La represión de género en la posguerra española por Aitor Manuel Vacas Carrillo
Antes de comenzar a
profundizar en el tema de la represión de género, incidiendo en el caso menos
conocido y tratado como es el de la mujer, argumentamos que es cierto, que gran parte de la
historiografía sobre al tema de la guerra civil y sus consecuencias, incidieron
más detalladamente en la lucha armada de las milicias populares y la represión
masculina. No por ello podemos negar que la mujer no tuviera un papel
importante dentro de las milicias populares o que solo contemos a través de la
documentación histórica de la marginación de esposas o hijas de represaliados
de guerra. Gracias a los testimonios de aquellas mujeres que vivieron en sus
propias carnes las atrocidades a las que fueron sometidas por la defensa de sus
propios de sus ideales, podemos conocer más sobre un tema que está viendo la
luz. Una de las primeras historiadoras que se dedicaron al estudio de las
vivencias de las presas del franquismo y quedó reflejada en su obra “Resistencia y movimiento de mujeres en
España, 1936-1976” fue Giuliana di Febo, contando con el relato de aquella
mujeres presas en la cárcel de la Ventas en Madrid. A raíz de ello, comenzarían
una corriente de estudio y de numerosas publicaciones obtenidas de los relatos
en primera persona como de la investigación documental.
Tras el inicio de la
Guerra Civil se tomaron represalias entre ambos antagonismos – los nacionales y
los republicanos. Numerosos son los casos, caso de la masacre de Badajoz
(cierto es que no hay un consenso sobre la estimación total de las
victimas, según César Lorenzo fueron en
torno a 1500, para Tuñón de Lara 1200 o
el periodista norteamericano Jay Allen sostuvo que hubieron al menos 4000
víctimas civiles por su origen republicano) O por parte del bando republicano
como fue la matanza de Paracuellos del Jarama (donde se ejecutaron ante el
avance de las tropas nacionales en Madrid a los prisioneros no afines a la
República sin distinción de clase. También se da el caso manifiesto
anteriormente mencionado sobre la estimación de las víctimas. Según el
hispanista Ian Gibson cifró la muerte de
2.400 personas siendo posteriormente revisada por afines al régimen o
militares. Pero a tenor de los listados en la Causa General o el listado del
periódico El Alcázar cifran de algo más
de 2.000 personas). A partir de 1939 y en adelante comenzaría en España un
nuevo régimen autoritario bajo el general Franco donde se ejercería por parte
del Franquismo la mayor represión tanto de hombres como de mujeres.
Respecto al papel de
la mujer durante los inicios de la guerra fue relevante tanto en la propaganda
política como en la confrontación armada. Se organizaron en movimientos antifascistas, militando en partidos de
izquierda o ayudando en el Socorro Rojo (organización comunista similar a la
Cruz Roja). Serían estos supuestos junto con que estuvieran emparentadas con
familiares afines a la causa republicana, lo que explicaría el ensanchamiento
represivo de la mujer. La represión afectó tanto a mujeres jóvenes, la mayoría casadas (algunas
con represaliados) como a mujeres maduras; tanto con mayor o menor incidencia
en actividades o militancias políticas. Los delitos a los que se enfrentaban o
imputaban eran por causas ideológicas, por antecedentes penales con
anterioridad, por tener familiares que defendían la causa republicana o por haber
trabajado en hospitales republicanos o en sectores afines, caso de Cuerpo de
Prisiones o las funcionarias de Correos; sufriendo las consecuencias de su
depuración profesional.(Egido, 2009: 57).
Tras el
establecimiento de las penas eran encarceladas en las distintas penitenciarias
para mujeres como el caso de las Ventas. Como expone (Fernando,
2003: 115-120) sobre el encarcelamiento de estas mujeres y de cómo eran sus
condiciones de vida. Menciona como a menudo también los niños de corta edad de
estas mujeres convivían en las celdas como chantaje o castigo para el resto de
sus familiares. Si la policía franquista no encontraba al marido o padre, estos
arrestaban a la esposa, madre, hijos e hijas. La situación de las presas era
muy dura debido a la falta de condiciones de higiene por el hacinamiento,
así como de los abusos sexuales (incluso a mujeres embarazadas perdiendo a sus
hijos), tratos vejatorios y torturas en que se veían sometidas. Tal era el sufrimiento y la angustia por el
que estaban pasando que gran parte de ellas se dejaban morir por inanición.
La situación de
hacinamiento en los centros penitenciarios era tal, que a partir de 1940 el
gobierno franquista creó la Comisión de
Examen de Penas, siendo en sus inicios para las penas ordinarias y dos años
después para las penas de muerte no ejecutadas. En el caso de la conmutación de
penas, estas volvían a la sociedad pero eran marginadas por el resto sufriendo
vejaciones públicas. Y si además sus maridos o padres estaban presos y no
tenían quien las sostuviera económicamente se veían obligadas a trabajos que el
resto no realizaba por la dureza o por la vergüenza de realizarlos como
criadas; pero más deshonroso sería que tuvieron muchas que ganarse la vida como
prostitutas (Sánchez, 2009: 67-75). Finalizando la exposición relativa a la
represión no podemos olvidar a aquellas
mujeres cuyas penas de muerte no se
conmutaron tuvieron el trágico final de ser
fusiladas. A tenor del cine como
de la literatura nos llega el conocido caso de las trece jóvenes pertenecientes al JSU que fueron fusiladas por
el régimen. Aunque no el único, puesto que con la apertura de fosas mediante
actividades arqueológicas en distintas zonas de la geografía peninsular (País
Vasco, Cáceres, Burgos, Ávila, Almería, Alicante…), se ha verificado como
constatado que en el fusilamiento de mujeres no tuvieron el menor escrúpulo ni
clemencia con aquellas que estaban embarazadas.
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BIBLIOGRAFÍA
- DI FEBO, GIULIANA (1979): Resistencia y Movimiento de Mujeres en España 1936-1976, Icaria, L ́Hospitalet.
- · EGIDO LEÓN, Á., FERNÁNDEZ ASPERILLA, A. (eds.), 2011: Ciudadanas, militantes, feministas. Mujer y compromiso político en el siglo XX. Eneida, Madrid, pág.57
- HERNANDEZ, F., 2003: Mujeres encarceladas: la prision de ventas. De la República al Franquismo, 1931-1941, Marcial Pons, Madrid, págs.115-120.
- · SÁNCHEZ, P., 2009: Individuas de dudosa moral: la represión de las mujeres en Andalucía, 1936-1958. Grupo Planeta, Madrid, págs.67-75.
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