Un nido de abeja fósil revela un hábitat del 'Austrolopithecus africanus'
CRÉDITO DE LA IMAGEN: PARKER ET AL (2016)El análisis del primer nido de abeja fósil del Plio-Pleistoceno de Sudáfrica sugiere que el ancestro humano Australopithecus africanus vivió en un ambiente de sabana seca.
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Hay poca información paleoecologica disponible para el yacimiento en el sur de África donde el primer Austrolophitecus africanus fósil-- conocido como el 'Niño de Taung'-- fue descubierto. Sin embargo, los fósiles relacionados con los insectos, abundantes en el sitio, pueden ayudar a comprender el paleoambiente.
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El nido fósil estaba excepcionalmente bien conservado, y la estructura de sus células y túneles sugiere que fue hecha por una abeja solitaria que anidaba en el suelo. Estas abejas suelen anidar a la intemperie expuestas al sol, lo que refuerza otra evidencia reciente de que el Austrolopithecus africanus vivió en sabanas secas.
Los fósiles relacionados con los insectos son comunes, pero se les pasa por alto en gran medida en los sitios donde vivían los antepasados humanos, según los investigadores, por lo que su trabajo pone de relieve la contribución que tales fósiles pueden aportar a la comprensión de los entornos en los que vivían los antepasados humanos.
Fuente: la vanguardia.com | 30 de septiembre de 2016
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