Descubren un pecio romano del siglo I bien conservado en las Islas Formigues (Gerona)
La Costa Brava atesora una de las grandes joyas arqueológicas subacuáticas del Mediterráneo. El Centro de Arqueología Subacuática de Catalunya (CASC) ha informado del hallazgo de los restos de un barco romano del siglo I ante las islas Formigues, en aguas del Baix Empordà (Gerona), a unos 40 metros de profundidad y totalmente cubierto de arena. Se trata del hallazgo más importante de esta época imperial y el “mejor ejemplo” de este tipo de navíos en Cataluña. Sólo se han catalogado 4 más de estas características en todo el Mediterráneo.La exploración, que se ha realizado durante el pasado mes de octubre, ha permitido detectar un total de 37 ánforas en sólo dos metros cuadrados. Y según el responsable del CASC, Gustau Vivar (izquierda), se intuye que hay 15 metros más de casco donde es muy probable que hayan más ánforas, colocadas unas encima de otras, formando un “gran puzle” de piezas. “Este tipo de embarcaciones, que probablemente venía de la Bética (Andalucía), transportaba entre 1.000 y 2.000 ánforas, pero hasta que no iniciemos las excavaciones no podemos hablar con más exactitud”, ha expuesto Gustau.
BIEN CONSERVADAS
Durante la inmersión se ha podido constatar que las ánforas, con tapones de corcho y cerámica, están intactas y conservan el garo que transportaban (condimento que se hacía poniendo a macerar en salmuera y con diversos líquidos los intestinos, hígado y otros despojos de ciertos pescados). “Las destapamos bajo el mar y vimos que estaban bien por lo que podremos estudiar el contenido sin ninguna alteración anterior”, ha explicado el responsable del CASC.“Son barcos muy grandes que se utilizaban para transportar grandes cargas de material. En Catalunya no habíamos encontrado ninguno igual hasta ahora. Todos eran de épocas posteriores y cuando lo trabajemos podremos saber de donde venía, El Garo nos dice que era de origen bético pero eso no quiere decir que no viniera de aún más allá”, ha relatado el responsable del CASC.
Ver vídeo en éste enlace
Se está preparando un equipo de 20 submarinistas para iniciar las excavaciones. Trabajarán 3 o 4 equipos que harán inmersiones de media hora dos veces al día. Y, si todo va según el calendario previsto, se iniciarán los trabajos el próximo verano ante el peligro que puede suponer el expolio de este hallazgo.
“Todavía no hemos empezado a excavar y, por lo tanto, no hemos visto nada, pero estamos seguros que nos dará muchas alegrías”, ha concluido Gustau Vivar.
ZONA RICA EN YACIMIENTOS
El descubrimiento de esta embarcación se ha hecho en una “zona muy rica” en yacimientos. Los investigadores del CASC han encontrado más pecios en ese área pero que de momento prefieren mantenerlos en secreto ante el riesgo de expolio: “Hemos trabajado en otros yacimientos que se encuentran en buen estado de conservación pero están a más profundidad, aunque no daremos más detalles para evitarnos problemas”.
El descubrimiento ha sido posible gracias a la colaboración de la empresa Ictineu Submarins, que ha puesto a disposición un submarino que puede bajar hasta 1.000 metros de profundidad. Durante este mes de octubre se han realizado varias prospecciones entre Sant Feliu de Guixols y Palafrugell. En total se han realizado 22 inmersiones entre los 20 y los 70 metros de profundidad, que han permitido explorar nueve yacimientos, cinco de los cuáles son nuevos.
Fuente: elperiodico.com | 9 de noviembre de 2016
0 comentarios: