Descubren en China sofisticadas herramientas óseas de hace 115.000 años
Retocadores óseos de hace 115.000 años hallados en Lingjing, provincia de Henan, en el centro de China. El corchete blanco indica el área donde están presentes las cicatrices de los impactos.Un análisis de herramientas óseas de 115.000 años de antigüedad, descubiertas en China, sugiere que las técnicas de elaboración de las mismas eran más sofisticadas de lo que se pensaba.
Las marcas encontradas en fragmentos de huesos excavados muestran que los humanos que vivían en China a principios del Pleistoceno tardío ya estaban familiarizados con las propiedades mecánicas de los restos óseos y sabían cómo usarlos para tallar y retocar herramientas líticas. Estos humanos no eran ni Neandertales ni Homo sapiens.
Tal descubrimiento importante, en el que ha participado el arqueólogo Luc Doyon (izquierda), del Departamento de Antropología de ls Universidad de Montreal, acaba de publicarse en la revista científica PLOS ONE.
"Estos artefactos representan el primer ejemplo del uso de huesos como materia prima para modificar herramientas de piedra como las encontradas en un yacimiento del este de Asia del Pleistoceno superior temprano", dice Doyon. "Semejantes herramientas se han encontrado en el resto de Eurasia, África y el Levante, por lo que su descubrimiento en China es una oportunidad para que podamos comparar estos artefactos a escala global".
Hasta ahora, las herramientas de hueso más antiguas descubiertas en China databan de hace 35.000 años y consistían en puntas de lanza. "Antes de este descubrimiento, la investigación sobre el comportamiento técnico de los seres humanos que habitaron China durante ese período se basaba casi exclusivamente en el estudio de herramientas talladas en piedra", dice Doyon.
Tres tipos de martillos
Los siete fragmentos de huesos analizados por Luc Doyon y sus colegas fueron excavados entre 2005 y 2015 en el sitio de Lingjing, en la provincia de Henan, en el centro de China. Los artefactos fueron encontrados enterrados a una profundidad de aproximadamente 10 metros. En ese momento prehistórico, el sitio se utilizaba activamente como manantial de agua para los animales. Los humanos probablemente usaban estos lugares de suministro de agua para matar y descuartizar a sus presas.
Los fragmentos óseos se dataron utilizando la técnica de luminiscencia ópticamente estimulada (OSL), un método ampliamente empleado por los geólogos para fechar las capas de sedimentos en las que se encuentran las herramientas prehistóricas.
Doyon explicó que los investigadores identificaron tres tipos de retocadores óseos, conocidos como martillos blandos, los cuales se usaban para modificar herramientas de piedra. El primer tipo lo constituían fragmentos de extremidades óseas erosionadas, principalmente metapodios (huesos largos de las patas de animales) procedentes de cérvidos, modelados marginalmente mediante retoques y usados intensamente en una sola área.
El segundo tipo procedía de las escamas óseas de las extremidades largas resultantes de la desmembración de grandes mamíferos, utilizados para realizar retoques rápidos o reafilado de herramientas de piedra.
Y el tercer tipo lo constituye un solo ejemplar de una cornamenta de un ciervo que, cerca de su punta, muestra cicatrices de impacto producidas al percusionar sobre determinadas zonas de herramientas líticas.
Los investigadores aún no han podido establecer a qué especie de homínidos pertenecían los usuarios de estas herramientas prehistóricas, aunque sí saben que vivieron durante el mismo período que los Neandertales y los Homo sapiens. "El enclave de Lingjing ha proporcionado dos cráneos humanos incompletos que sugieren el mestizaje entre esta especie sin determinar y los Neandertales", afirma Doyon. "Sin embargo, hay que decir que esta es una hipótesis que aún no se ha confirmado a través de una mayor investigación mediante estudios paleogenéticos".
Foto: Visita al yacimiento de Lingjing en 2016 por los coautores del artículo: Li Zhanyang, Francesco d'Errico, Li Hao y Luc Doyon. Crédito: Luc Doyon
Más descubrimientos por venir
Los análisis que condujeron a la identificación de las herramientas óseas fueron realizados por Doyon y sus colegas Francesco d'Errico (Universidad de Burdeos), Li Zhanyang (Universidad de Shandong) y Li Hao (Academia China de Ciencias), del Instituto Provincial de Henan de Reliquias Culturales y Arqueología.
Doyon participó en el proyecto mientras trabajaba en su tesis doctoral sobre las armas de caza fabricadas con materiales óseos por los primeros Homo sapiens que habitaron Europa hace entre 42.000 y 30.000 años. Después de obtener su doctorado en Antropología en la Universidad de Montreal, en cotutela con la Universidad de Burdeos (doctorado en Prehistoria) en septiembre de 2017, Doyon busca ahora una beca posdoctoral en la Universidad de Shandong, a fin de realizar análisis adicionales sobre las herramientas óseas descubiertas en el enclave de Lingjing.
"Solo hemos tenido acceso a una muestra pequeña, porque el objetivo inicial del proyecto era estudiar la naturaleza antropogénica de las modificaciones presentes en otros fragmentos óseos, y este proyecto todavía está en curso", dijo. "Los artefactos óseos excavados en este lugar están excepcionalmente bien conservados, y el análisis sistemático de toda la colección de restos óseos, durante mi próxima investigación posdoctoral, seguramente producirá descubrimientos más emocionantes".
Fuente: sciencedaily.com | 19 de marzo de 2018
0 comentarios: