Arqueólogos de la Universidad de Haifa (Israel) descubren un misterioso “Código Triangular” de hace 6.500 años

12:24 , 0 Comments

Fragmentos de vasijas de basalto del periodo Calcolítico decorados con triángulos.

Misteriosas marcas triangulares en cientos de recipientes de basalto de 6.500 años de antigüedad conforman un fascinante 'Código Da Vinci' de la Edad de Piedra. Hace un par de años, mientras se encontraba sobre su microscopio en la Universidad de Haifa, la estudiante graduada Rikva Chasan comenzó a notar en los bordes interiores de innumerables cuencos de piedra una gran cantidad de triángulos pequeños no documentados previamente y metódicamente incisos.
Chasan está trabajando como parte de un proyecto interdisciplinario internacional plurianual llevado a cabo por el laboratorio de la Universidad de Haifa para investigar las herramientas de piedra molida, y en el que se quiere rastrear la procedencia de recipientes de basalto en el antiguo Levante, a fin de mostrar los cambios socioeconómicos observados en el período Calcolítico alrededor de 4.500 AEC – 3.900 AEC.

Según el profesor Danny Rosenberg, jefe del laboratorio de investigación de herramientas de piedra en el Instituto Zinman de Arqueología de la Universidad de Haifa, la exploración sobre la procedencia de los recipientes de basalto permitirá al equipo internacional reconstruir antiguas rutas comerciales en el antiguo Levante y encontrar canteras y centros de producción.
Pero al analizar el “Código del Triángulo”, tal como la oficina de prensa de la Universidad lo llama, parece que los investigadores han descubierto algo más existencial.
Ejemplo del "código triangular" unificado calcolítico. (Equipo de excavación de la Universidad de Haifa)

“Las vasijas de basalto son como una lente, un punto de vista con2 el que podemos entender una imagen más amplia del período Calcolítico, dice Chasan a The Times of Israel. Es una época de transición, entre la tecnología puramente de piedra y la metalurgia de cobre temprana, y los recipientes que se estudian han sido hallados en las excavaciones que la Autoridad de Antigüedades de Israel ha llevado a cabo en una franja relativamente amplia, desde el Negev hasta el Golán.
Chasan postula que las decoraciones, claramente coordinadas, representan el inicio de una especialización artesana que atravesó zonas regionales. Es una muestra de una cooperación cultural de amplio alcance durante lo que se considera sería una pequeña sociedad a nivel de jefatura, y en la que las personas eran principalmente agricultores y pastores primitivos.

“Las vasijas de basalto vinculan… y unían a las diferentes comunidades”, dice Chasan. Las decoraciones, consistentemente similares, proporcionan evidencia de “un valor compartido entre comunidades, las cuales habrían estado muy aisladas unas de otras".

Chasan, quien creció en Nueva Jersey y se mudó a Israel hace 3,5 años para estudiar en una escuela de posgrado, estudió las vasijas de piedra de basalto de hace 6.500 años para su tesis de doctorado. Al comparar ejemplos de diferentes yacimientos, se dio cuenta de que, independientemente de dónde se encontraran en el Israel prehistórico, los tazones decorados uniformemente se grababan con pequeños triángulos que apuntan hacia abajo.


A partir de la década de 1930, los investigadores anteriores habían observado decoraciones en recipientes de basalto encontrados en cientos de yacimientos del antiguo Levante: Israel, Jordania, Líbano y Siria. Pero no la forma de los mismos.

Rivka Chasan, estudiante de doctorado de la Universidad de Haifa, realizando excavaciones en Tel Tsaf en 2017.

Según Rosenberg, los triángulos apuntan a una “estructura simbólica altamente social” que, siguiendo los lineamientos de la ley judía, establecía conductas de la gente de tiempos calcolíticos.
“Al igual que en el judaísmo, tenían reglas y convenciones que debían seguir en términos simbólicos”, dice. Obviamente, los artesanos podrían haber representado otros símbolos y formas, pero no lo hicieron. “Todos son del mismo tamaño, mirando hacia abajo, casi siempre en el interior. Había reglas, y no eran solo reglas estéticas. Para qué servían, todavía no lo sabemos”.

Lo que sabemos

Hay varios puntos de vista que se pueden sacar de estos recipientes uniformemente decorados: a través del análisis de residuos se ve que hubo un uso claro de los mismos y que no fueron solo usados para su exhibición, comenta Chasan.

A diferencia de las vasijas de sílex, las vasijas de basalto no se fabricaban en granjas-taller, sino en lugares centrales de fabricación. Los recipientes eran luego transportados a distintos asentamientos, dada la escasez de restos de producción hallados en las excavaciones de las viviendas, dice Rosemberg.

En Israel, la piedra de color negro se encuentra principalmente en el valle de Jezreel, en el Golán y en Galilea. Dada la evidencia observada en docenas de excavaciones, los recipientes eran transportados hasta cientos de kilómetros, a pesar de que las vasijas pesadas ​​de varios kilos habrían sido transportados por humanos a pie.
Según Rosenberg, los animales aún no habían entrado en escena para realizar el transporte. En un lugar de Beer Sheba se desenterraron 10 vasijas de basalto intactas, que es el depósito más grande de la zona, afirma Chasan. Ella sugiere que tal vez parte del transporte se realizaba a través de vías fluviales, pero afirmó que todavía no hay evidencias de ello.

El profesor Danny Rosenberg, de la Universidad de Haifa, sosteniendo un recipiente de arcilla de 7.200 años de antigüedad hallado en Tel Tsaf, en el valle del Jordán. (Universidad de Haifa).

Las vasijas de basalto eran un artículo caro: su proceso de fabricación requería mucha mano de obra, y, aparte de tener que obtener el material, luego había que moldearlo cuidadosamente con herramientas de piedra, proceso durante el cual podía romperse fácilmente, informa Rosenberg.
“No todas las herramientas de pedernal puede producirlos… Un golpe equivocado y se acabó”, advierte Rosenberg. "Los artesanos que crearon los recipientes invertían tiempo y esfuerzo. Y eso antes de añadir los triángulos decorativos”.

Los pequeños triángulos se tallaban de modo constante a una profundidad de aproximadamente un milímetro y luego se suavizaban.

“Normalmente, tienes un buen triángulo calcolítico en forma de V, y dentro de él hay escotillas que generalmente forman un ángulo desde la parte superior derecha a la inferior izquierda. El número de escotillas en el interior es variable, con un promedio de diez”, dice Chasan.
Chasan intentó replicar el proceso de hacer una forma triangular similar en una piedra de basalto pre-alisada y descubrió que su realización tomaba aproximadamente unos seis minutos. “No es el triángulo más hermoso que se haya visto nunca”, se rie, “Pero si consideras a los artesanos más habilidosos, realizar las decoraciones triangulares les habría llevado unas cuantas horas de trabajo. Para el recipiente en sí, sería un trabajo de varios días”, lo que podría involucrar a varias personas.
Ejemplos del “Código triangular” unificado calcolítico. (Equipo de excavación de la Universidad de Haifa).

Para Chasan, un área de exploración es la razón por la cual estos pueblos prehistóricos fabricarían vasijas de piedra tan laboriosas, cuando también se usaba cerámica durante este tiempo y es mucho menos difícil trabajar. “Es un proceso mucho más rápido, tenemos arcilla en casi todas partes, y se puede simplificar: una persona puede, en teoría, hacer el recipiente de principio a fin”, comenta.
Debido a que los recipientes de piedra continuaron produciéndose, incluso después de que otros tipos de tecnología podían haberlos dejado obsoletos, “tiene que haber un elemento de tradición”, dice. “Incluso cuando no los necesitaban, continúan haciéndolos, tal vez porque los antepasados ​​de alguien los hacían”, postuló.

Al otro lado del antiguo Levante se descubrieron estos cuencos, a menudo junto con otros materiales preciosos como el marfil de hipopótamos o elefantes (que en este momento no eran nativos en la región) y artefactos de cobre.

¿Qué significan los triángulos?

El significado simbólico de los triángulos se ha teorizado en muchas culturas, dice Chasan. “Cuando la gente ve triángulos, son muy rápidos en ver en ello la fertilidad”, se rie, pues la vagina a menudo está representada por esta forma.

Otras sugerencias incluyen que sería un símbolo del grupo, un sello o una marca del fabricante. Pero en cada cultura, dijo, la forma tiene su propio significado y no hay una teoría que pueda promoverse en particular.

La estudiante de doctorado de la Universidad de Haifa, Rivka Chasan, frente a un microscopio en el laboratorio el 30 de enero de 2019.


“Cuando comencé a trabajar como doctoranda, me interesaba observar la estandarización y la variación regional a fin de analizar la diferencia de identidad de los grupos sociales. Pero no hay tanta variación en los triángulos cuando miramos todo el espectro. La gente de Tel Aviv y el área de Beer Sheba tienen vasijas que hablan exactamente el mismo idioma”, afirma. “Estaban usando decoraciones totalmente iguales”.

Para Chasan, la mera existencia de los triángulos tiene un significado al lado de su importancia simbólica.

“El hecho de que las personas estuvieran haciendo el esfuerzo de hacer esta decoración cuando la misma no es utilitaria, funcional, habla del hecho de que la decoración en sí cumplía alguna función para ellos”, añade.

Foto: Vista al microscopio de los grabados realizados en las vosijas.

En una época prehistórica, en la que no había escritura, tal vez las escotillas diagonales dentro de los triángulos, cuyo número variaba de pieza en pieza, tenían algún tipo de significado o estaban destinadas a registrar eventos específicos, aduce
“Para mí, los triángulos tienen que haber representado algo. No es como ahora, en que la gente pierde el tiempo en nada. No había 'Facebook', no estaban frente a un ordenador todo el día. Eran personas ocupadas en la agricultura. Por tanto, tenían que decirles algo los mismos”, dijo.

Dado que las formas estandarizadas se encontraron desde el Negev hacia el norte, está claro, dice Rosenberg, que los asentamientos querían “ser parte de un mundo simbólico general… parte del mismo grupo global”.

Sin embargo,Rosenberg lo dice sin rodeos: “No tenemos ni idea de por qué eligieron producir triángulos y líneas diagonales. No hay ninguna pista clara”.

La investigación de la Universidad de Haifa de los triángulos se publicará en una próxima edición de la revista académica The Bulletin of the American Schools of Oriental Research.

Fuente: israelnoticias.com | 1 de febrero de 2019

Aníbal Clemente

Historia y Arqueología. Publicación digital de divulgación cultural.

0 comentarios: