La red de carreteras más antiguas de américa están en Yucatán (Guatemala)


El Mirador, una ciudad del periodo preclásico tardío maya ubicada en el corazón de la selva de Petén, el departamento guatemalteco que hace frontera con México, es la cuna de este imperio y posee una gran variedad de flora y fauna, así como "la primera red de súper carreteras del mundo".
Esta es una de las conclusiones presentadas hoy en Ciudad de Guatemala tras unas investigaciones de alta tecnología realizadas en esta área, en el marco del "Proyecto Arqueológico Cuenca Mirador", a través de una especie de radar de alta precisión llamado LIDAR.

El director de este programa, el científico estadounidense Richard Hansen, un gran conocedor de esta cultura, explicó que este estudio, único en Mesoamérica, ha permitido descubrir que Guatemala "tiene el privilegio de ser la mera cuna de la civilización maya", con las pirámides más altas y una red de carreteras "única".


El mapeo LIDAR, que escanea el terreno con un láser que puede penetrar el dosel de vegetación a un ritmo de 560.000 puntos por segundo, ha permitido identificar rasgos arqueológicos únicos en imágenes 2D y 3D que constituyen "hallazgos de gran importancia" para el estudio de la cultura Maya.

En esta primera fase, en la que han analizado más de 700 kilómetros cuadrados, se han observado acrópolis, aguadas, pirámides, terrazas, canales, diques, muros y una red de carreteras de más de 240 kilómetros de largo -por 40 de ancho y unos 2 o 6 de alto- que permite concluir que el Mirador era un "sistema cerrado político".

"El primer estado de todas las Américas", proclama con orgullo Hansen a Efe, y agrega que en su época sería, además, el más grande del mundo, tanto en tamaño como en población. Se estima que al menos 1 millón de personas habitaban el área antes de su colapso en el 150 antes de Cristo. Esta red de carreteras, al menos unas 17, se utilizaban para el transporte de mercancías.

Tikal, el sitio excavado más grande de las Américas que contiene algunos de los restos arqueológicos más fascinantes de la antigua civilización Maya, es la reserva natural y cultural más célebre de Guatemala, declarada parque nacional en 1955 y Patrimonio Mundial por la Unesco en 1979, pero El Mirador, arguye Hansen, tiene ciudades más grandes que Tikal, pero aún desconocidas.


Esta investigación -continúa- nos ha permitido llegar a esa conclusión, además de creer que los mayas tenían aquí un "sistema de corrales" que puede ser la primera producción de carne a nivel industrial, aunque los análisis para reafirmar esta hipótesis aún están en proceso.
Estos descubrimientos, agrega la topógrafa Josephin Thompson, han permitido avanzar en dos años lo que llevaría unos 40, y ayuda a ser más precisos para entender los asentamientos y las ciudades de esta cultura.

El próximo año, los investigadores continuarán con el proyecto y piden a los Gobiernos desarrollar una ruta turística que respete el medioambiente, "sin crear caminos" y provocando "el mínimo impacto", algo parecido, apostilla Thompson a Efe, a los que ha hecho en Perú con Machu Picchu, aunque esto puede costar hasta 100 millones de dólares.
En la actualidad, unos 3.000 turistas llegan a El Mirador a pie o en mula, pero es necesario brindar seguridad y atención a este enclave cultural para preservarlo "intacto" y así "poder entender la evolución de la sociedad".

Para conservar esta zona, el arqueólogo estadounidense no duda en pedir a los Gobiernos de Guatemala y México, hasta donde se extiende El Mirador, que protejan el área e impulsen un turismo de desarrollo sostenible: "El Mirador es una joya. Nosotros solo somos los mensajeros, ustedes los dueños. Consérvenla".


El Mirador -conocido como el Reino Kan- tiene una superficie de 2.158 kilómetros cuadrados en plena Reserva de la Biosfera Maya y es uno de los pulmones ambientales y culturales de América.

Fuente: Patricia Pernas, Guatemala | EFE, 9 de diciembre de 2016

El Museo de Málaga vuelve más fuerte que nunca con 17.500 piezas y 40 millones bajo el brazo

Los malagueños salían a la calle para reivindicar su museo y, por fin, 20 años después, el Museo de Málaga abre sus puertas. Se convierte así en el ‘Prado Malagueño’, en el ‘Guggenheim de Málaga’, en el ‘Art andaluz’.

Arte y arqueología en un mismo espacio

Creado en 1972 por la unión del antiguo Museo Provincial de Bellas Artes (1913) y el Museo Arqueológico Provincial (1945), el Museo de Málaga ha ido reuniendo desde finales del siglo XIX destacadas colecciones que son exponente del arte y la arqueología malagueña y del resto de la Península. Desde entonces, ha ocupado distintas sedes y experimentado diversas tendencias expositivas y políticas culturales, actuando en todo momento como garante de la conservación, investigación y difusión de su rico patrimonio cultural.
Una institución ya centenaria que abre ahora –y ya era hora- un nuevo capítulo en el Palacio de la Aduana donde, por primera vez, se unen sus colecciones de arte y arqueología. Los malagueños, los españoles y los ciudadanos del mundo podrán disponer de la quinta pinacoteca más grande de España en la ciudad natal de Pablo Picasso.
Las dos colecciones, soberbias, están compuestas por más de 15.000 piezas arqueológicas registradas en almacén – se exhiben 2.000-, que recoge restos paleolíticos, romanos, indígenas, fenicios, restos de la islamización de Al-Andalus, etc. La colección pictórica parte del siglo XIX, pasa por el XX hasta llegar al arte contemporáneo. De 2.000 obras se exponen 200. Esta muestra nos lleva por paisajes de Manuel Criado y Antonio Reyna Manescau, por la pintura de éxito nacional de Badenes, por obras de Joaquín Sorolla, de Moreno Carbonero, por la espectacularidad de Enrique Samonet y no podía faltar la vanguardia de Picasso y Moreno Villa.


40 millones de euros

El Estado ha invertido 40 millones de euros en la rehabilitación del Palacio de la Aduana, unas obras que se han prolongado durante más de siete años. Se trata de un espacio cultural que cuenta con una superficie de más de 18.000 metros cuadrados.

Valores históricos y artísticos

En el Museo de Málaga se explican las colecciones que a lo largo del tiempo han ido depositándose en esta institución histórica y que permiten conocer y reflexionar sobre muchos momentos de la historia de Málaga y su provincia.


Se aparta, por tanto, de las tendencias consagradas en otros museos similares, en tanto que las colecciones se establecen como eje central del discurso expositivo, con su origen y periplo hasta el momento en el que cada obra se presenta al visitante mostrando sus valores históricos y artísticos.
El Museo de Málaga no cuenta una trayectoria lineal ni intenta mostrar con otras piezas los vacíos de la historia, sino que explica el porqué de dichas ausencias en determinadas épocas, respondiendo así a la historia singular del territorio malagueño.

La exposición que se presenta al público inicia su recorrido explicando el contexto de la Málaga del siglo XIX, con esas peculiaridades que le otorgó un destacado desarrollo económico gracias a la industria y al activo comercio del puerto y la consolidación de una nueva clase social burguesa, carácter liberal y en contacto con modas y tendencias europeas.
En este contexto, el Museo de Málaga relata cómo se fueron configurando dos colecciones. Por un lado, una privada de objetos arqueológicos: la colección Loringiana de los Marqueses de Casa Loring en su finca y jardín de La Concepción. La otra, de obras de arte y de titularidad pública, fruto de la labor de la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo en la recogida y custodia de los bienes muebles procedentes de la desamortización. Ambas colecciones darán lugar años después a dos museos provinciales en la ciudad que confluirán con el tiempo en el actual Museo de Málaga.
La sección de Arqueología cuenta con una cronología que se extiende desde la Prehistoria hasta la Edad Media. Destacan las esculturas de mármol de la Colección Loringiana, los fondos fenicios y romanos y las producciones cerámicas y de maderas talladas musulmanas.


Gobierno central y Junta

Un camino hasta el día de hoy en el que, pese a que tanto Gobierno como Junta han querido remarcar que se trata de un proyecto "común y compartido", ha sido largo.
Fue en abril de 2005 cuando el entonces presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero anunciaba que el Palacio de la Aduana sería la nueva sede del Museo de Málaga.
Tras una larga negociación entre las administraciones implicadas, en 2005 se hace efectiva la cesión del edificio al Ministerio de Cultura, comenzando los trabajos encaminados a rehabilitar el edificio para uso como Museo de Málaga.

La entrada, gratis para la UE
La entrada al museo es gratuita para los ciudadanos de la UE. El resto de visitantes tendrá que pagar 1,50 euros.

Fuente: teinteresa.es | 12 de diciembre de 2016

"La Aduana es un museo sostenible y sus instalaciones están muy bien pensadas"

La responsable del Museo de Málaga, María Morente (izquierda), cuya inauguración se celebrará hoy, 12 de diciembre –el público podrá visitarlo a partir del martes 13–, se prepara para culminar diez años de trabajo. En su nueva vida como museo, el Palacio de la Aduana muestra más de 2.000 piezas de arqueológicas y más de 200 obras pictóricas [la colección de Arqueología está formada por más de 15.000 piezas y la de Bellas Artes posee unas 2.500 obras] que trazan un recorrido por la historia de Málaga y su provincia. Con 2,5 millones de euros de presupuesto, el acceso al mayor museo de Andalucía será gratuito, salvo para los visitantes que no pertenezcan a la Comunidad Europea, que deberán pagar 1,50 euros. Morente asegura que la Aduana es un «museo sostenible» y muy «bien pensado», por lo que está convencida de que se harán «grandes cosas» con ese presupuesto.

¿Qué reacción espera de los malagueños que visiten el museo?

Los malagueños se van a sorprender desde el inicio de la visita, cuando se encuentren con el patio y con el edificio de la Aduana, porque es un espacio que tenemos en la retina, que recordamos por su uso administrativo, pero que muchos no conocen con la rehabilitación de arquitectura moderna que hoy tiene. También creo que les va a gustar especialmente todo lo que tiene que ver con el diseño y el montaje, donde las piezas lucen mucho. Es una apuesta por una museografía contemporánea, evocando los grandes museos del siglo XIX. Hay piezas que también van a ser llamativas y que los malagueños conocerán por primera vez. Desde que se cerró la sección del museo de la Alcazaba han pasado dos décadas, desde aquel momento la investigación en los hallazgos arqueológicos han sido muchos. Hoy están aquí las colecciones del Cerro del Villar; los materiales más modernos del asentamiento fenicio de La Rebanadilla; las cerámicas de Alozaina... Un tanto por ciento muy importante de piezas de arqueología son completamente inéditas. Creo que van a gustar también mucho las grandes ilustraciones que adornan el interior de las vitrinas, que explican los paisajes culturales de Málaga y los momentos de los contextos históricos. Por último, los malagueños se van a emocionar con el reencuentro de cuadros como Anatomía del corazón o con la colección Loringiana. Además, los arqueólogos de la provincia se van a encontrar con sus piezas bien expuestas, y eso les va a encantar.

¿Cuáles son los grandes atractivos del Museo de Málaga?

Yo creo que la rehabilitación del edificio es muy atractiva. La nueva cubierta evocando a la antigua que se quemó en 1922, pero formalizada en un lenguaje arquitectónico contemporáneo, con una gran teja que lleva impresa la vista de la Aduana en el siglo XIX, es espectacular. También será importante el hecho de que se pueda usar la planta baja sin restricción alguna, puesto que la Aduana fue un edificio que fue reclamado por la ciudadanía en manifestaciones públicas. Anteriormente era un inmueble vinculado al uso administrativo, al poder, motivo por el que los malagueños han disfrutado muy poco del mismo. Por supuesto, que dispongamos de una colección tan variada, que vaya desde la Prehistoria hasta el siglo XX también es un gran atractivo, así como el discurso con el que se presentan las colecciones que se cuentan desde el siglo XIX en Málaga. Además, los bienes del museo se presentan arropados por unos recursos sencillos pero de interés y que hace mucho más fresca la lectura de las distintas obras, como testimonios, lecturas, un recorrido de personajes históricos.... Por otra parte, otro de los atractivos es un almacén visitable. Cada visitante puede recorrer con su entrada el interior de uno de los almacenes del museo.

Hablando de entradas, ¿será cien por cien gratuito para todos?

Con respecto a los precios, seguiremos la política de museos públicos de la Consejería de Cultura, que son gratuitos para los españoles y los visitantes pertenecientes a la Comunidad Europea. Para los visitantes de fuera de la CEE, la entrada costará 1,50 euros. Esto quiere decir que abrimos nuestras puertas con un precio más que asequible que va a permitir que no solo se pueda venir una vez al museo sino que se pueda frecuentar de forma habitual. Abriremos de martes a sábado, de 9 de la mañana a 20.00 horas, y los domingos cerramos por la tarde.

¿Cuánto tiempo se necesita para recorrer toda la dotación que tiene el museo?

Como la colección es amplia y va acompañada de ciertos recursos, yo creo que una visita se puede hacer, razonablemente, en dos horas y media. Aunque a los malagueños no les invitaría a calcular el tiempo, les invitaría a que vengan frecuentemente. El Museo de Málaga está cargado de pequeñas historias y deberíamos poder venir muchas veces a descubrir cada una de ellas.



¿Qué estimaciones de visitas se barajan durante este primer año?

La verdad es que no hemos hecho un calculo del número de visitantes, pero suponemos que será alto, puesto que Málaga tiene una oferta museística complementaria y ya resulta una ciudad atractiva en este sentido. Asimismo, la rentabilidad de un museo no es solo el número de visitantes, sino que va estar en la calidad que tengamos como servicio y en la experiencia que permita tener el Museo de Málaga. Yo creo que esto es algo que la Aduana puede permitirse y va a ofrecer a los todos los visitantes malagueños.

¿Cómo funciona el museo antes de la inauguración oficial?

Ahora estamos inmersos en el acto de inauguración, pero una vez que pase ese día, el museo abrirá sus puertas. Creo que esta larga aventura que ha sido conquistar la Aduana, traer las colecciones e instalarlas, solo tenía una meta. Y es el día que se abran las puertas y los malagueños puedan entrar y encontrarse con su patrimonio y disfrutarlo.

¿Y cómo afronta esta nueva etapa?

Con la misma ilusión con la que empecé el proyecto en el año 2006. Mi objetivo era articular y coordinar un gran proyecto que tenía que pensar en muchas circunstancias y tenía muchos retos; el primero convertir la Aduana en un museo, conseguir que las colecciones llegaran aquí y generar un espacio atractivo e inteligente para el público. Ahora, cuando abrimos las puertas, volvemos a tener la misma ilusión, energía y retos, porque ahora se trata de hacer actividades, de contactar con el público y poder disfrutar todo este montaje.

En este sentido, ¿qué tipo de actividades organizará el museo?

Habrá un programa activo de actividades porque hay unos espacios adecuados para ello. Las actividades irán dirigidas a todos los públicos. Este es un museo en el que se representa tanto el valor patrimonial de la provincia que a mí me gusta llamarle un «museo de base», porque aunque sirve a los especialistas, está orientado preferentemente a un público no especializado. En este sentido, se organizarán actividades dirigidas a cualquier tipo de colectivo. Este es un museo que tiene que acoger a públicos muy dispares y hacerlos sentir como en casa. Además, como en la mayoría de los museos, permitimos a los investigadores acceder a las colecciones. En este sentido, nos hemos planteado ir un paso más allá y en nuestros almacenes no solo hay espacios disponibles para los investigadores sino que disponemos de una configuración a modo de aula de manera que la Universidad de Málaga pueda traer a sus alumnos y dar clases dentro de un almacén.

Este museo se ha ido creado durante un periodo de crisis económica. ¿Es así cómo lo imaginaba?

Ha quedado mejor que como lo había soñado, incluso. El inmueble está trazado en base a una planificación estratégica y a unos proyectos. Esto es, el museo tiene una metodología muy bien trazada y muy serena y el resultado es un poco lo que hemos ido generando. La gente que no sabe que hemos atravesado una crisis económica no lo va a notar porque tiene una gran de ejecución material y un alto diseño.

¿Cree que el actual presupuesto de 2,5 millones de euros es suficiente?

Este es el presupuesto del que partimos y, sin ninguna duda, vamos a ser capaces de hacer grandes cosas con él, ya que la Aduana es un museo sostenible. Sus instalaciones están muy bien pensadas. Los museos no son a día de hoy económicamente rentables; los museos deben ser rentables como producto cultural y esa misión la vamos a cumplir, sin duda.

¿Podría explicar las líneas expositivas a lo largo del año inaugural? ¿Sobre qué versarán las muestras temporales?

Las líneas expositivas van a ser muy amplias y diversas porque tenemos unas colecciones históricas que van a ser el eje vertebrador de muchos encuentros, diálogos y piezas invitadas. Pero la Aduana se define también como una apuesta por el arte y la cultura contemporánea. Además, también acogeremos investigación porque, en una parte, somos un museo arqueológico. Con respecto a las muestras temporales, no tenemos claro sobre qué versarán, pero sí que hemos ido generando vínculos con instituciones como museos estatales. De hecho, somos el museo que más fondo tiene del Museo del Prado, por lo que nuestra relación es muy especial. El Museo Arqueológico Nacional también nos representa, por lo que tenemos un anclaje con él bastante importante. A todo esto le sumamos, además, que nuestra relación con todos los museos de Andalucía es bastante amplia.

¿Cuántas piezas forman la colección de Arqueología y cuántas tiene la de Bellas Artes?

Dentro de la colección permanente que está expuesta al público, en arqueología hay unas 2.000 piezas y en arte un poco más de 200 piezas, más las 500 que conforman el almacén visitable. Dentro de los almacenes del Museo de Málaga contamos con 2.500 piezas en Bellas Artes y 15.000 de las colecciones del Arqueología. Además, tenemos muchas piezas en depósito dentro de varias instituciones de la provincia.

¿Es comprensible que la Lex Flavia Malacitana no se encuentre aquí expuesta?

La Lex Flavia Malacitana podría estar en el Museo de Málaga y estaríamos encantados. Pero la Lex Flavia, al igual que otras muchas piezas están en el Museo Arqueológico Nacional. Hay que pensar también que tener esta pieza en la institución nacional es un orgullo para la provincia. Yo creo que si conseguimos que la Lex Flavia venga, será un momento grande. Por el momento, hay que pensar que, por primera vez, tenemos reunida la colección Loringiana en el Museo de Málaga, y eso nos permite una alianza con el Museo Arqueológico Nacional. Dentro del edificio de la Aduana, al principio estuvimos pensando en hacer una réplica de la Lex Flavia, pero luego decidimos que lo mejor era instalar un recurso interactivo en el lugar que debía ocupar la obra.

Fuente: laopiniondemalaga.es | 12 de diciembre de 2016

El Patronato de la Fundación Atapuerca presenta sus proyectos para el 2017

Ibeas de Juarros, 12 de diciembre de 2016. El Patronato de la Fundación Atapuerca se ha reunido hoy en su sede de Ibeas de Juarros para celebrar su última reunión del año. Detallamos algunos puntos destacados del orden del día:

Iniciativas de promoción científica

Para 2017 la Fundación mantendrá su programa de formación de jóvenes científicos en disciplinas vinculadas al Proyecto Atapuerca, mediante ayudas para investigación científica, predoctoral y postdoctoral. El programa es una pieza esencial para la continuidad, vitalidad, fortaleza e impacto internacional del equipo científico que es la clave de la dimensión que ha alcanzado el Proyecto Atapuerca. En 2016 la Fundación otorgó 3 ayudas predoctorales y 5 posdoctorales, y para 2017 concederá también 8 ayudas posdoctorales y predoctorales. Desde el 2000, más de 50 miembros del Equipo de Investigación de Atapuerca (EIA) han podido gracias a la Fundación estudiar la información obtenida en los yacimientos de Atapuerca profundizando en el conocimiento de la evolución humana. Muchos ya han leído sus tesis doctorales y trabajan en centros de investigación o universidades de España y de fuera de España.

La Fundación continúa también con su apoyo estructural y logístico a la campaña de excavación, complementando la ayuda de la Junta de Castilla y León y de otras administraciones y empresas. La campaña de excavaciones de 2016 contó con 284 investigadores de 9 países, a los que se facilitó alojamiento, comidas, logística y medios de trabajo. La Fundación gestionó el registro, acreditación y certificación de excavadores, y durante ese periodo gestionó más de 30 acciones de comunicación y atendió numerosas visitas institucionales como la de la Reina Sofía, el Prof. Henry de Lumley, Ferrán Adriá o el Ministro de Educación, Cultura y Deporte, entre otros. Organizó además el III Ciclo de 6 conferencias con el Instituto de la Juventud, en la Residencia Gil de Siloé, con más de 600 asistentes.

Iniciativas de difusión y didáctica

El próximo año la Fundación continuará con los programas ya implantados, y seguirá apoyando acciones de desarrollo local que fomenten el interés por los yacimientos y su entorno (como la Marcha a pie a los yacimientos de la sierra de Atapuerca; la promoción de visitas en albergues del Camino de Santiago; la realización de talleres didácticos y apoyo en iniciativas locales). Mantendrá las actividades didácticas y de comunicación dirigidas a colectivos con discapacidad intelectual en colaboración con la Fundación Aspanias (como Limpiemos la Sierra y la adaptación de textos de lectura fácil para el Periódico de Atapuerca). En esta línea la Fundación está colaborando en la edición de un cuento hecho por personas con discapacidad, iniciativa de la Fundación Conde Fernán Armentález, de Melgar de Fernamental. Promoverá también la cesión a instituciones de exposiciones propiedad de la Fundación. En cuanto a las acciones de socialización, en 2016, la Fundación coordinó conferencias sobre Atapuerca en Madrid, Menorca, Tudela, Valladolid, Barcelona, Castellón, Andorra, etc. También, como se adelantó en el pasado Patronato, ha impulsado un nuevo planteamiento del Programa Atapuerca Personas (a fecha de hoy cuenta con 3.650 personas). Se ha creado la categoría “PAP Plus” del “Programa Atapuerca Personas”, para que los amigos y seguidores de Atapuerca puedan disfrutar de participar personalmente en la acción de la Fundación, con mayor nivel de implicación. Se estructura en las categorías PAP Plus (cuota anual de 20 euros), PAP Plus Protector Plata (cuota anual de 300 euros), y PAP Plus Protector Oro (cuota anual de 1.000 euros). Esta línea se lanzó en junio y ya se ha conseguido más de 4.000 euros.

En cuanto a las herramientas de comunicación, la Fundación continúa con la edición mensual del Periódico de Atapuerca, que ya ha editado 64 números. Los números del Periódico se pueden consultar en la web y en la aplicación de la Fundación, y en la plataforma Kiosko que permite el acceso al Periódico de Atapuerca desde cualquier ubicación, a través de iPads, iPhone, tablets y teléfonos Android. La renovación de la web en 2015 ha dado fruto y el número de visitantes ha aumentado muy considerablemente. En 2015 fueron 584.218 personas las que visitaron la web de la Fundación, y para final de 2016 se estima que la cifra rebasará el 1.100.000 personas. Cabe destacar además la creciente presencia de la Fundación en redes sociales. En lo que va de 2016 la Fundación tiene ya 19.000 seguidores en Twitter, casi 10.000 en Facebook, más de 440 en Linkedin y más de 2.300 en Instagram. La Fundación sigue en los primeros puestos de “influencers” de Burgos capital y en perfiles de ciencia relacionados con evolución humana, y entre los más seguidos a nivel internacional, con un índice Klout entre 65-70 (sobre un máximo de 100).

Gestión de Visitas a los yacimientos y al Centro de Arqueología Experimental

La Fundación Atapuerca gestiona, por acuerdo con la Fundación Siglo, las visitas a los yacimientos y al Centro de Arqueología Experimental desde marzo de 2011. Es una de las más relevantes actividades de la Fundación en materia de difusión social del Proyecto Atapuerca.

La Fundación tiene como prioridad mantener continuamente actualizada la formación científica y didáctica de sus monitores, encargados de guiar las visitas. Son miembros activos de la campaña de excavaciones, lo que les permite hablar en primera persona de los descubrimientos que explican a los visitantes. Dentro del plan de formación continuada de monitores, en 2016 la Fundación organizó 6 acciones. En marzo impartió un curso sobre habilidades para talleres didácticos a escolares relacionadas con proyectos de investigación. En mayo se celebró una jornada formativa con la ONCE, para adaptar las visitas a personas con discapacidad visual. Durante la campaña de excavaciones, como cada año, los monitores han participado durante una semana en el trabajo de campo y de laboratorio. También en julio, miembros del Equipo de Investigación de Atapuerca impartieron charlas formativas en la Residencia Gil de Siloé. En octubre la Fundación impartió unas jornadas de formación durante cuatro días, relacionadas con el convenio entre la Fundación Atapuerca y la Obra Social ‘la Caixa’, especialmente dirigida en facilitar  el acceso de escolares a la ciencia. En esas jornadas se trató de la fauna y la flora en Atapuerca, de las redes sociales para divulgar la ciencia, de patrimonio y didáctica, y de arqueología experimental. Finalmente, en noviembre se impartió el curso de reciclaje en Primeros Auxilios para actualizar los contenidos de cursos anteriores, en colaboración con Cruz Roja. En 2017 se prevé seguir con la formación continuada del personal a cargo de las visitas.

Acciones de captación de recursos

La Fundación Atapuerca está poniendo en marcha acciones para captar nuevos patrocinadores y colaboradores dentro y fuera de España. Por un lado, ha lanzado recientemente un plan de captación de micropatrocinio para buscar desde la web el apoyo material a la investigación de personas individuales. Asimismo la Fundación participa como beneficiaria en la Allies of Hispanic Culture, Education and Science Foundation (AHCES), de Nueva York, para captar recursos en Estados Unidos destinados a proyectos culturales en España. En 2016 se han firmado nuevos convenios con Google, Fundación Palarq, Fundación Elbullifoundation, Museo de Gibraltar, Fundación La Caixa y Fundación Caja de Burgos para el sendero botánico adyacente a los Yacimientos, y Grupo Julián por la donación de un jeep. Se han renovado convenios con Ausolan Igmo, FAE, Fundación Caja Viva Caja Rural, Fundación Ramón Areces y Fundación ACS. La Fundación tiene en marcha acciones de colaboración con patronos, y ha firmado convenios para prácticas de estudiantes con la Universidad de Burgos, la UNED de Tudela y la Universidad de Salamanca.

En cuanto a las acciones internacionales, se han activado colaboraciones con el Museo de Gibraltar, se gestiona la firma de un protocolo de colaboración con el Museo Nacional de Georgia, y se mantiene la promoción de estudiantes de Antropología de la University College of London (UCL), gracias al acuerdo de intercambio científico y colaboración entre ambas entidades. Los alumnos de la universidad británica tienen desde 2016 la posibilidad de cursar una asignatura llamada “Atapuerca and human evolution in Europe” que, además de contenidos teóricos, permite que un máximo de ocho estudiantes participen en la excavación de los yacimientos burgaleses. La asignatura, impartida por la investigadora María Martinón-Torres, del Equipo de Investigación de Atapuerca, ahonda en la importancia de Atapuerca para comprender la evolución humana en Europa.

Premios Evolución 2017

Durante la próxima campaña de excavación tendrá lugar la V edición de los Premios Evolución que otorga bienalmente la Fundación Atapuerca. El Patronato de la Fundación ha aprobado las las siguientes candidaturas: el Premio a la labor científica a la Prof. Mina Weinstein-Evron de la Universidad de Haifa –Israel. La Catedrática Mina Weinstein-Evron es profesora de la Universidad de Haifa en Israel, directora del laboratorio de palinología y dirige el Zinman Institute Of Archaeology. Contribuyó de forma importante a la declaración de las cuevas Nahal Me'arot o Uadi el-Mughara en el Monte Carmelo (Israel) como Patrimonio de la Humanidad en 2012, clave para el estudio de los neandertales. Las contribuciones científicas de Mina Weinsteis-Evron al estudio de la Evolución Humana son fundamentales. El Premio a los valores humanos a la Comandancia de la Guardia Civil de Burgos. En 2017 se cumplen 30 años desde que la Comandancia de la Guardia Civil de Burgos asumió la vigilancia de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca. La labor de protección y custodia que los agentes de la Guardia Civil han venido desarrollando desde entonces en torno a los yacimientos ha sido decisiva para que se hayan conservado indemnes a disposición de la investigación arqueológica y de la ciencia.

Presupuesto para 2017

El presupuesto de la Fundación Atapuerca para 2017 busca conciliar el equilibrio presupuestario con el cumplimiento de los fines fundacionales, centrados en el apoyo a la investigación científica y en la difusión del conocimiento científico. Tanto los ingresos como los gastos presupuestados superan ligeramente la cifra de 1.450.000 euros.


La Fundación Atapuerca espera destinar al cumplimiento de sus fines más del 88% de sus recursos. Un 33,98% al apoyo a investigación, principalmente ayudas predoctorales y postdoctorales, y un 54,07% a difusión y didáctica.

Descubren un ajuar visigodo único en España en el yacimiento de Argandenes (Piloña, Asturias)

El ajuar encontrado en el yacimiento visigodo de Argandenes, en Piloña, Asturias, es único en España. Lo dice el arqueólogo Rogelio Estrada, que ayer presentó en Infiesto los resultados de la segunda campaña realizada entre septiembre y octubre gracias a una subvención municipal de 7.000 euros.


Un kurzsax (espada corta de hierro de un solo filo), una cruz de bronce, hebillas bañadas en plata, tachuelas de calzado, un dardo, cuentas de collar de vidrio y un pendiente de arete son sólo algunos de los casi 300 objetos que aparecieron en los nueve metros cuadrados de la última excavación, que en esta ocasión se ubicó al oeste del panteón localizado durante la primera campaña en la Lladrea. Entre todos ellos destacan tres fragmentos de una lámina de oro que habrían formado parte de los apliques del cinturón de un varón enterrado en una tumba doble mixta, probablemente un aristócrata.


Los fragmentos son importantes por varios motivos: no se conocen hallazgos en oro de esta época en Asturias, salvo contadas excepciones como una moneda del castillo de Gauzón, en Castrillón. El hecho de que se hayan localizado in situ, formando parte de un yacimiento, permite una contextualización sobre la época y sobre quiénes fueron sus dueños, algo impensable con otros hallazgos relevantes como la diadema de Moñes, por poner un ejemplo. Más: su decoración, que podría ser una evocación astral de crecientes lunares o incluso evocar un lábaro cántabro, es rica en detalle e inusual para la época.


Así las cosas, el equipo multidisciplinar que participó en la última campaña de Argandenes confía en que los análisis que quedan pendientes -se enviarán por ejemplo restos orgánicos aparecidos junto a las placas de oro al laboratorio Beta Analytic, de Florida- arrojen luz a una etapa tan oscura y desconocida como es el momento anterior a la formación del Reino de Asturias.

Rogelio Estrada durante los trabajos de Argandenes. Foto: A. Espina.

Estrada aseguró que "las piezas encontradas en el yacimiento son algo excepcional en el contexto hispano, es casi milagroso que se conserven después de tanto tiempo pues el conjunto funerario sufrió saqueos". "Seguramente habrá más conjuntos por la zona, pero son difíciles de localizar. El momento en que se construye este panteón hay presencia visigoda, pero su influencia tampoco está excesivamente marcada. Se trata de un tiempo en que las élites astur-romanas hacen pactos constantemente sin la presencia ya de un ejército romano que respalde su autoridad. Hay un afán del individuo por mostrar su capacidad adquisitiva en el contexto de cierto vacío de poder", sostiene.

"Lo que se constata es que en un arco cronológico muy reducido de entre 150 y 200 años se enterraron aquí una treintena de personas importantes, cuyos descendientes podrían haber desempeñado un papel destacado en la batalla de Covadonga con don Pelayo y no se descarta que los restos pertenecieran a una sola familia, por lo que queda pendiente un análisis de ADN para ver el grado de parentesco", afirma Estrada.

El alcalde de Piloña, Iván Allende, confirmó ayer la intención del equipo de gobierno socialista de incluir una nueva partida de 7.000 euros en los presupuestos de 2017 para dar continuidad a las investigaciones.


Fuente: LNE.es | 10 de diciembre de 2016

Científicos españoles sitúan el origen de la agricultura en Siria, hace 10.500 años

Foto: Siega experimental de cereales silvestres en Yebel Drouze (Siria).

De todas las revoluciones que ha pasado el hombre, el Neolítico es probablemente la que más le transformó. Gracias a ella, pasó de vivir a la intemperie o dentro de cuevas a construir casas con muros y habitaciones. Pasó de vivir de lo que cazaba y recogía, a poder cultivar su propia comida e incluso a molerla para fabricar pan. Algunos animales, como cabras y vacas, comenzaron a vivir con él. Esto permitió que viviera en asentamientos estables y mayores, pero allanó el camino de enfermedades infecciosas como la tuberculosis. A pesar de todo, se las arregló para sembrar los gérmenes de las ciudades y de las primeras civilizaciones, con sus templos, leyes y dioses.
Si ocurrió todo esto fue quizás gracias a la domesticación. Un fenómeno por el cual el hombre seleccionó plantas y animales y acabó transformándolos en su propio beneficio. Según un artículo publicado este lunes en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) y realizado por científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Copenhague, la primera vez que ocurrió esto fue en Siria, en un poblado cercano a la actual ciudad de Sweida, hace 10.500 años.

«Lo más importante de este estudio es que hemos documentado el momento de transición en que se comenzó a domesticar cereales, en concreto dos tipos de trigo y una variedad de cebada», ha explicado a ABC, Juan José Ibáñez (izquierda), investigador del CSIC implicado en el estudio, dirigido por Amaia Arranz-Otaegui. «Hemos encontrado evidencias de que la domesticación estaba ocurriendo hace 10.500 años y en un lugar muy concreto».


Por entonces, lo cierto es que aquellos «sirios» llevaban 1.500 años cultivando variedades de cereales salvajes, y que en muchas otras zonas de Oriente Medio es probable que también ocurriera algo similar. Pero el paso del tiempo supuso un cambio: la acción del hombre favoreció ciertos rasgos de las plantas y poco a poco aparecieron variedades con distinto comportamiento y forma. Fue así como aparecieron las primeras cepas domesticadas.

Según explica Ibáñez, en esta ocasión los investigadores han encontrado precisamente la prueba más antigua de ese proceso de domesticación. Y justo cuando estaba empezando.


Semillas carbonizadas

Para ello, analizaron los restos encontrados en el yacimiento de Tell Qarassa Norte, una zona situada cerca de la actual ciudad de Sweida y en el pasado próxima a un lago llamado Qarassa. En concreto, recogieron sedimentos e inyectaron agua para hacer flotar los restos de cereales carbonizados que fueron quemados en el pasado (por accidente o como parte de la metodología de los agricultores). Lo interesante de esto es que solo los restos carbonizados no acaban descompuestos después de pasar miles de años bajo tierra y que aún así siguen conteniendo información muy valiosa sobre lo ocurrido.

Los científicos los observaron al microscopio para analizar su forma, y después estimaron su antigüedad con la técnica del carbono 14 y teniendo en cuenta la edad de los sedimentos donde se hallaron. También trataron de extraer el ADN de esos restos, aunque no lo lograron. Después de identificar los granos, los restos de glumas (vainas), los tallos y las espigas, pudieron concluir que tres tipos de cereales, dos variedades de trigo (la escaña y el farro) y una de cebada, eran distintas a las cepas naturales. Lo que quiere decir que aparecieron allí gracias a un fenómeno de domesticación.

Yacimiento de Tell Qarassa Norte- Juan José Ibáñez

El origen de la agricultura
Esto no confirma todavía que la agricultura naciera en esa zona de Siria. «Es posible que a la vez que se produjera esta domesticación en Siria ocurriera en otros lugares de Oriente Medio», ha explicado Ibáñez.

De hecho, entre los arqueólogos hay quienes piensan que la agricultura surgió varias veces (hipótesis del multicentro) y otros que abogan más por el origen único, situado hasta ahora en el sur de Turquía. «Pero nosotros demostramos que al menos el foco de Siria llegó a la domesticación a la vez que Turquía», ha dicho Ibáñez. Esto apoya la idea del multicentro, o a posibilidad de que hubiera un origen único anterior seguido de una transmisión muy rápida de conocimientos o variedades de plantas.

Aparte de esto, tampoco hay consenso en si la domesticación fue un fenómeno más bien inconsciente o mayoritariamente premeditado. Pudiera ser que los agricultores decidieran seleccionar algunas plantas, o bien que comenzara a plantar variedades salvajes y con el tiempo fuera favoreciendo a aquellas mejor adaptadas a ese tipo de vida.

Trabajos de excavación en Qarassa3 (Sweida, sur de Siria), el poblado de hace 13.000 años de los últimos cazadores-recolectores. Imagen: CSIC.

Plantas «nuevas»

Por ejemplo, gracias a la domesticación cambió la solidez de las espigas, y dejaron de deshacerse al madurar, con lo que el agricultor podía recogerlas durante la cosecha y plantarlas de nuevo más adelante. Además,la maduración de los cereales dejó de ser progresiva (esto es un rasgo ventajoso para algunas plantas, porque evita que todas maduren al mismo tiempo y que sean vulnerables a otros factores), y se hizo simultánea. Por último, las semillas dejaron atrás su proceso de dormición, por el cual no germinan con tanta facilidad en el suelo: esto no le interesa a los agricultores que quieren que lo hagan lo antes posible.


Foto: Excavación en Querassa 3.

El germen de las civilizaciones

Por lo que se ha encontrado en este y otros yacimientos, parece que aquellos sirios del Neolítico comían trigo, cebada, lentejas, gachas y habas. Molían los granos con morteros de piedra y molinos de mano y hacían harinas que aprovechaban para hacer tortas de pan. Disfrutaban de los pistachos y las almendras y cazaban muchas gacelas y hasta las tortugas que vivían en el lago Qarassa. Parece que también domesticaron a las cabras.

Esta base de comida les permitió mantener «una estructura social compleja, en la que había culto a antepasados y entierros ceremoniales», ha dicho Ibáñez. Aquel cambio en la alimentación cambió su mundo simbólico, social y económico. El trueque se generalizó en Oriente Medio, y la zona se convirtió en un «laboratorio social».

Hicieron falta muchas pruebas para que ese laboratorio cristalizara en las primeras grandes civilizaciones, aparecidas en torno a los 3.500 años antes de Cristo. «Entonces se desarrollaron la escritura, los templos, las monarquías y las divinidades. Pero si todo eso fue posible fue gracias a que 5.000 años antes las poblaciones se hicieron sedentarias y comenzaron a cultivar cereal».

Fuente: ABC.es | 5 de diciembre de 2016

Arqueólogos descubren varias estatuas en el templo de Amenhotep III en Luxor

Las estatuas, en muy buen estado de conservación, contarían con «un gran valor artístico y del mayor interés arqueológico», de acuerdo con fuentes oficiales egipcias

Arqueólogos de la misión de conservación del templo de Amenhotep III y los Colosos de Memnon en Luxor han descubierto una serie de estatuas entre las ruinas, representando a la diosa egipcia Sejmet y los restos de una colosal esfinge.

Las estatuas contarían con «un gran valor artístico y del mayor interés arqueológico», ha señalado el Ministerio de Antigüedades egipcio en un comunicado. Según ha explicado el director del departamento del Antiguo Egipto en el Ministerio, en la sala hipóstila del templo se han encontrado cuatro fragmentos de estatuas de la diosa-leona: tres bustos y un pecho descabezado.

La directora de la excavación, Hourig Sourouzian, aclaró que las estatuas encontradas están «en muy buen estado de conservación» y que encajan con otras piezas encontradas con anterioridad en el templo. El templo de Millones de Años de Amenhotep III, como se le llama a los templos funerarios de los faraones, habría contado con un gran número de estatuas de la diosa Sejmet, temible hija de Ra con cabeza de leona. Siguiendo la mitología egipcia, Sejmet, hija del dios sol, lo defiende en contra de sus enemigos, y protegería al templo de la maldad, así como de la enfermedad o la desgracia.


En la zona del tercer pilar del templo se han encontrado grandes fragmentos de una esfinge «colosal», esculpida en caliza, además de una pieza más pequeña, el torso en granito negro de una deidad. A diferencia de las estatuas de Sejmet, las esfinges están en peor estado de conservación y requerirán de un proceso de restauración antes de ser expuestas al público, añade la nota.

Pese a que la idea central del proyecto de conservación del Templo de Amenhotep III es la de exhibir las piezas en su lugar original, Kom el-Hettan a la orilla oeste de Luxor, las estatuas encontradas recientemente «han sido almacenadas» en depósitos del Ministerio de Antigüedad, por «razones de seguridad», según ha detallado Sourouzian. «Una vez que el yacimiento se organice y proteja, serán colocadas de nuevo en su posición original», ha añadido la arqueóloga.

Dos imponentes colosos, de casi 20 metros de altura y que pueden visitarse en Luxor, preceden al templo funerario de Amenhotep III, también conocido como Amenofis III y faraón de la dinastía XVIII. En el yacimiento se han encontrado más de un centenar de piezas como imponentes cabezas de estatuas u otras reliquias religiosas, 40 de las cuales serán expuestas a partir del lunes 12 de diciembre en una exhibición temporal del Museo de Luxor. Los objetos expuestos incluirán una colección de amuletos, monedas de época grecorromana, restos de arcilla y estelas religiosas.

Fuente: ABC