Encuentran 40 esqueletos, que datan entre los siglos III y VI d. C., enterrados en grandes ánforas en la isla de Córcega

21:18 0 Comments

Arqueólogos del INRAP excavan entierros realizados en ánforas en Ile-Rousse, Córcega. Crédito: Pascal Druelle.

En la isla francesa de Córcega, donde nació Napoleón, un equipo de arqueólogos ha descubierto más de 40 esqueletos enterrados en enormes jarrones de cerámica en una antigua necrópolis, según publica el Instituto Nacional de Investigación Arqueológica Preventiva (INRAP) de Francia.

En la primavera de 2019, en la localidad pesquera de Île-Rousse, mientras se realizaban preparativos para una construcción detrás de la iglesia de la Inmaculada Concepción, un diagnóstico arqueológico reveló a los investigadores del INRAP una docena de entierros antiguos que datan entre los siglos III y VI d. C. A partir de ese momento, el equipo de arqueólogos profundizó en la extensión de las excavaciones y llegó a cubrir un área de unos 600 metros cuadrados en el centro de la ciudad.

Ubicada en la costa noroeste de Córcega, Île-Rousse se estableció en el siglo XVIII como un puerto independiente. La evidencia arqueológica de ocupaciones anteriores ha sido hasta ahora rara y fragmentaria. Si bien se lo identificó tradicionalmente como un pueblo tranquilo de pescadores, cuando los turistas empezaron a llegar, se convirtieron en una fuente de ingresos cada vez mayor para la localidad.

Fotografía aérea de la excavación arqueológica en curso en el corazón del distrito Paoline de Île-Rousse, Córcega. © Pascal Druelle, INRAP

Qué encontraron bajo tierra

Al ampliar las excavaciones los arqueólogos descubrieron que era una auténtica necrópolis con una gran diversidad en su estilo constructivo. Mientras que algunos entierros excavados directamente en la roca estaban equipados con una reutilización de materiales de terracota, tal como baldosas romanas con bordes, llamados tegulae, y cubiertos de juntas llamadas ímbrices (una teja curva), otras tumbas, la mayoría y que sorprendieron a los arqueólogos, los esqueletos se hallaron dentro de grandes vasijas cilíndricas (ánforas) en lugar de ataúdes. Tales ánforas son en su mayoría de origen africano, fruto de las importaciones realizadas en Córcega entre los siglos IV y VII d. C., especialmente para contener vino, aceite de oliva y salmuera procedente de Cartago (Túnez).

Estudio antropológico en curso en la zona desenterrada por el INRAP. © Pascal Druelle

Otra característica es que, hasta el momento, no se hallaron depósitos de ofrendas que acompañaran a los difuntos. Otro dato que llamó la atención de los investigadores es la orientación de los enterramientos: generalmente se mantienen el eje este-oeste y las con las cabezas de los difuntos dispuestas hacia el oeste.

Si bien los romanos gobernaron Córcega y la zona de Île-Rousse en el pasado, los especialistas creen que posteriormente los habitantes de la isla pudieron reutilizar los materiales abandonados tras la ocupación romana, detalla The Science Times.

Cuerpo enterrado dentro de un ánfora grande. Crédito: Pascal Druelle, INRAP

El descubrimiento de la necrópolis poblada de Córcega muestra que la densidad de población a mediados del primer milenio fue, ciertamente, más grande de lo que cabía esperar.

En este sentido, el hallazgo de la necrópolis debería generar un renovado interés arqueológico en el noroeste de Córcega, con más ruinas, artefactos y restos antiguos esperando ser desenterrados.

Este llamativo descubrimiento seguramente generará un renovado interés arqueológico en la zona noroeste de Córcega, con más ruinas, artefactos y restos antiguos esperando ser desenterrados.

Otro ejemplo de enterramiento dentro de un ánfora. © Pascal Druelle, INRAP

Fuentes: inrap.fr | clarin.com | 7 de abril de 2021

Aníbal Clemente

Historia y Arqueología. Publicación digital de divulgación cultural.

0 comentarios: