vegetales.

El pórtico está compuesto por tres portales:

* Esperanza (a la izquierda) es mucho más pequeño que el central y sobresale algo menos de la fachada, tiene una sola puerta, contiene también una vegetación, puesto que en este portal se representan escenas de la fuga de Egipto y también del sacrificio de los santos inocentes.

* Caridad (en el centro) está dividido en dos entradas diferentes por una columna que sustenta estatuas de Jesús, María, José y ángeles, completadas a ambos lados por grupos escultóricos que representan la adoración de los reyes y los pastores. Más arriba, encontramos figuras de ángeles músicos, todo ello rodeado por un mundo vegetal con flores de varias especies y animales y pájaros, que cubren toda la superficie del pórtico. En la parte superior de este conjunto, se encuentra una representación de los signos del Zodiaco tal y como se encontraban la noche del nacimiento de Jesús.

* Fe (a la derecha), Con una sola puerta, encontramos pedestales con aves domésticas y vegetales con un friso de arabesco. Encima y al lado derecho, una imagen de Jesús trabajando en un banco de carpintero y José y María buscando a Jesús en el templo. A la izquierda, la Visitación de la Virgen a su prima Santa Isabel y más arriba Zacarías, padre de San Juan Bautista.

En 2014 la familia Herrero Jover vendió la Casa Vicens al banco de Andorra Mora Banc, que tiene previsto convertir el inmueble en una casa-museo y abrirlo al público, tras una remodelación.

La Cripta

Comenzada en 1882 según el proyecto de Francisco del Villar, al hacerse cargo Gaudí de las obras, el 3 de noviembre de 1883, transformó los pilares añadiéndoles capiteles con motivos naturalistas; también elevó la bóveda y rodeó la cripta de un foso para tener iluminación y ventilación directas.

Los primeros planos de Gaudí para la Sagrada Familia fueron de la capilla de San José, construida entre 1884 y 1885, fecha de la celebración de la primera misa. Las obras de la cripta se prolongarían hasta 1891. La cripta se compone de siete capillas dedicadas a la Sagrada Familia de Jesús: San José, el Sagrado Corazón, la Inmaculada Concepción, San Joaquín, Santa Ana, San Juan y la capilla de Santa Isabel y San Zacarías. Están dispuestas en forma de rotonda, frente a la cual se sitúan otras cinco capillas en línea recta: la central dedicada a la Sagrada Familia por las capillas de Nuestra Señora del Carmen donde está enterrado Gaudí, de Jesucristo, de Nuestra Señora de Montserrat y del Santo Cristo donde tiene sepultura Josep María Bocabella.

La cripta de la Sagrada Familia, junto con el taller de construcción, sufrió importantes destrozos el 21 de julio de 1936 en un incendio provocado durante la quema de iglesias de Barcelona en la Guerra Civil. Este atentado destruyó y dañó para siempre algunas de las maquetas, planos y documentos del proyecto original de Gaudí. En ese mismo acto también fue profanada la tumba del fundador del templo, Josep María Bocabella, aunque por fortuna la de Gaudí quedó intacta, como pudieron comprobar sus discípulos al abrir el sepulcro en 1939. Desde 1930 la cripta es utilizada como iglesia parroquial, hasta la finalización del templo.

El 19 de abril de 2011 se declaró un nuevo incendio en la cripta, que destruyó prácticamente la totalidad de la sacristía. Si bien los daños fueron cuantiosos, no se vieron afectados ninguno de los elementos de valor histórico, como las vidrieras originales de Gaudí. Los más de 1500 turistas que en ese momento visitaban el templo fueron desalojados por las autoridades, si bien se restableció la normalidad poco más tarde. La policía detuvo en pocos minutos al causante del incendio.

La Casa Batlló

Fue declarada Monumento Histórico-Artístico de Carácter Naciona en 1969, y desde el año 2005 forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, dentro del Lugar «Obras de Antoni Gaudí». Es un edificio obra del arquitecto Antoni Gaudí, máximo representante del modernismo catalán. Se trata de una remodelación integral de un edificio previamente existente en el solar, obra de Emili Sala Cortés. Está situado en el número 43 del Paseo de Gracia de Barcelona, la ancha avenida que atraviesa el distrito del Ensanche en la llamada Manzana de la discordia, porque alberga además de este edificio otras obras de arquitectos modernistas La construcción se realizó entre los años 1904 y 1906.

* Casa Amatller, que colinda con la de Gaudí, obra de Josep Puig i Cadafalch.
* Casa Lleó Morera, obra de Lluís Domènech i Montaner.
* Casa Mulleras, de Enric Sagnier i Villavecchia.
* Casa Josefina Bonet, de Marcel·lià Coquillat.

La Casa Batlló, el edificio fue construido en 1875 por Emili Sala Cortés (1841-1920), un arquitecto autor de varios edificios en Barcelona y provincia. En 1903 el edificio fue adquirido por el industrial Josep Batlló i Casanovas, un rico hombre de negocios que poseía diversas fábricas textiles en Barcelona. Estaba casado con Amàlia Godó i Belaunzarán, de la familia de los condes de Godó, editores del diario La Vanguardia, con la que tuvo cinco hijos.

El matrimonio vivió en la planta noble de la casa hasta la defunción de ambos en 1934 el señor Batlló y en 1940 su mujer, la cual fue vendida en 1954 por sus hijos. Para la remodelación Batlló encargó el proyecto a Gaudí, por aquel entonces un arquitecto ya de gran renombre, que en aquella época trabajaba en diversos proyectos a la vez: el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia (1883-1926), la Torre Bellesguard (1900-1909), el Parque Güell (1900-1914) y la restauración de la Catedral de Santa María de Palma de Mallorca (1903-1914). El industrial quedó tan impresionado con la obra del arquitecto que lo recomendó a su amigo, Pere Milà i Camps, (1874-1940) para el que Gaudí construyó la Casa Milà conocida popularmente como la Pedrera entre 1906 y 1912.

El arquitecto se centró en la fachada, el piso principal, el patio de luces y la azotea, y levantó un quinto piso para los servicios de la casa (lavaderos y trasteros). Gaudí contó con la colaboración de sus ayudantes La Casa Batlló pasó en 1940 en herencia a las hijas del matrimonio Batlló-Godó (Carmen y Mercedes), las cuales la vendieron en 1954 a Seguros Iberia, que instaló allí sus oficinas comerciales.

En 1984 se instaló la iluminación eléctrica de la fachada, inaugurada en las Fiestas de la Mercè de ese año que tiene lugar el 24 de septiembre. En 1993 fue adquirida por la familia Bernat, propietarios de la compañía Chupa Chups, es una compañía española dedicada a la fabricación y venta de caramelos con palo, que la restauraron y la abrieron comercialmente al público, siendo en la actualidad un punto de visita.

Gaudí diseñó el proyecto de remodelación de la Casa Batlló a los 52 años. La Casa Batlló ocupa un total de 4300 m2, con 450 m2 de superficie por cada piso. Tiene 32 metros de altura y 14,5 de ancho. El edificio tiene ocho plantas: bajo el nivel de la calle se encuentra un sótano, destinado a carboneras y trasteros; la planta baja se dedicó inicialmente a garaje y luego a almacén, y junto a los accesos a las viviendas se ubicó una tienda, ocupada primero por el establecimiento de fotografía Lumière, luego por la productora cinematográfica Pathé Frères y posteriormente por la Galería Syra, la planta noble estaba ocupada enteramente por la familia Batlló. La fachada se hizo con piedra arenisca de Montjuïc.

Las columnas tienen representaciones vegetales. La carpintería es igualmente de superficies curvas, y las ventanas son de vidrios de colores de formas circulares. Gaudí conservó la forma rectangular de los balcones del edificio anterior, añadiendo unas barandillas de hierro con forma de antifaz, y dando al resto de la fachada una forma ondulada en sentido ascendente.

Asimismo revistió la fachada con cerámica (su famoso trencadís), que Gaudí obtenía en los desechos de la vidriería Pelegrí, y cuya colocación dirigió personalmente desde el Paseo de Gracia. La planta baja tiene 735 metros cuadrados, de cuya superficie un 50 por ciento está destinada a la tienda y garaje, y el resto se divide entre dos vestíbulos uno para los inquilinos y otro privado para los dueños de la casa. El remate del edificio es la azotea, de 300 metros cuadrados, a la que se accede desde el desván mediante unas escaleras de caracol.

La cripta de la Colonia Güell

En 2005 la cripta de la Colonia Güell fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. El municipio está formado por el Casco Antiguo, con las barriadas de Can Lluch y Plà de les Vinyes, la Colonia Güell, formada por el recinto industrial y la zona residencial fundadas a principios de siglo pasado por el empresario Eusebi Güell, las urbanizaciones de Can Via, Cesalpina, Sant Roc y el barrio Colomer. El municipio de Santa Coloma de Cervelló está situado en la ribera derecha del río Llobregat, en la falda de la montaña de Montpedrós también llamada Sant Antoni.

Esta obra es un reflejo de la plenitud artística de Gaudí: pertenece a su etapa naturalista primera década del siglo XX, solo se construyó la cripta, ya que a la muerte del conde Güell en 1918 sus hijos abandonaron el proyecto. La cripta fue consagrada como tenencia parroquial el 3 de noviembre de 1915 por el obispo de Barcelona, Enrique Reig Casanova, (1858-1927) dedicándose al Sagrado Corazón de Jesús. La cripta fue asaltada e incendiada el 19 de julio de 1936, durante el transcurso de la Guerra Civil, perdiéndose numerosos planos y documentos dejados por Gaudí, destinada a almacén, en 1939 fue restaurada, convirtiéndose en parroquia el 20 de julio de 1955 con la bendición del obispo de Barcelona Gregorio Modrego Casaus. En 2002 la cripta fue restaurada de nuevo por la Diputación de Barcelona y los ministerios de Cultura y Fomento, bajo la dirección del arquitecto Antoni González Moreno-Navarro. La intervención llevada a cabo ha sufrido numerosas críticas por no respetar la voluntad original de Gaudí y por malograr numerosos elementos estructurales originales.

Gaudí proyectó una iglesia de planta oval de 25 x 63 metros, con cinco naves, una central y dos más a cada lado, con diversas torres y un cimborrio de 40 metros de altura. La cripta de la Colonia Güell sirvió a Gaudí de banco de pruebas donde experimentar estas nuevas soluciones estructurales ideadas por él, que luego pudo aplicar en obras como la Sagrada Familia La puerta de entrada, de piedra de sillería, muestra en su parte superior una composición cerámica que representa las cuatro virtudes cardinales, con sus correspondientes símbolos:

* La Prudencia una hucha y una serpiente.
* La Justicia una balanza y una espada.
* La Fortaleza una armadura y un casco.
* La Templanza un porrón y un cuchillo cortando pan.

Narciso Casas - Profesor de Arte y Escritor.
Fuente: Mi libro titulado Patrimonio Mundial Cultural de la Humanidad en España.
ISBN: 978-84-686-7933-4 http://librosdenarcisocasas.blogspot.com.es http://narcisocasas.bubok.es http://pinturascreadaspornarcisocasas.blogspot.com.es